El aumento de casos de dengue en Argentina tras períodos de calor y lluvias intensas obliga a adoptar medidas preventivas efectivas. La lucha contra este problema de salud pública exige un enfoque integral, que combine la eliminación de criaderos de mosquitos, el uso consciente de repelentes y la vacunación. En un contexto de creciente preocupación por esta enfermedad, estas recomendaciones adquieren una relevancia especial, apuntando a reducir el impacto del dengue en la población.
¿Cómo prevenir el dengue y qué insecticida se recomienda?
La lucha contra el dengue se intensificará tras el gran temporal que afecta a muchas partes de Argentina, donde la eliminación de criaderos de mosquitos emerge como una medida preventiva fundamental. Es crucial identificar y desechar objetos que puedan acumular agua estancada, tales como latas, botellas y neumáticos, evitando así la proliferación del mosquito Aedes aegypti. La Dra. Paola Caro, directora Médica de Vittal, insiste en la importancia de esta práctica: "Eliminar todos los criaderos de mosquitos, tanto dentro como fuera de la casa, es la estrategia más efectiva contra el dengue". Esta recomendación se basa en el hecho de que el mosquito se cría en pequeñas acumulaciones de agua, transformando objetos cotidianos en potenciales focos de reproducción.
Pese a la creencia popular, la fumigación no representa una solución definitiva en la lucha contra el mosquito transmisor del dengue. La Dra. Caro aclara que la fumigación "solo mata a una parte de los mosquitos adultos y no afecta a las larvas, pupas y huevos". Por lo tanto, su efectividad es limitada y temporal, siendo más adecuada como respuesta inmediata ante emergencias sanitarias que como estrategia de prevención a largo plazo.
Para protegerse de las picaduras de mosquitos, se aconseja el uso de mosquiteros en puertas y ventanas, repelentes sobre la piel y la ropa, y vestir prendas claras que cubran la mayor parte del cuerpo. La correcta aplicación de repelentes es crucial: "Primero se aplica el protector solar y, tras unos 20 minutos, el repelente", recomienda Caro, subrayando la necesidad de reforzar la protección en los meses más cálidos.
La educación y concienciación sobre estas medidas preventivas son esenciales para su efectividad. Informar y motivar a la comunidad a adoptar prácticas de higiene y limpieza puede significar la diferencia en la prevención del dengue, una enfermedad que no solo afecta la salud individual sino también la salud pública en su conjunto.
¿Es efectiva la vacuna contra el dengue?
La aprobación de la vacuna QDENGA en Argentina ha marcado un avance significativo en la prevención del dengue. Desarrollada para ser administrada a personas mayores de 4 años, independientemente de si han sido previamente infectadas por el virus del dengue, esta vacuna ha demostrado ser una herramienta valiosa en la lucha contra la enfermedad. La Dra. Caro destaca los resultados alentadores: "La eficacia general de la vacuna se elevó al 80,2% para prevenir los casos sintomáticos, con una notable reducción en las hospitalizaciones por dengue".
Una de las principales fortalezas de QDENGA es su capacidad para generar una respuesta inmune robusta contra los cuatro serotipos del dengue, incluso en aquellos que ya han padecido la enfermedad. Esto es particularmente importante, ya que las personas previamente infectadas tienen un riesgo elevado de desarrollar formas más graves de dengue en futuras infecciones. "Se aplica en forma subcutánea, con un esquema de 2 dosis separadas por 3 meses", explica Caro, detallando el proceso de vacunación.
Sin embargo, la vacunación no elimina la necesidad de seguir implementando medidas preventivas contra el mosquito Aedes aegypti. La Dra. Caro enfatiza que, a pesar de la protección que ofrece la vacuna, es crucial mantener las estrategias de control de vectores para minimizar el riesgo de infección. Esto incluye la eliminación de criaderos, el uso adecuado de repelentes y la aplicación de medidas de protección personal y comunitaria.
En este contexto, la vacunación emerge como un complemento esencial, pero no exclusivo, en la estrategia integral para el control del dengue. La combinación de vacunación y prevención es la clave para una lucha efectiva contra esta enfermedad, que sigue representando un desafío para la salud pública en muchas regiones del mundo.