El Gobierno autorizó el auto cultivo controlado de cannabis medicinal, al igual que el acceso de sus aceites y derivados en farmacias autorizadas. La medida fue publicada esta mañana a través del Decreto 883/2020 del Boletín Oficial y lleva la firma de Alberto Fernández, Santiago Cafiero y Ginés González García.
En la medida, figura la nueva reglamentación de la Ley 27.350 de uso medicinal del cannabis. Según indicó el Gobierno, "resulta impostergable crear un marco reglamentario que permita un acceso oportuno, seguro e inclusivo y protector de quienes requieren utilizar el cannabis como herramienta terapéutica".
"Existen experiencias a nivel internacional que indican que, en un marco de seguridad y calidad, junto con el acompañamiento médico, se reducen los daños potenciales que el uso del Cannabis de un mercado no controlado puede producir", afirma la medida.
El auto cultivo se podrá realizar con la inscripción al programa Reprocann (Registro del Programa de Cannabis) que tendrá como objeto registrar a los pacientes que necesiten acceder a través del cultivo controlado a la planta de cannabis y sus derivados, "como tratamiento medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor". Es decir, habrá que tener una autorización de este programa para poder cultivar.
De todas formas, los y las pacientes que tuvieren indicación médica para el uso de la planta de Cannabis y sus derivados podrán adquirir especialidades medicinales elaboradas en el país, importar especialidades medicinales debidamente registradas por la autoridad sanitaria o adquirir formulaciones magistrales elaboradas por farmacias autorizadas u otras presentaciones que en el futuro se establezcan. Aquellas personas que, además, no posean cobertura de salud y obra social, tienen derecho a acceder en forma gratuita
Además, el Estado Nacional se compromete a brindar colaboración técnica para impulsar la producción pública de Cannabis en todas sus variedades y su eventual industrialización para su uso medicinal, terapéutico y de investigación en los laboratorios de producción pública de medicamentos.
Para ello, se creó el “PROGRAMA NACIONAL PARA EL ESTUDIO Y LA INVESTIGACION DEL USO MEDICINAL DE LA PLANTA DE CANNABIS, SUS DERIVADOS Y TRATAMIENTOS NO CONVENCIONALES” del Ministerio de Salud. La intención es impulsar la investigación con el fin de generar evidencia científica de calidad que permita a las y los pacientes humanos acceder a la planta de Cannabis y sus derivados en forma segura.
Por otro lado, en el decreto se destacó el "rol activo" de quienes a los fines de satisfacer su propia demanda de aceite de cannabis, y ante las actuales "barreras" a su acceso, se dedicaron al autocultivo. "Se fueron organizando redes y crearon organizaciones civiles que actualmente gozan no solo de reconocimiento jurídico, sino también de legitimación social", se resaltó en el comunicado oficial.
"Todo ello describe la situación particular en la que las personas o las familias que atraviesan la enfermedad, cuando tienen a su alcance la posibilidad de atenuar los dolores, adoptan un rol activo, aún asumiendo el riesgo de ser condenadas por la normativa penal vigente", aclaró el Ejecutivo.