Costa Salguero: las claves políticas en la puja por el acceso al río

El viernes comenzaron las audiencias para opinar sobre la privatización de la Costanera Norte. Si dos bloques cambian su postura, se puede frenar.

29 de noviembre, 2020 | 00.05

El viernes comenzó una audiencia pública histórica en la Ciudad de Buenos Aires. Ante más de siete mil ciudadanos inscritos, 250 oradores hablarán y darán su opinión sobre la construcción de edificios en la zona de Costanera Norte, frente al Río de la Plata. Se trata de un proyecto de doble lectura – tiene que pasar dos veces por la Legislatura porteña, la primera ya fue aprobada – para cambiar el qué hacer con los terrenos que hoy ocupan Cosa Salguero y Punta Carrasco, cuyas concesiones vencerán el año que viene.

En el Frente de Todos apuntan a modificar el proyecto y que el espacio sea destinado a un parque público en lugar de emprendimientos de lujo y apuestan a que, en base a lo que se escuche en los ciclos que durarán hasta fines de enero, ciertos bloques que acompañaron a Vamos Juntos – Cambiemos en la Capital – cambien su postura. Desde uno de estos sectores aseguraron que prestarán atención y tomarán nota de lo que se ponga sobre la mesa durante el debate, pero, por ahora, parecieran mantenerse firme en la posición inicial que acompañó la primera sanción del proyecto. Juntos por el Cambio, en tanto, decidió llamarse al silencio.

Desde el FdT consideraron que “el proyecto del jefe de gobierno porteño prevé la modificación de la normativa urbanística para habilitar la construcción de torres de hasta 10 pisos en la costanera, a los fines de construir un barrio de lujo con vista al río. De concretarse, esto significaría no sólo la pérdida de 19 hectáreas de tierra pública sino también la privatización del acceso al río”.  Por eso, rechazaron la privatización de la Costanera y propusieron “la creación del “Parque Público del Río de La Plata”, un gran parque público con flora y fauna nativa, propuestas culturales y educativas y un Centro Ambiental de Monitoreo del río” con gestión participativa.

Destacaron las bicicleteadas, caravanas en autos, convocatorias en kayak, intervenciones artísticas y cartas públicas que se sumaron, durante semanas, a la enorme convocatoria a la audiencia pública. Sostuvieron que “la CABA es la segunda capital latinoamericana con menos espacios verdes, déficit que adquirió especial relevancia en el contexto de esta pandemia y que se suma a los reclamos que impone la creciente agenda de demandas ambientales”. De hecho, en la Capital Federal hay 5,56 metros cuadrados de espacio verde por habitante, mientras que la Organización Mundial de la Salud recomienda como mínimo 15 metros cuadrados por persona.

Santiago Roberto, legislador por el Frente de Todos, le dijo a El Destape que “es muy emocionante e importante esta participación ciudadana para defender la costanera y salvar al río de los negocios inmobiliarios que quiere hacer el Gobierno porteño. Este es un primer freno a los planes del oficialismo que tendrá que postergar para el próximo año el tratamiento a su proyecto para construir un barrio de lujo con vista al río en Costa Salguero, en detrimento de los intereses y de la calidad de vida de los vecinos y vecinas". Además, confrontó al Gobierno al asegurar que "donde ellos quieren plantar torres, nosotros que queremos plantar árboles y hacer un parque verde y público para que todos los porteños y porteñas disfruten de la costa ribereña. Sería importante que Larreta y sus legisladores reflexionen y escuchen a las más de 7000 personas que darán su opinión durante 29 jornadas de audiencia pública y que sin dudas marcará un antes y un después en la historia de la ciudad de Buenos Aires”.

Frente a estas posturas, ante una consulta de El Destape, Juntos por el Cambio prefirió no dar declaraciones públicas, una medida que tomó todo el bloque de legisladores oficialistas porteños. Mientras tanto, UCR Evolución, que podría ser clave, aseguraron a este medio que van a esperar el resultado de las audiencias tal como lo plantearon en la primera votación. Si bien no son vinculantes, destacaron su importancia y no descartaron un posible cambio en su elección, incluso del Ejecutivo porque no se puede escuchar sin conceder la chance de ser convencido de algo, explicaron. Además, aseguraron que a veces hay margen para mejorar los proyectos y es mejor generar acuerdos antes que quedarse en la posición cómoda del comentario negativo con el diario del lunes.

El primer debate dio el visto bueno al proyecto con 35 votos positivos y 22 negativos. Si UCR Evolución cambiara su postura del “sí” al “no”, la votación se daría vuelta. Con nueve diputados propios, los oficialistas quedarían con 26 voluntades y los opositores con 31. La cuestión se complica si el cambio los lleva a una abstención porque el resultado sería 26 a 22. Los tres legisladores del socialismo podrían acercar un poco la cuestión, casi hasta el empate. Pero la clave está en un viraje de 360 grados.

