La concentración realizada este miércoles al mediodía en Río Cuarto donde más de 40 organizaciones y colectivos feministas, sindicales, sociales y partidos políticos reclamaron Justicia por Nora Dalmasso y otros femicidios no resueltos en el sur cordobés, mostró el quiebre entre las familias Dalmasso y Macarrón.
Juan Dalmasso, el hermano de la víctima, tal lo adelantado en exclusiva por El Destape, asistió a la concentración que se realizó frente al Polo Judicial de Río Cuarto, mientras se desarrolló una de las últimas audiencias por el juicio para determinar si Marcelo Macarrón le pagó a un sicario para asesinar a su esposa Nora Dalmasso a fines de noviembre de 2006: “Yo quiero apoyar aquí en el momento en que estoy, para decirle que la familia Dalmasso está con el pedido de Justicia por Nora”.
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El martes, Facundo Macarrón, el hijo mayor de la víctima y del viudo acusado de mandar a matar a Nora había cuestionado la movilización en reclamo de Justicia por su madre: “Creo que esta marcha pidiendo Justicia por mi mamá es en realidad una marcha para presionar a que se condene a una persona inocente. Eso no es Justicia”.
Desde Bélgica, donde es agregado en la Embajada argentina en Bruselas, Facundo Macarrón utilizó la edición del noticiero del mediodía de Telediario Digital que conducen Vanina Cacace y Martín Urricelqui, para deslegitimar el reclamo de Justicia y esclarecimiento del crimen de su madre: “Justicia es pedir por la verdad, no pedir que se condene a una persona sin pruebas porque “no hay otra”; porque quienes investigaron no pudieron o no quisieron investigar la verdad”, se despachó el hijo mayor de Nora, quién durante el juicio le dijo a los periodistas que había visto a su mamá besándose con el agroempresario Miguel Rohrer, algo desmentido por el propio testigo.
A través de un diálogo de WhatsApp con la conductora Vanina Cacace, Facundo Macarrón también cargó contra los colectivos convocantes: “Me cuesta creer que esas mismas agrupaciones que hablan de feminismo y diversidad, no marcharon cuando estuve imputado durante más de 5 años por el solo hecho de ser gay, o cuando desde la investigación y los medios ejercieron la violencia de género institucional y simbólica contra mi mamá”.
Los dichos del hijo del viudo y la víctima son falsos: el joven fue imputado por el fiscal Javier Di Santo, porque el ADN encontrado en la escena del crimen, en la ropa de cama y en el cuerpo de su madre era de linaje Macarrón: su padre estaba en Punta del Este, presuntamente; su abuelo Félix, presentó como coartada a su esposa y a su hija Silvia y él no dijo donde estuvo la noche del asesinato de su madre. La madrugada del sábado 25 de noviembre de 2006, Facundo y su pareja de entonces, Andrés, habían salido a divertirse a Zen, el principal boliche LGTB de Córdoba; pero no lo declaró ni a la Policía ni a la Justicia. Por esa razón, la ventana horaria sin datos de su actividad y por el ADN, fue imputado por el fiscal Di Santo. Cuando llegó el informe del FBI poniéndole nombre y apellido a la abundante prueba genética colectada por los forenses Virginia Ferreyra, Martín Subirachs y Guillermo Mazzuchelli y analizada por el bioquímico policial Daniel Zabala, Facundo fue sobreseído.
En 2008 y en 2011, el FBI envió a la Justicia de Córdoba dos informes de 20 fojas cada uno, realizados por el Centro de Ciencia Forense de la Universidad Central de Florida, en los que se compararon los ADN completo e incompletos hallados en la escena del crimen y las 28 muestras enviadas por Di Santo a Estados Unidos: “Los peritos americanos identificaron tres perfiles masculinos de ADN, uno completo”, reveló aquella vez una fuente del caso. Ese perfil pertenece a Marcelo Eduardo Macarrón, quién fue imputado en marzo de 2016 por el fiscal Daniel Miralles, como autor material del homicidio de su esposa Nora Dalmasso.
Facundo Macarrón, también sostuvo: “Si la marcha fuese por pedir una verdadera justicia, y no la condena de un inocente, por supuesto que mi familia y yo acompañaríamos esta marcha”.
Palabra de hermano
“No me arrepiento de haber renunciado a la querella, primero, porque yo nunca fui querellante de la causa. La única querellante en la causa es una anciana de 92 años, postrada en una cama, con ACV, con afasia y no se puede comunicar. Si Usted cree que una persona con esas características puede ser querellante en una causa de este tipo, está equivocado”, les dijo Juan Dalmasso a los periodistas que cubrieron la concentración frente a los Tribunales de Río Cuarto.
