El Papa Francisco criticó el consumismo "obsesionado" de ropa y comida

El pontífice lamentó "la avidez de comunidades que tienen todo y a menudo ya no sienten nada en el corazón".

06 de enero, 2022 | 15.14

El Papa Francisco criticó hoy el consumismo "obsesionado" con la compra de comida y de ropa en el mundo. El pontífice celebró en el Vaticano la denominada Misa de la Epifanía del Señor y dio un crítico discurso en el que marcó que las personas se obsesionan con ciertas necesidades, dejando de lado otras cosas más importantes, según su criterio.

"Nosotros somos lo que deseamos. Porque son los deseos los que ensanchan nuestra mirada e impulsan la vida a ir más allá: más allá de las barreras de la rutina, más allá de una vida embotada en el consumo", planteó el pontífice durante la celebración en la Basílica de San Pedro.

"La falta de deseo lleva a la tristeza y a la indiferencia", reconoció el Papa Francisco en la Misa de la Epifanía del Señor

En este contexto, Francisco expresó:  "Nos hemos obsesionado con las necesidades, con lo que comeremos o con qué nos vestiremos, dejando que se volatilice el deseo de aquello que va más allá".

Con un tono crítico, el Papa lamentó "la avidez de comunidades que tienen todo y a menudo ya no sienten nada en el corazón" y afirmó que "la falta de deseo lleva a la tristeza y a la indiferencia".

Durante la Misa de este jueves, la segunda del año, el pontífice trazó también una autocrítica hacia el catolicismo y se preguntó si la Iglesia no se encuentra en una posición de autoreferencialidad. "¿Nuestras palabras y nuestros ritos provocan en el corazón de la gente el deseo de encaminarse hacia Dios o son lengua muerta, que habla sólo de sí misma y a sí misma?", se preguntó. Tras esto, se lamentó: "Es triste cuando una comunidad de creyentes no desea más y, cansada, se arrastra en el manejo de las cosas en vez de dejarse sorprender por Jesús".

El Papa lamentó “que las mascotas tomen a veces el lugar de los niños”

El papa Francisco lamentó este miércoles “que las mascotas tomen a veces el lugar de los niños”, durante la primera audiencia general del año realizada en la sala Pablo VI del Vaticano, y calificó la decisión de no tener hijos como "una forma de egoísmo".

"Vemos que algunos no quieren tener hijos. A veces tienen uno, y ya, pero en cambio tienen perros y gatos que ocupan ese lugar”, cuestionó, mientras que agregó que “la negación de la paternidad y de la maternidad nos menoscaba, nos quita humanidad, la civilización se vuelve más vieja”.

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