El Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires regulará la utilización del lenguaje inclusivo por parte de los docentes en las escuelas, según una nueva resolución. Este proyecto tiene como objetivo "ordenar el uso del lenguaje" para "facilitar" el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Dentro de la medida, incluso se prohíben materiales didácticos que utilicen el lenguaje inclusivo.
La resolución de la cartera que dirige Soledad Acuña se presentó luego de que el gobierno porteño mostrara los resultados de las evaluaciones FEPBA (Finalización de Estudios Primarios de la Ciudad de Buenos Aires) y TESBA (Tercer año de Estudios Secundarios de la Ciudad de Buenos Aires) que no brindaron las calificaciones esperadas. En las pruebas se demostró que lo más afectado fue la comprensión lectora de los jóvenes, ya que se obtuvo un resultado promedio que demuestra un retroceso de casi 4 años.
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En este contexto, el gobierno de la Ciudad decidió limitar el uso del lenguaje inclusivo por parte de los docentes: las actividades deberán desarrollarse conforme a las reglas del idioma español, sus normas gramaticales y los lineamientos oficiales para su enseñanza. Esta nueva normativa rige también para las comunicaciones institucionales. Por este motivo, el Ministerio de Educación de la Ciudad se encargará de entregar material didáctico específico para regular el contenido dictado en clase y dejará de lado aquellos textos que estén escritos con lenguaje inclusivo.
La nueva resolución se basa en la premisa de que "la lengua española brinda diversas opciones para comunicarse de manera inclusiva sin necesidad de tergiversarla, ni de agregar mayor complejidad a la comprensión y fluidez lectora". Además, se conoció que la medida aplica únicamente a los contenidos que dictan los docentes en clase, al material que se le entrega a los estudiantes y a documentos oficiales de los establecimientos educativos.
En paralelo, la Ciudad profundizará el Plan de Recuperación de Aprendizajes con nuevas iniciativas específicamente diseñadas para los alumnos de primaria y secundaria y se profundizarán las existentes. Este plan incluye la extensión del ciclo lectivo de 180 días a 192, escolaridad los días sábado, más horas efectivas de clase durante la semana con jornada extendida obligatoria y capacitaciones a docentes para seguir las nuevas normativas.
La periodista Ana Correa utilizó sus redes sociales para exponer detalles sobre la nueva normativa del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. "Una consecuencia grave y nefasta de la resolución del Ministerio de Educación del Gobierno de la Ciudad es que en los hechos están prohibiendo libros y textos de autoras y autores que usen lenguaje inclusivo. Locura total", puntualizó la comunicadora en Twitter.
Por qué existe el lenguaje inclusivo
Históricamente, el lenguaje se utiliza como un instrumento de transmisión y construcción de sentidos comunes y, por eso, es un insumo clave para visibilizar identidades y reconocer derechos de grupos históricamente discriminados y negados. Específicamente, este último es el objetivo del lenguaje inclusivo.
En los últimos años, y gracias a la lucha feminista y colectivos de diversidad sexual, logró visibilizarse la estructura patriarcal que rige a la lengua castellana, motivo por el que el la instalación del lenguaje inclusivo propone una mirada más neutral sobre la sociedad. Quitar al masculino como lo genérico y visibilizar a todos los grupos en relación a los géneros e identidades es el objetivo principal del lenguaje inclusivo.
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