Cáncer de piel, el gran peligro de exponerse al sol sin protección

El uso de protección solar durante todo el año es clave para prevenir. Desde el Clínicas dan recomendaciones para estar en alerta.

06 de enero, 2022 | 19.24

Con las altas temperaturas y la llegada de la temporada de verano, es común estar más expuestos al sol en los diferentes espacios libres. El inconveniente es que la exposición permanente a los rayos ultravioletas sin protección es un peligro latente. Por esa razón, según expertos sanitarios, de todos los tipos de cáncer que existen, el de piel pasa a ser el más frecuente durante la vida adulta, especialmente cuando se superan los 40 años. Ahora, desde el Hospital de Clínicas, advierten que este afecta a personas cada vez más jóvenes.

Por esa razón, más allá del calor y el constante tiempo bajo el sol actuales, recomiendan usar protector solar todo el año. Al mismo tiempo destacan la importancia de hacerse revisar los lunares y aseguran que los días nublados son más perjudiciales porque las nubes permiten que pasen las radiaciones solares que más cáncer cutáneo producen. "Si bien no contamos con datos estadísticos, la consulta por lesiones de piel sospechosas de cáncer es frecuente en el Hospital. Por tal motivo, desde hace 30 años, se realiza la campaña gratuita 'consulte por lunares' la tercera semana de noviembre”, remarcó Ariel Sehtman, médico de la División Dermatología del Hospital de Clínicas.

Según el experto, los tres tipos de cáncer en la piel más frecuentes son el carcinoma basocelular, el carcinoma espinocelular y el melanoma. "Existen lesiones precursoras de estos tres por lo cual es importante la consulta periódica con el especialista, a fin de poder detectarlas y así, ayudar a prevenir el cáncer cutáneo. Una de estas lesiones son las queratosis solares -comienzan como manchas rosadas pequeñas en sitios expuestos al sol como el cuero cabelludo, las orejas, la cara, los brazos y las piernas, lugares donde la gente no se pone habitualmente el protector solar-. Estas manchas, con el tiempo, se cubren de una pequeña escama blanca y que muchas veces no tienen síntomas. Esta lesión precancerosa, no solo es la más frecuente sino que, además, tiene hasta un 25% de posibilidad de volverse cáncer de piel", explicó.

Por otro lado, el dermatólogo señala una medida de prevención conocida referida a los lunares: "Los que tienen más de un color o distintos tonos del mismo color, que miden más de 6 milímetros, que son irregulares, empiezan a crecer o sangran, son síntomas para prestar atención". ¿Cuál es la franja etaria más afectada? "Cada vez se ven más casos en personas más jóvenes, por el hábito de tomar sol, el uso inadecuado de las camas solares y la falta de cuidados dermatológicos como el correcto uso del protector solar y vestimentas adecuadas, incluido los lentes con filtros solares", señaló. Si bien hace un tiempo era más frecuento verlo en personas de entre 40 y 50 años, actualmente hay consultas de individuos mayores de 30.

"Mientras más bronceado esté uno, significa que hemos oxidado más nuestras células cutáneas y, para protegerse del daño ocasionado por el sol, deben fabricar más pigmento", sostuvo Sehtman. Por esa razón es importante tomar medidas de fotoprotección y de fotoeducación adecuadas para disfrutar del sol con los recaudos necesarios. "Aquellas personas de ojos, piel y cabellos claros (Fototipos 1 y 2) son los más proclives a padecer cáncer de piel. Se aconseja no exponer al sol a niños menores de 6 meses, tampoco las personas mayores, porque sus sistemas de defensas son más bajos y no responden adecuadamente frente al daño solar.  Las personas que toman medicación por el motivo que sea, deberían consultar al dermatólogo por el riesgo de exacerbar lesiones cutáneas frente a la exposición solar", agregó.

Es clave destacar que detectado y tratado a tiempo, el cáncer de piel puede curarse en la gran mayoría de los casos. Por esa razón es clave visitar al médico lo antes posible. "Un diagnóstico y tratamiento precoz permite lograr tasas de sobrevida a los 5 años del 95%. Además, hoy en día existen variedad de tratamientos médicos y quirúrgicos que permiten lograr esos resultados", sentenció el médico.

Cómo prevenir el cáncer de piel: consejos a la hora de exponerse al sol

En primer lugar es clave destacar que la prevención solar tiene que realizarse durante todo el año y no solo en verano, cuando hay una mayor exposición. Esto rige para los días soleados y también para los nublados. "La prevención debe ser mediante medios físicos (lentes de sol, ropa adecuada, gorros o sombreros) y medios químicos como los protectores solares con factor 30 o superior. El protector solar debería considerarse una medicación no solo para prevenir cáncer de piel sino para otras afecciones como el lupus, la rosácea, otras dermatosis fotosensibles, personas trasplantadas, pacientes oncológicos", sostiene el profesional del Hospital de Clínicas..

Respecto a los protectores solares, Sehtman recomendó: "Se aconseja aplicarlo media hora antes de la exposición al sol y repetirlo cada dos horas, tanto días de sol como los nublados. Aquellos productos resistentes al agua no son resistentes a las toallas. Es recomendable en estos casos volver a aplicar luego de secarse por este medio. El protector solar no protege de la insolación ni del golpe de calor. Deben ser para radiaciones ultravioletas A (UVA) como B (UVB). Una vez aplicado, tarda entre 10 y 15 minutos en actuar, de allí la importancia de aplicarlo previo a iniciar la exposición".

Más allá de las campañas y las consultas para la detección, el dermatólogo remarca la importancia de que los protectores solares tengan precios accesibles y descuentos de obras sociales y medicinas prepagas para garantizar su uso periódico. Además recalca que "cuando tenemos una quemadura solar, no debemos exponernos al sol por un par de días, ni aplicarse cualquier tipo de producto como dentífricos, azúcar o alcohol, ni cualquier tipo de cremas", sino que se debe sí o sí consultar con un especialista.

El horario recomendado para evitar el sol sin las medidas de protección adecuadas es de 10 a 15. "Cuando notamos que tenemos sombra corta de nuestro propio cuerpo, ahí sabemos que es más peligroso. Si vemos sombra larga, sabemos que es mejor horario", agrega. Y sentencia: "Una última recomendación muy importante es qué pasa con los días nublados. Aunque no lo veamos, el sol siempre está. Los días nublados pasan las radiaciones más agresivas a través de las nubes, es decir, aquellas que más cáncer de piel producen. Es decir, un día nublado es más peligroso aún que un día soleado. Por eso es importante extremar las medidas de fotoprotección en estos días y no creer que porque no se vé al sol, no produce daño y por lo tanto no debo cuidarme".