Los cuatro futbolistas de Vélez Sarsfield acusados por el delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por dos o más personas" quedaron detenidos, durante el pasado lunes, en la Dirección General de Investigaciones de Tucumán. Sebastián Sosa (37), José Florentín (27), Braian Cufré (27) y Abiel Osorio (21) esperan por una audiencia clave que definirá si recuperan la libertad o si transitan todo el proceso en la cárcel, frente a la posibilidad del riesgo de fuga. Según pudo conocer El Destape, desde la defensa de dos jugadores ven como "contradictoria" la prohibición a abandonar el territorio impuesta por la Justicia ya que, desde un primer momento, los acusados se mostraron a disposición y colaborando con la investigación.
Cabe recordar que la determinación se tomó luego de que la víctima declarara durante cuatro horas en Cámara Gesell y la fiscal de la causa, María Eugenia Posse, pidiera sus aprehensiones -facultad que posee ante el peligro en la demora de riesgos procesales-. Ahora, según indica el sistema procesal de la provincia, su situación actual puede extenderse por un máximo de 48 horas y a partir de allí, el juez de Garantías debe definir que pasará con la libertad de los mencionados. "La fiscal consideró que ayer existían esos riesgos y deberá justificarlo en la audiencia, lo cual será el primer punto de discusión", manifestaron desde la defensa de Osorio y Cufré.
Cómo sigue la causa
Desde el momento de la aprehensión, el magistrado tiene dos días para convocar a una audiencia a todas las partes con el objetivo de comunicar si define excarcelar a los imputados o dictar la prisión preventiva. Según fuentes judiciales, tiene como fecha tope el miércoles 20 de marzo, a las 15 horas. Hasta el momento, la fecha y hora no fueron fijadas según indicaron fuentes de la causa. En el caso de que los cuatro jugadores del club de Liniers deban permanecer en prisión, estarán alojados en un establecimiento del Servicio Penitenciario Local.
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Más allá de las posibilidades que posee -desde descartar la imputación, pasando por disponer la libertad imponiendo una serie de restricciones y garantías para la víctima (tobilla electrónica, por ejemplo, para monitorearlos) hasta dictar la preventivas-, las últimas medidas tomadas por el propio juez Lucas Alfredo Taboada dan a entender que podría mantenerse en la misma línea de la Unidad Fiscal de Delitos Contra la Integridad Sexual de la 3° Nominación. De todas formas, cabe resaltar que se desconoce si será él quien defina la situación: según pudo conocer El Destape, se definirá por sorteo. Cuando fijen la audiencia, también surgirá el nombre del magistrado por una "cuestión de agenda".
Desde la defensa de los dos jugadores argentinos señalaron que en la audiencia se discutirán tres cuestiones: el control de legalidad de la aprehensión -mencionado previamente-, la formulación de cargos (imputación, evidencias en contra y calificación legal) y las medidas de coerción. "Los imputados van a declarar, todo sucedería en la misma audiencia", sostienen. Y al mismo tiempo aclaran que el tercer punto, dependerá de lo solicitado por la fiscal (si pide medida de "menor intensidad" como dejarlos en libertad con algunas restricciones o si se mantendrá firme con la idea de la preventiva).
Por otra parte señalan que "es contradictorio" el pedido de la prisión preventiva para los cuatro imputados ya que, si bien se entiende el objetivo, "se garantizó (que estén sometidos al proceso) con que vengan a la Cámara Gesell, con que acrediten con sus áereos que estarían aquí, dónde estarían alojados y que luego se presentaran (NdR: debían hacer para estar "a derecho") a sabiendas que podía existir esa posibilidad de quedar privados de la libertad". Mientras que suman que "todo es medio raro; no hubo entorpecimiento de la investigación desde el primer día, no entendemos la decisión de la fiscal".
Los futbolistas, además, prestaron consentimiento con la entrega de sus teléfonos celulares (el pasado lunes, según informaron), se sometieron a muestras de una pericia de ADN -para comparar- y no analizan abandonar el país, marca la defensa, "hasta que se solucione esto".
Sin embargo, más allá de la predisposición y colaboración, desde la defensa de Osorio y Cufré señalan que la declaración en Cámara Gesell "es una evidencia más, a nuestro criterior no fue contundente" y aseguran que "no dijo nada que no haya dicho antes, aún con más inconsistencias ayer". Teniendo en cuenta esto, subrayan no entender los riesgos o las fundamentaciones para privarlos de la libertad. "Son personas que acreditaron el arraigo personal (contrato de locación), laboral (club Vélez), estuvieron entrenando (separados) y comercial (acreditando el domicilio de sus facturas que coinciden donde viven), por eso no entendemos", sentenciaron.
Por su parte, desde la defensa del arquero Sebastián Sosa también remarcaron que desconocen cuándo será fijada la audiencia pero que su situación "es distinta" a la de Florentín, Cufré y Osorio ya que "hasta ahora, es partícipe secundario" del hecho denunciado. Según la denuncia, habría invitado a la joven de 24 años al hotel a través de Instagram, pero se habría retirado antes de que suceda el abuso. "La situación sobre si recuperaría la libertad es muy compleja, es decisión del juez en la audiencia", marcaron.
Tras la declaración de la víctima, se espera que en las próximas horas también le realicen una pericia psicológica. Mientras tanto, los cuatro jugadores se encuentran detenidos y a disposición del Poder Judicial provincial; esperando por la audiencia que defina su futuro.
Prohibición de salir del país para los cuatro acusados
La semana pasada, la fiscal Posse envió una solicitud para prohibir a los cuatro futbolistas salir del país por 90 días en el marco de la investigación, que fue aceptada por la Justicia. En la resolución a la que tuvo acceso El Destape, el juez Taboada señaló que se debe incorporar la perspectiva de Género en la causa como "pauta hermenéutica constitucional y convencional, y como principio rector", brindándole protección y una "mayor sensibilidad" desde el Poder Judicial.
En esa línea, argumentó que "resulta entonces necesario garantizar en el presente proceso tomando todas las medidas que resulten necesarias a fin de evitar una revictimización de la denunciante, quien sufrirá un segundo hecho de violencia, en este caso por parte del Estado, en caso de no brindar las garantías procesales para arribar a una respuesta por parte de la Justicia", mientras que asimismo añade que resulta "un pedido razonable" frente al hecho investigado y su gravedad; específicamente, por la "multiplicidad de medidas investigativas" que están pendientes.
"Hasta que ello suceda, es imperioso asegurar la sujeción al proceso de los imputados", poniendo especial énfasis a que dos de ellos son extranjeros y pueden conseguir asilo en el exterior contando con la economía para hacerlo. El magistrado se refiere específicamente al arquero Sosa, de nacionalidad uruguaya y el volante Florentín, de nacionalidad paraguaya. Este último, más allá de los fuertes rumores que surgieron en la prensa durante el fin de semana, no abandonó el territorio nacional para retornar a su lugar de nacimiento. Incluso, dijo presente el pasado lunes y quedó aprehendido junto al resto de los acusados.