La jugada

La iniciativa cuenta de dos maniobras, como una pinza: la primera se aprobó en diciembre de 2019, en la última sesión, y definió vender los terrenos a privados. Sacarlos de las manos del Estado para siempre y entregarlos al negociado. Esto fue frenado por un amparo en la Justicia y aún no hay fecha para su resolución. La segunda maniobra fue el cambio de la urbanización. El qué hacer con esas tierras.

Para eso, casi como una suerte de “esto lo definimos entre todos”, llamaron a un concurso público de ideas. Ganó una que propone, entre otras cosas, la construcción de edificios de hasta 29 metros de altura y generó indignación. No sólo el acceso al río quedará vedado para la población en general sino que, además, esas tierras quedarán en manos de privilegiados constructores y aún más privilegiados compradores. Lejos de ayudar a reducir el déficit habitacional porteño, pueden apuntar a fomentar la especulación y el encarecimiento de todas las tierras de la Ciudad, casi por arrastre.

La audiencia tiene 7.044 inscritos que cada día escucharán la opinión de 250 oradores por lo que habrá 29 jornadas en total, hasta el 27 de enero de 2021, de manera presencial y virtual. Se trata de dos fechas en noviembre – contando la del viernes -, doce en diciembre y quince en enero. Si bien no es vinculante, muchas opiniones en contra pueden torcer la postura de UCR Evolución y del Socialismo, que acompañaron en primera instancia.

Salió la primera

La audiencia pública comenzó el 27 de noviembre a las dos de la tarde. Funcionarios porteños defendieron el proyecto y aseguraron que "recupera un espacio abandonado para hacerlo público". De la mano contraria, referentes de organizaciones sociales lo criticaron porque consideraron que construye una "muralla de torres" frente al río que, por Constitución, debe tener un acceso público.

Las 29 jornadas comenzaron con una ronda de expositores convocados por la Legislatura, entre los que se encontraba el secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad, Álvaro García Resta. "Parque Salguero es el resultado de un proyecto abierto y participativo", cuyo objetivo es "convertir un espacio que hoy es privado en un gran parque público", dijo al abrir el debate que no cuenta con preguntas sino con discursos de un máximo de cinco minutos.

Agregó que "para que las personas usen un espacio público tiene que haber movimiento y ser seguro, y así va a ser el Parque Salguero, que tendrá un 74% de espacio verde y 26% de locales comerciales y viviendas". El funcionario afirmó que el proyecto busca "recuperar un espacio que está abandonado e integrarlo al resto de la ciudad".

Entre los oradores también estuvo Valeria Frank, directora del estudio de arquitectos que ganó el "Concurso Nacional de Ideas Parque Salguero-Distrito Joven". Explicó que el proyecto de su autoría prevé "tres franjas: una primera que es el borde edilicio, una segunda que es un parque contenido y una tercera que es un parque en relación directa con el río".

Por el contrario, el defensor del Pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor, se manifestó a favor de un parque "público, abierto y democrático" y consideró que las intervenciones urbanas deben ser "pensadas por el conjunto de la sociedad". Además, apuntó que la Ciudad es parte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y llamó a las autoridades de los municipios costeros bonaerenses "desde el Tigre hasta La Plata" a "transformar integralmente la costa, porque el río es una forma de vivir mejor".

Jonatan Baldiviezo, presidente del Observatorio del Derecho a la Ciudad (ODC) explicó que “el proyecto es bastante simple, consiste en construir una muralla de torres en la Costanera autorizando la venta de la totalidad de la superficie del predio de Costa Salguero. Este delirio urbanístico sólo se le puede ocurrir y atreverse a llevar adelante al peor gobierno de la historia democrática de la ciudad" y añadió: "Quieren hacernos creer que la única forma de que la costanera sea un parque público es llevando ciudad y que eso implica privatizar, construir viviendas, comercios, hoteles", lo que consideró "una mirada economicista y extremadamente sesgada".

Eva Kotsovitis, de la Cátedra Libre de Ingeniería Comunitaria (CLIC), dijo que "pensar en ciudades habitadas en condiciones de igualdad implica necesariamente democratizar el espacio público. Sin embargo, la pandemia ha consolidado el rumbo que la Ciudad hace más de una década ha elegido: el despojo de nuestros bienes comunes a partir de la privatización de más 500 hectáreas de tierras públicas”.

Koutsovitis también advirtió que la Ciudad "se encuentra en emergencia habitacional, ambiental y climática" y "enfrenta dos amenazas de origen natural: las inundaciones y las olas de calor. Por lo tanto, debe ser prioritario recuperar el borde costero como un espacio verde público para mitigar las inundaciones, regular la temperatura y afrontar eventuales ascensos en los niveles del río", resumió Télam.