En las últimas horas, la mujer mendocina de 39 años que denunció haber sido víctima de abuso sexual reiterado por dos rugbiers de la selección de Francia volvió a declarar en sede judicial, amplió la denuncia realizada y respondió preguntas de las partes. El hecho denunciado, que tiene como protagonistas a los deportistas Hugo Araudou (20) y Oscar Jégou (21), habría ocurrido en la madrugada del pasado 7 de julio en un hotel de la ciudad de Mendoza donde el equipo se hospedaba tras enfrentarse a los Pumas esa misma tarde.
Durante la jornada del martes, la abogada de la denunciante Natacha Romero dialogó con la prensa al abandonar la Unidad Fiscal de Delitos Sexuales y aseguró que se trató de "una declaración sin fisuras, clara y concreta". Al mismo tiempo, la querella sostuvo que la mujer se encuentra bajo tratamiento psicológico y psiquiátrico y que fue ella quien solicitó la ampliación de la declaración. "Tuvo que relatar y recordar todos los momentos que vivió. Y si bien le hicieron escuchar audios y, más allá de la revictimización que eso supone, pudo explicar uno por uno el contenido de esos diálogos", remarcó.
Según fuentes judiciales, la mujer ratificó que fue abusada sexualmente en seis oportunidades a lo largo de la noche, que además fue golpeada y asfixiada. "No están los resultados del laboratorio todavía y la inspección ocular del hotel todavía no la ordenan. Entendemos que sería algo pertinente para la causa, pero no contaban con un aparato sonoro para poder hacer la inspección como corresponde así que está pendiente la prueba", añadió sobre la investigación.
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Este jueves, tal como confirmó Romano, se realizará la indagatoria a Araudou y Jégou quienes se encuentran hace más de 20 días con prisión domiciliaria en territorio mendocino. "Seguramente la defensa hará un pedido por la libertad de los deportistas, en el caso de que no se pida la preventiva. No implica que ellos no continúen imputados y lo razonable o coherente en este caso, por el riesgo de fuga y de la investigación, es que continúen en nuestro país", señaló. A su vez sostuvo que la querella no se opuso a la domiciliaria pero hará "las oposiciones correspondientes o el control jurisdiccional pertinente" y apuntó que "no se cumplieron a rajatabla las condiciones que se impusieron".
Por su parte, el abogado defensor Rafael Cúneo Libarona -hermano del ministro de Justicia de la Nación- aseguró que "se probó la inocencia de los dos jugadores" debido a que, durante la declaración de la mujer, "existieron notables contradicciones y se acomodaron distintas versiones, entre su primera declaración y la segunda". De cara a la jornada del jueves, aseguró que ambos deportistas contestarán a todas las preguntas.
Hasta el momento, la causa está compuesta por el aporte de médicos, las imágenes de las cámaras de seguridad del hotel y las declaraciones del chofer del Cabify que la llevó hacia su domicilio, la amiga con la cual fue al boliche donde conoció a los denunciados y compañeros del seleccionado nacional francés que se encontraban en habitaciones contiguas. "Están enojados y tristes por este avasallamiento a su vida privada, porque son inocentes", marcó Cúneo Libarona. El próximo lunes vence el plazo y el fiscal deberá resolver si siguen detenidos o recuperan la libertad.
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La denuncia contra los rugbiers
Según se pudo conocer de la denuncia, tras la victoria ante 'Los Pumas' en Mendoza, ambos rugbiers -junto a otros miembros del plantel- salieron a una discoteca local y allí, Araudou conoció a la mujer que luego los denunció. El joven de 20 años la habría invitado a tomar un trago y ella aceptó; luego, tiempo después, se acercaron al hotel Diplomatic -donde ellos se alojaban- a seguir bebiendo. Tras pasar por el baño, sin mediar palabras, fue atacada sexualmente y a lo golpes, indica la denuncia. Minutos después, Jégou ingresó a la habitación y repitió el mismo accionar, con la misma violencia.
En las grabaciones del boliche Beerlin, se confirma la presencia del grupo de jugadores franceses -en primer plano a Araudou-. El joven aparece en las filmaciones junto a la barra, el sábado antes de la medianoche, pidiendo un trago y fumando un cigarrillo. Dos horas más tarde, la víctima arriba al hotel junto al deportista, quien compartía habitación con el segundo denunciado. Acusó un malestar y cuando quiso irse, fue brutalmente abusada y golpeada. Una hora después, Jégou se hizo presente y se sumó a las agresiones. A las 8.30, la mujer abandonó el hotel.
Por su parte, en la versión de lo rugbiers, Araudou confirmó que retornó al hotel en compañía de la mujer -situación registrada por las cámaras de seguridad del lugar- y de otra pareja (un jugador y una chica mendocina), quienes se presentarán como testigos. Cúneo Libarona señaló que, en las imágenes, se observa cómo la mujer espera en la puerta de la habitación que el joven y que "esa espera, demuestra el consentimiento". A su vez, según el letrado, cuando Jégou arribó a la habitación "se fue a dormir" y la mujer abandonó la habitación en un remis.