Una pareja y otro hombre fueron detenidos acusados de abusos sexuales a tres menores de edad, hijos de la pareja. Según la investigación, la madre de los chicos filmaba los abusos sexuales con el objetivo de vender esos videos por internet y ofreció pagar el alquiler de la casa entregando a sus hijos para los abusos.
La causa por explotación sexual infantil que investiga el fiscal Daniel Ichazo comenzó con la denuncia de vecinos que aseguraban que los chicos pasaban mucho tiempo en la calle, cartoneando y en condiciones de extrema vulnerabilidad. A partir de allí, se ordenaron pericias donde los resultados fueron escalofriantes, no sólo por el relato de lo que sucedía sino con los dibujos que realizaba una de las víctimas. En ese momento, el padre de los niños fue detenido y continuaron las investigaciones.
En esos relatos, los menores contaron que eran víctimas de abusos sexuales y que “los enviaban a ser abusados por el dueño de la casa para pagar el alquiler”, relató una fuente judicial a El Destape, que también confirmó que “los abusos eran a demanda, es decir que los niños tenían que ir cada vez que era solicitado por el dueño del lugar, que vivía en el mismo terreno que sus víctimas”.
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Con estas declaraciones, la Justicia ordenó la detención del hombre de 60 años que ya contaba con denuncias por abuso sexual en su contra. La víctima de esa denuncia fue su propio hijo y el caso está en investigación desde 2019. Además, la Justicia amplió la investigación contra el padre de los menores, ya que sospechaban que vendían estupefacientes.
Con el avance de la investigación, los especialistas que escuchaban a los menores descubrieron otro dato que los sorprendió. Los chicos aseguraron que quien los enviaba para ser abusados era su madre, que además los golpeaba y filmaba los encuentros sexuales. Con esos detalles, la Justicia ordenó la detención de la mujer y el traslado de los niños a un hogar de resguardo. Fuentes judiciales aseguraron a este medio que los niños piden estar en el hogar porque “comen todos los días y los llevan a pasear”, una situación que no conocían hasta el momento.
En la casa donde vivían los chicos con su mamá, los investigadores secuestraron celulares, una notebook y memorias digitales que serán peritadas para saber si hay más implicados y, en todo caso, si existe una red de abusos. En plena investigación, los peritos encontraron un mensaje que los impactó: “Mandame uno de los nenes”, le decía un abusador a la mujer y madre de los menores.
Ahora, los fiscales Ichazo y Ramírez avanzan con la investigación y buscan establecer si los maestros y directivos de la escuela a donde asistían los menores conocían de los abusos y no hicieron nada, por lo que podrían ser acusados por “incumplimiento de deberes de funcionario público”. Por el momento, los tres detenidos se negaron a declarar y seguirán detenidos.
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