Una nena de 11 años que asistía al colegio 11 en Barracas falleció este lunes en el Hospital Penna y, a raíz de este hecho, los docentes del barrio porteño 21-24 denunciaron la existencia de un Estado "ausente" por parte de la Ciudad de Buenos Aires ante la muerte de la pequeña. Los docentes afirmaron que, el viernes pasado, la niña llegó a la escuela, se descompensó y fue retirada por sus padres luego de una hora, ya que el SAME nunca llegó al establecimiento para asistirla.
Desde el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires afirmaron a la agencia de noticias Télam que se acercó "la supervisora a la escuela y mañana (por el miércoles) van a ir los grupos de apoyo que en general se presentan en estas ocasiones para dar contención a la comunidad educativa de la escuela". Y agregaron: "Es un caso muy delicado y está bajo investigación, con lo cual, no sabemos qué están diciendo los docentes, pero es un caso demasiado delicado y todavía hay que esperar los resultados de la autopsia".
Por su parte, los docentes del barrio 21-24 afirmaron en un comunicado que "fueron seis años los que transitó en nuestra escuela. Seis años en los que el Estado estuvo ausente, en los que solo se obstaculizaron los intentos por intervenir frente a tanta vulnerabilidad e injusticia". Según se conoció, la familia de la pequeña que falleció presentó, en 2021, un certificado médico que indicaba la necesidad de un refuerzo hipercalórico de vianda para la niña.
Los docentes además sostuvieron que, luego de la presentación del certificado médico, no hubo intervención alguna de la Defensoría zonal del Ministerio de Educación de CABA. En este sentido, Ailén Galante, docente de esa escuela, afirmó a la misma agencia de noticias que los educadores "están cansados de la situación" y responsabiliza al gobierno de la Ciudad de "desfinanciar la educación" y de mirar "a otro costado ante las problemáticas de los vecinos del barrio".
En este punto agregó que "desde 2020, el Gobierno de la ciudad no distribuye yogurt. Además de que la ración de leche entregada a los alumnos se redujo a medio vaso con dos vainillas y que los bolsones de comida fueron reemplazados con un sándwich de jamón y queso y una fruta". La docente remarcó que el proceso de desfinanciamiento en materia educativa también impacta en el área de contención, a causas de la desaparición del gabinete psicopedagógico del barrio.
"Hay chicos que no pueden recibir la vianda porque el Ministerio de Educación de la ciudad les exige que se inscriban en una página. La verdad estamos hablando de pibes de extrema vulnerabilidad y que muchos se nos están muriendo de hambre", remarcó la docente.
Por su parte, Pablo Francisco, secretario de Condiciones y Medio Ambiente del Trabajo, CYMAT, UTE, CTERA, afirmó a Télam: "Desde hace diez años nosotros venimos marcando hace tiempo que hay un vaciamiento en el sistema de protección de niños y adolescentes". "Necesitamos ampliar los equipos de orientación escolar y más personal para la guardia de abogados de escuela y cada vez hay menos trabajadores en el área", advirtió.