Un hombre que llevaba una tobillera electrónica por una denuncia de violencia de género que se había radicado en la provincia de Santiago del Estero fue detenido en las últimas horas por la Policía de la Ciudad junto a un cómplice por intentar abrir un auto para robar en Boedo.
Personal de la Comisaría Vecinal 5 B de la Policía de la Ciudad se trasladó hasta la avenida Independencia al 3500, tras ser avisado por un operador del Centro de Monitoreo Urbano (CMU), que vio, a través de las cámaras de la Ciudad, cuando intentaban abrir el capot de un Volkswagen Polo allí estacionado. Los efectivos notaron posteriormente que uno de los dos demorados, un hombre de 30 años, tenía demás adosado a su cuerpo una tobillera electrónica activada. Al otro, que tenía 54 años, se le incautó un destornillador.
Fuentes de la Policía de la Ciudad comentaron que, automáticamente, los efectivos tomaron los datos del dispositivo que tenía uno de ellos y se comunicaron con la “División Santiago Acompaña” de la Provincia de Santiago del Estero, desde donde se informó que había sido tramitado ante la Oficina de Género de esa provincia, a cargo de la Dra. Karina Espíndola, en el marco de una causa por lesiones leves reiteradas y amenazas calificada por relación de pareja en contexto de género”.
MÁS INFO
Interviene en el caso del robo, por otro lado, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 47, a cargo del Dr. Marcelo Alejandro Solimine, quien ya dispuso las detenciones de ambos acusados, el secuestro del auto y el destornillador que le encontraron a uno de ellos.
Intentó asesinar a su pareja en la calle, la bala no salió y se salvó
Un hombre de 39 años fue detenido la semana pasada tras ser herido de dos balazos por agentes de la Policía de la Ciudad en el barrio porteño de Saavedra: el implicado estaba persiguiendo con un arma a su expareja, quien resultó ilesa porque no salieron los disparos.
La joven de 29 años se encontraba caminando sola por la calle Superí al 4200. El ataque quedó filmado por las cámaras de seguridad, donde se puede observar que detrás de ella la seguía un hombre con capucha, anteojos y con un casco entre sus manos. La mujer-que mantiene su identidad en resguardo- salvó su vida debido a que no salieron las balas ya que el revolver estaba en mal estado.
El acusado fue identificado como Julián Alberto Reina, un personal trainer de 39 años que ahora permanece detenido por la tentativa de femicidio. Reina está internado y con una custodia de la Policía Federal (PFA) en el hospital Pirovano del barrio porteño de Belgrano, donde presentaba una "buena evolución" de los tres balazos policiales.