El presupuesto del gobierno porteño para 2021 reafirma una tendencia de cuatro años de ajuste ininterrumpido en políticas habitacionales. Este año se destina para viviendas un 17% menos que en el anterior, y no contempla ningún aumento para asistir a las personas en situación de calle, como el caso de la niña M. que conmocionó al país en la última semana.
Para quienes viven a la intemperie en las calles porteñas, el aumento presupuestario proyectado es cero. El total asignado para 2021 es de $5.840 millones para cinco programas que se reparten entre subsidios habitacionales, alojamiento transitorio, la implementación del Buenos Aires Presente (BAP), centros de día y de noche para menores de edad, y asistencia a personas adultas.
La meta de familias asistidas por los subsidios habitacionales, que no alcanzan para pagar un alquiler, se mantiene fija en 19.600 familias, aunque se estima que esta población aumentó notablemente por la crisis. En abril debería realizarse un relevamiento que, por primera vez, sería de manera conjunta entre el GCBA, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, el Ministerio Público de la Defensa y organizaciones sociales.
Por otra parte, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta destinará a las villas porteñas un 67.9% menos en relación al presupuesto de 2019. Además, a ese marcado recorte se le suma la subejecución. Al 30 de septiembre de 2020, sólo se había ejecutado el 44.34% de los $8.533 millones de pesos del presupuesto vigente para villas.
Son datos del informe “Derecho a la vivienda en CABA: baja presupuestaria para el déficit habitacional” de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). Ahí señalan que “mientras se mantengan estáticos los montos asignados, las metas y estrategias destinadas a las personas en situación de calle y en riesgo de situación de calle es poco probable que se pueda dar una respuesta adecuada a la problemática".
Es "urgente tanto fortalecer las políticas focalizadas y asistenciales destinadas a personas en situación de calle, como también implementar políticas de largo plazo que den una solución integral a esta población”, destaca ACIJ.
El 10 de diciembre de 2020 se aprobó para este año un total de $12.323 millones para la “función vivienda”. Hay una disminución constante durante los últimos 4 años. En el presupuesto 2021 baja un 17.09% en relación al año anterior, mientras que ya entre 2019 y 2020 había disminuido otro 38.78%.
También advierte sobre el ajuste en el presupuesto destinado a villas. “Para el 2021, el total es $8,302 millones, un monto similar al presupuesto vigente en 2020 ajustado por inflación y 67.9% menor en relación al presupuesto devengado en 2019”, explica el estudio.
Desde el 2019, los montos asignados a la integración socio urbana de villas y asentamientos la Ciudad también decreció de forma significativa, y limita la posibilidad de cumplir con todos los objetivos que se plantean en las leyes de urbanización de la Villa 31, Villa 20, Villa Fraga y Rodrigo Bueno.
Además, ACIJ señala que los montos destinados a villas en el presupuesto 2021 y el Plan Plurianual de Inversiones Públicas 2021-2023 no da ningún indicio de que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires planifique nuevos procesos de integración socio-urbana.
Otro análisis sobre el presupuesto destinado al ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, de la legisladora del Frente de Todos, Lorena Pokoik, señala que la caída real entre el 2016 y 2021 fue del 9%, y que “las políticas para atender a las personas que se encuentran en situación de calle resultan insuficientes”.
Destaca que nueve de los programas más sensibles pierden con la inflación; doce de los programas pierden participación respecto al 2020; y que casi ninguno de los programas aumenta sus metas físicas.
También advierte que en el 2021, 45 mil familias no recibirán el programa Ciudadanía Porteña, 600 menores de edad no estarán contemplados en el programa de Atención a niños, niñas y adolescentes vulnerables.
Los subsidios habitacionales representan un pago mensual de hasta 8 mil pesos-en casos que incluyan hijos, alguna enfermedad o discapacidad, aunque el promedio general de esa asignación es de 5 mil pesos- durante seis meses. En términos presupuestarios, si se tiene en cuenta una previsión inflacionaria prevista para 2021 de un 35 por ciento, el presupuesto de este programa cae un 11 por ciento con respecto al año pasado.