Luego que el gobernador Axel Kicillof confirmara que “a pesar de la pandemia habrá temporada de verano”, el gabinete provincial trabaja desde hace semanas y a contrarreloj con las distintas cámaras y federaciones de turismo y los intendentes que gobiernan ciudades turísticas para habilitar las vacaciones que se vienen. Cómo serán los nuevos protocolos.
Uno de las medidas principales que están trabajando en conjunto el gobierno de la provincia de Buenos Aires junto a la nación y los intendentes bonaerenses de cara al verano 2021 es la de hacer operativos específicos de COVID. “Así como todo los años se hace el Operativo SOL para reforzar la seguridad en la costa, se está evaluando hacer algo similar para prevenir contagios mayores y evitar rebrotes”, detallaron a El Destape voceros del área de salud provincial y los funcionarios de turismo de las ciudades de Pinamar y Mar del Plata.
El presidente de la Cámara Argentina de Turismo, Aldo Elías, confirmó a El Destape que, una de las posibilidades que evalúan con el gobierno nacional para el verano 2021 es “ampliar el periodo vacacional de diciembre a abril”. En ese sentido detalló: “Apuntamos a que, respetando las normativas del ministerio de Salud, que los destinos no tengan una saturación en cuanto a la llegada de turistas, por eso vamos a intensificar la promoción y difusión de los destinos aledaños a las ciudades importantes”.
Además agregó que “extender la temporada hasta abril es una alternativa que se presenta para tener una temporada donde se cuide la distancia social, pero es una idea que se propone al Ministerio para dar soluciones a una situación tan compleja como la que se está viviendo”. Consultado sobre la posibilidad que la temporada se dé con circulación entre provincias, Elías fue tácito: “Sin movilidad no hay turismo, no tiene sentido abrir la temporada de verano si no hay movilidad”.
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La Feliz
Desde la Cámara de Turismo detallaron que las tres ciudades más elegidas por los argentinos y argentinas en el verano son las Iguazú, Bariloche y Mar del Plata. A modo de ejemplo entre diciembre de 2019 y marzo de 2020 visitaron la ciudad de Mar del Plata 3.500.000 de personas. De esa cifra el 70% fueron bonaerenses, porteños y porteñas, mientras que el 30% restante provino del resto de las provincias argentinas ¿Es posible repetir ese caudal de personas? Con protocolos y distintos cuidados la ciudad feliz se prepara para recibir a la mayor cantidad de turistas en el verano 2021.
El presidente del Ente Municipal de Turismo de Mar del Plata, Federico Scremin, en diálogo con El Destape, expresó estar en “contacto permanente con el gobierno bonaerense para definir cómo será la temporada que se viene”. Hasta el momento presentaron protocolos en el sector de hotelería, gastronomía y los balnearios.
Para evitar aglomeraciones en las posadas los desayunos se servirían dentro de las habitaciones y se manejarían a través de sistemas digitales y online para evitar contactos directos. También evalúan mayor cantidad de días de estadio. “En vez de quedarse los fines de semanas, los ideal sería que estén más tiempo aunque sean menos personas”, detalló Scremin.
Los balnearios registrarán el ingreso de las personas por sombrilla y carpa, tomarán la temperatura, el tapaboca será obligatorio en los lugares cerrados y el uso de las duchas y vestuarios estará restringido.
Desde la gastronomía, que incluyes restaurante y bares, le anotarán los datos a cada persona que llegue y le tomarán la temperatura. La carta se leerá a través de código Qr y, en el caso de las confiterías, la estadía máxima será de 45 minutos. “Estamos evaluando que haya mesas afuera y actividades al aire libre que pueden ser pequeños espectáculos y autocine y auto teatro”, detalló el funcionario marplatense.
Por otra parte especificó que aún “no tenemos confirmación de cuándo volverán los micros, trenes y vuelos a la ciudad”. En lo que respecta a las camas hoteleras, Mar del Plata posee 50 mil plazas y más de 150 mil extrahoteleras. En relación a las cifras que se están manejando de cara a la temporada, Scremin indicó “la temporada de verano que pasó, las tarifas estuvieron por debajo de la inflación, la idea es trabajar de la misma manera para lograr un equilibrio”.
En vez de quedarse los fines de semanas, los ideal sería que estén más tiempo aunque sean menos personas, dijo Scremin
Pinamar
Otra de las ciudades balnearias más elegidas es la ciudad de Pinamar. Con una población de 45 mil habitantes, la localidad posee 330 mil plazas. La realidad es distinta a Mar del Plata ya que el sector inmobiliario es más fuerte que el hotelero. Es decir hay más propietarios que turistas durante las vacaciones.
En diálogo con El Destape, Juan Ibarguren, secretario de turismo de Pinamar, explicó que “le planteamos al Gobernador comenzar la temporada en noviembre para evitar las aglomeraciones”. En ese sentido detalló que ya presentaron protocolos hoteleros y gastronómicos y que aún falta el de los balnearios. “Hay un borrador que apunta a cómo será la utilización de espacios de sombra, es decir las carpas, sombrillas y los vestuarios. La idea es que haya un servicio más personalizado para evitar reuniones y aglomeraciones”. Sobre ello habrá un protocolo provincial que se aplicará a cada ciudad. La ventaja que posee Pinamar es que tiene 44 balnearios y 22 kilómetros de playa pública, por lo que el distanciamiento social debería cumplirse sin mayores inconvenientes.
En lo que respecta a los hoteles y las casas, “estamos evaluando que las estadías sean más prolongadas”. Para ello, la idea es reforzar el sistema de salud. En el caso de Pinamar, el 85% de los turistas que veranea tiene obra social o prepaga, por lo que desde el gobierno municipal analizan “otorgar espacios para que se instale el personal médico con su equipamiento”.
“Estamos trabajando con las prepagas y obras sociales para que puedan expandir las presentaciones en la ciudad”, detalló Ibarguren. Además de ello, trabajan en conjunto con la Provincia para “reforzar el sistema sanitario público”, a través de operativos específicos para el coronavirus.
Finalmente buscarán que las tarifas en los hoteles, restaurantes y confiterías sean un equilibro entre el sector privado y los turistas: “Hace 6 meses que no pueden abrir por lo que entienden que hay que hacer un equilibro en los precios. La idea es que supere la inflación, pero ello dependerá mucho de la demanda”, detalló el secretario de turismo.