A 24 días de la desaparición de Lian Gael Flores Soraide, visto por última vez en su casa ubicada en la localidad de Ballesteros Sud, a 180 kilómetros de Córdoba Capital, la Justicia solo pudo confirmar que el nene de 3 años no se encuentra en la zona cero. Mientras las autoridades provinciales no descartan ninguna hipótesis y los rastrillajes no reflejan resultados de ningún tipo, el padre del menor se lamentó: “Nos arrepentimos de haber ido a dormir la siesta. Si no lo hubiéramos hecho, lo mirábamos”, señaló.
El niño fue visto por última vez el sábado 22 de febrero, cerca de las 15, cuando salió a jugar al patio de su hogar. Desde entonces, su paradero todavía es una incógnita. En el proceso se realizaron excavaciones, remoción de montículos de tierra y hasta inspección de hornos de ladrillo con perros rastreadores y georradares.
En el medio, la causa tuvo diversas pistas y giros: la camioneta blanca de vidrios polarizados observada por diversos testigos en el área y durante el horario de la desaparición -que generó el secuestro de vehículos de similares características para su análisis-, el traslado de la investigación a Villa María (30 kilómetros de la zona de interés) para realizar 16 allanamientos en un cortadero de ladrillos perteneciente a la comunidad boliviana que dio negativo y la mujer conocida como "La Abuelita", una curandera de 74 años que viajó a Jujuy el mismo día. Sobre esto último, si bien se allanó su vivienda y secuestraron elementos, no se hallaron pruebas que la vinculen con el niño.
Sin resultados positivos, la familia insiste en que se trató de un secuestro o una sustracción de menores, tal como el caso de Loan Danilo Peña en Corrientes. “Nuestro pensamiento que tenemos es que alguien se lo llevó. Lo pensamos desde el principio, pero no sabemos quién”, expresó Elías Flores, el papá del menor, en un diálogo con Telenoche Córdoba, al aire de ElDoceTV.
Además, sostuvo que no tiene sospecha de alguien en particular. “Lo único que le pido a la gente que lo tenga es que se ponga la mano en el pecho, en su corazón y se ponga en mi lugar, que nosotros estamos llevando este dolor y me devuelvan al niño”, expresó.
Al ser consultado sobre si consideran que Lian sigue con vida, Flores sostuvo: “Esa mentalidad tenemos. Está vivo mi hijo, con eso mantenemos el ánimo. Tenemos fe y pensamos que está con vida”. Con respecto a cómo cambió su vida luego de la desaparición del nene, contó que sus otros hijos “siempre están llorando y en cualquier momento se acuerdan y lloran, y uno empieza a llorar y todos lloramos por él”. “Mi señora está siempre llorando, ella es la más delicada con todo esto y está sufriendo”, manifestó.
"No sabemos si la investigación está bien hecha o si hay encubridores": el abogado de la familia no descartó ninguna hipótesis
Mientras el abogado de la familia Darío Baggini asegura que el pequeño no se perdió, luego de que los rastrillajes en la zona cero dieran negativo, remarcó que desconoce "si la investigación estuvo bien hecha o hay encubridores" en medio del hermetismo y la angustia de la familia. Mientras el secreto de sumario se mantiene vigente, Baggini detalló que analizan celulares, cámaras de seguridad y pruebas internacionales.
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"No podemos hablar de un chico que se perdió, la situación es peor que un homicidio o un secuestro", sostuvo el letrado en diálogo con Noticias Argentinas. Después de que finalizaran todos los rastrillajes y operativos en el predio de 18 hectáreas donde vive la familia junto a otras personas de la comunidad boliviana. Los últimos operativos de búsqueda que organizó la fiscal federal de Bell Ville, María Virginia Miguel Carmona, incluyeron los movimientos de varios montículos de tierra y aserrín y la remoción de los hornos y cortadoras de ladrillos con los que trabaja la comunidad.
En tanto, el abogado destacó el trabajo que hace la Justicia Federal, que es "más analítica, más profunda". En ese marco, aseveró que tienen en el radar "la investigación de la red de trata, como el secuestro extorsivo", pero también "cualquier hipótesis que esté manejando la Justicia provincial, porque están como parte del Juzgado Federal, revisando todas las pruebas que ha llevado a cabo la provincia"
Ahora, los investigadores judiciales se centran en los testimonios de la familia y en el entorno del menor. Fuentes judiciales aseguraron que buscan profundizar las declaraciones, ya que muchos de los familiares de Lian y de los vecinos mezclan palabras en castellano, quechua o aymara y eso hace muy difícil entender algunas explicaciones o, en todo caso, pueden confundir a los investigadores. De esta forma, se espera que en los próximos días vuelvan a pasar todos por la Fiscalía. Asimismo, buscarán reconstruir los movimientos de esa camioneta que denunciaron los vecinos y así saber si esa hipótesis es posible de sustentar.