El Sueldo Anual Complementario (SAC), más conocido como aguinaldo, es un ingreso adicional que se abona en dos cuotas a lo largo del año. La primera parte se entrega hacia finales de junio, mientras que la segunda debe ser depositada antes del 18 de diciembre, según lo estipula la Ley 27.073. Este beneficio representa un refuerzo significativo en los ingresos de los trabajadores y se calcula en base al salario más alto percibido en cada semestre.
El monto del aguinaldo corresponde al 50% del sueldo mensual más elevado que el trabajador haya recibido durante el semestre en cuestión. Para calcularlo, basta con dividir ese salario por 12 y multiplicarlo por la cantidad de meses trabajados. De esta forma, quienes no hayan completado los seis meses de trabajo también acceden a un proporcional del SAC.
Por ejemplo, si una empleada comenzó su trabajo en marzo con un sueldo de $2.500, su aguinaldo correspondiente a junio sería: ($2.500/12) x 4, lo que da un total de $833. En otro caso, un trabajador cuyo sueldo más alto del semestre haya sido de $7.000 y que solo haya trabajado seis meses, recibirá: ($7.000/12) x 6, resultando en $3.500. Este sistema asegura un reparto justo, adaptado al tiempo trabajado.
El aguinaldo está garantizado por la Ley de Contratos de Trabajo y tiene un impacto relevante en la economía de las familias argentinas. Este ingreso adicional es especialmente valorado en diciembre, un mes caracterizado por los gastos de las fiestas y las vacaciones.
Además de ser un derecho laboral, el SAC permite a los trabajadores planificar sus finanzas y enfrentar con mayor tranquilidad los desafíos económicos del cierre de año.
Aguinaldo de junio 2024: qué pasa con los monotributistas, ¿me toca cobrarlo?
Cuando llega junio, todos los trabajadores del país se preguntan si les corresponde el Salario Anual Complementario (SAC), mejor conocido como aguinaldo. Pero los monotributistas no perciben este beneficio salarial.
Ocurre que este monto extra está destinado a los trabajadores registrados y a quienes perciben una jubilación o pensión. Por eso, al no estar oficialmente en relación de dependencia, los monotributistas quedan afuera de este medio sueldo, que se obtiene al dividir por la mitad la remuneración máxima percibida en el año o al hacer un proporcional en el caso de las personas que hayan trabajado menos tiempo.
Los orígenes del aguinaldo
De acuerdo con el historiador Daniel Balmaceda, la costumbre de pagar un aguinaldo en la Argentina fue iniciada en la década de 1880 por algunos comerciantes que buscaban reconocer el buen desempeño de sus empleados a finales de año. Sin embargo, y a diferencia de la forma en la que se paga en la actualidad, el cálculo de los montos era arbitrario y dependía de la voluntad de cada empleador o patrón.
Recién en mayo de 1910 surgió el primer aguinaldo oficial, que fue otorgado por el gobierno municipal porteño, encabezado por el intendente Manuel Güiraldes, quien decidió pagarle un “Aguinaldo del Centenario” a sus empleados por los festejos patrios.
La iniciativa recién se expandió en diciembre de 1945, cuando el presidente de facto Edelmiro Farrell dispuso el pago del primer SAC para todos los empleados por iniciativa del entonces secretario de Trabajo y Previsión, Juan Domingo Perón.