La denuncia de una ONG estadounidense llegó al Fiscal de Morón Claudio Oviedo y junto con personal de cibercrimen del Departamento de Pergamino allanaron una casa en la que encontraron un verdadero horror: un hombre de 37 años tenía una colección de muñecos realistas, desde bebés en cubas a chicos de 4 o 5 años y varios objetos y juguetes sexuales. Además, los especialistas detectaron que en su computadora tenía un manual que enseñaba explícitamente cómo abusar sexualmente a menores de edad.
“Cuando allanamos tenía la computadora prendida y estaba el manual abierto” confió una fuente judicial que participó del operativo a El Destape. El sistema utilizado por el área de Cibercrimen de Pergamino, que reúne varias plataformas, categorizó al acusado como el “más peligroso del país” y además la persona que “mayor tráfico de imágenes” de Argentina.
La denuncia de la ONG estaba basada en el sistema Child Protection System, que había detectado que desde una computadora conectada a una dirección IP de la localidad de Ituzaingó se habían descargado y compartido más de 100 mil fotos y videos de abuso de menores. Con estos datos, el Departamento de Delitos Conexos a la Trata de Personas de la Procuración Bonaerense, encabezado por la Dra. Weingast, instruyó la causa formal a principios de abril.
La Justicia y los especialistas trabajaron varias semanas para reunir las pruebas y ordenar el allanamiento que fue llevado adelante por la Policía Bonaerense y funcionarios de Interpol. El análisis de las imágenes secuestradas reveló que el hombre detenido descargó y compartió imágenes donde menores de entre 2 y 10 años son abusados sexualmente por mayores de edad.
Cómo identificaron al presunto mayor pedófilo de Argentina
El sospechoso, cuya identidad se mantiene en reserva para resguardar a posibles víctimas, podría ser indagado este mismo martes. El hombre quedó detenido acusado de “distribución y tenencia agravada de material de abuso sexual infantil” ya que hasta ahora las autoridades no pudieron comprobar que haya producido el material, sino sólo que lo descargaba y compartía.
“Hay que tener en cuenta que detrás de estos criminales sexuales hay víctimas que son niños y que muchas veces son captados a través de redes sociales” destacó el Fiscal Oviedo.
Para compartir esos archivos, el hombre usaba plataformas online muy famosas hace años pero que en estos años son fuente principal para pedófilos, como Ares, Emule y BitTorrent.