Mientras los usuarios se preparan para un aumento del boleto, la Ciudad recortó inversiones en distintas áreas de gestión y la red de subterráneos fue una de las afectadas. Con la excusa de la nueva distribución de fondos coparticipables, el Gobierno porteño informó que “se suspenden, postergan y ralentizan distintas obras de infraestructura (entre ellas ese servicio de transporte)”. La red subterránea es uno de los grandes problemas de la Capital Federal. Si bien el año pasado fue particular, y continúa siéndolo, con restricciones en su uso y estaciones limitadas, el PRO construyó poco más de un kilómetro al año desde que asumió la gestión. En tanto, desde que se firmó el traspaso del servicio en 2012 se abrieron 16.645 metros nuevos, lo que equivale a poco menos de 17 kilómetros en ocho años. Algo así como dos al año, según informó la administración porteña a El Destape.
El traspaso del servicio no fue algo rápido, comenzó en 2012 pero Mauricio Macri puso en duda varias veces la concreción del mismo ya que, argumentó, la Ciudad no iba a poder costear la seguridad pero avanzó con un fuerte tarifazo ese mismo año. De este modo, según los datos proporcionados por el Gobierno porteño, desde el 1 de enero de 2013 – año en que se efectivizó el pasaje del subte – se hicieron menos de 10 mil metros. O sea, menos de diez kilómetros. En siete años se hizo lo que el líder del PRO prometió hacer en uno.
Más allá del detalle del traspaso, las obras siempre le correspondieron a la Ciudad mediante la empresa estatal SBASE, salvo la extensión de la línea E que quedó a cargo de Nación, que la dejó en manos de Roggio. Desde 2008 (ya que el PRO llegó a la Ciudad en diciembre de 2007), se inauguraron 19.691 metros. O sea menos de 20 kilómetros. Poco más de uno y medio por año. Si se descuenta la línea E, en realidad fueron 15 kilómetros en más de una década. Apenas un poco más de un kilómetro cada 365 días.
En total, son cerca de 100 kilómetros menos que los que prometió Macri. Sin embargo, se acerca a lo que criticó durante la campaña de 2007. En el debate organizado por TN dijo que “estamos construyendo subtes a 1,6 kilómetros por año. Santiago de Chile a 14. ¿Qué somos nosotros? ¿Idiotas que no podemos construir a 15 kilómetros por año?”.
Dejando los kilómetros de lado, en doce años se abrieron 15 estaciones nuevas entre las seis líneas de subte y el premetro. Según datos de SBASE, en diciembre de 2015 se inauguraron las de Córdoba y Las Heras de la línea H; en julio de 2016 se efectuó la apertura de la de Santa Fe de la misma línea y en 2019 se inauguraron tres de la línea E (Catalinas, Correo Central y Retiro). Los dos años electorales fueron los que mayores aperturas registraron y todas se hicieron en los últimos cuatro períodos, durante la gestión de Horacio Rodríguez Larreta.
Mientras tanto, el bolsillo de los usuarios se prepara para un nuevo incremento del boleto. Este año habrá una suba del 43% en dos etapas para pasar de los actuales $21 a $30. El primer aumento será en marzo ($25.50) y el segundo entre abril y mayo, en medio de una audiencia pública. Seguirá vigente el sistema de tarifas escalonadas y se aplicarán descuentos automáticos al pasajero que supere los 20, 30 o 40 viajes mensuales. Los jubilados y pensionados, personas con discapacidad y quienes posean boleto estudiantil no pagan el pase.
Se tratan de meses turbulentos para el subte. La Ciudad le renovó la concesión a Metrovías por 12 años, con posibilidad de prórroga por otros 3, en lugar de los 20 años de la concesión anterior. Además, para este 2021 desde el Gobierno porteño prevén fuentes de financiamiento por $ 76.852 millones (27.000 millones por obtención de préstamos y colocación de deuda en el mercado, 15.000 millones en emisión de Letes y 6.123 millones en desembolsos de organismos internacionales de crédito para obras de modernización de subtes, entre otras), según informaron en el presupuesto.