Hace siete años, cuando se realizó la primera movilización por Ni Una Menos, el 3 de junio de 2015, la esposa y la hija de Juan Dalmasso marcharon por las calles de Río Cuarto reclamando por el asesinato de Nora. Una amiga de la familia, portó una cartulina con una foto de Nora y con fibrones reclamaba Justicia por Nora. El pasado viernes 3 de junio, cuando se realizó otra marcha por Ni Una Menos, los colectivos feministas volvieron a clamar justicia por la mujer asesinada en su chalé de Villa Golf hace 15 años y siete meses.
Juan Dalmasso criticó la evolución del juicio y apuntó a la declaración de Daniel Lacase, el ex vocero del viudo: “En esa declaración, que yo estuve, al testigo se lo condujo con cuidado y sin ocasionarle ningún contratiempo. Es más, se lo trató mejor que a mí, que me dijeron varias veces que estaba bajo juramento y que no mintiera. A él nunca se lo dijeron y no le preguntaron absolutamente nada, es más, es el único testigo que declaró delante de todo el Tribunal que había retirado US$ 20 mil en Uruguay, que había traído la factura ya en la mano, que decía que había comprado una camioneta con eso, o sea, ya venía preparado para justificar esos US$ 20 mil, y en ese momento, por las vías terrestres de Uruguay y Argentina no se pueden pasar más de US$ 10 mil, creo que eso merece una explicación de parte de quién corresponda, de oficio, y trabajar en ese tema. cómo puede haber pasado US$ 20 mil por tierra con una cuenta offshore y nadie le pida explicación”.
Sobre su ex cuñado, el viudo, Juan Dalmasso dijo: “Yo creo que a Marcelo Macarrón se lo está juzgando por un hecho que no se le puede probar, por las pruebas que yo conozco”; también reconoció que no habla con el imputado desde antes del juicio, “pregunté por su salud cuando estuvo internado la primera vez, me comuniqué con uno de los chicos, pregunté cómo estaba y qué había pasado.
Acerca de los dichos de su sobrino Facundo contra el reclamo de Justicia por Nora, Juan Dalmasso sostuvo: “Facundo es una persona adulta, puede tener sus propias opiniones, tener su propia visión sobre el tema, y yo puedo tener las mías. Yo no voy a opinar sobre lo que opinó Facundo”.
Dalmasso agregó que no confía en la Justicia: “Yo estuve en el proceso y vi el tratamiento que se le ha hecho a algunos testigos. Acá tuvieron oportunidades históricas de haber hecho algunas preguntas, algunos cambios sobre la marcha y nunca se hicieron. Por eso no creo en la Justicia” y que “los testigos que tuvieron que estar, estuvieron, lo que pasa es que no fueron aprovechados, trataron de cuidarlos en algunos casos” y citó a Daniel Lacase y a Miguel Rohrer como ejemplos.
La abogada especialista en género y diversidad, Lucía de Carlos, se mostró conforme con la convocatoria: “Para lo que es Río Cuarto, para el horario y para cómo viene dándose la cuestión judicial, el encuentro fue significativo. La cantidad de gente no fue despreciable para lo que es nuestra ciudad. Desde lo cualitativo, rescatamos que el hermano de Nora, Juan Dalmasso estuvo dando su apoyo al reclamo de Justicia por Nora, estuvo presente de manera activa, habló con los medios; y su mensaje revela que lo que hicimos estuvo bien y era necesario”.
De Carlos le dijo a El Destape que “más allá de la gente representante de las organizaciones, hubo vecinos comunes, hubo amigas de Nora y hubo familiares de víctimas que encontraron el momento para expresar su dolor. La Justicia se mostró en forma sutil, obviamente, algunos preocupados, dando vuelta, viendo lo que pasaba; y esto de que la Justicia saliera a ver lo que fuimos a mostrar, es positivo. La cuestión no quedó en el encuentro, sino que es una posibilidad que queda abierta a otras expresiones de la ciudadanía”.
En la audiencia de ayer se incorporaron testimonios por lectura y se definió que no fuera citada a declarar Alicia Cid, la última testigo que quedaba pendiente de declarar. Cid es una ex empleada judicial y vitralista que admitió haber sido amante de Marcelo Macarrón durante una década; relación que el propio viudo admitió y acotó solo a un par de años.
El viudo permanece internado en una clínica local, luego de que el pasado viernes 10 de junio le colocaran dos stents a raíz de las insuficiencias cardíacas que le habían diagnosticado. El sábado 11 había sido dado de alta, pero fue internado nuevamente porque se produjo un hematoma en una de sus piernas. Su condición es estable, confiaron fuentes de la defensa que encabeza el abogado Marcelo Brito.
El juicio se reanudará el próximo martes 21.