Tras el escándalo de las vacunas VIP, el presidente Alberto Fernández aseguró que sintió "dolor" al exigirle la renuncia al ahora ex ministro de Salud, Ginés González García, pero consideró que "lo que hizo es imperdonable". En una entrevista con un matutino porteño, el mandatario habló por primera vez de uno de los días más complejos de su gestión en la Casa Rosada.
"Le exigí la renuncia con dolor. Ginés (González García) era un gran ministro. Y además lo quiero. Pero lo que hizo es imperdonable. La política es ética, tenemos que terminar con este tipo de prácticas, con la cultura argentina de la viveza, la picardía, el manejo de las influencias", sostuvo el mandatario en diálogo con Página/12.
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"Yo no tolero cosas así. Ni hago cosas así. Manejo mi propio auto. Cuando no era funcionario y me ofrecían pasar al Salón VIP sin hacer cola, me negaba. Como presidente no puedo consentir que se concedan estos privilegios", insistió el jefe de Estado. También remarcó que siempre pensó que cuando no estuviera Ginés González García su reemplazante sería Carla Vizzotti. "Es la continuidad de las muchas buenas políticas de Ginés. Está más activa. Se especializa en epidemiología, tiene gran experiencia con el coronavirus. Tuvo actuación decisiva para conseguir la vacuna Sputnik V", indicó Fernández.
La carta de Verbitsky después del escándalo
Por otra parte, el periodista Horacio Verbitsky publicó una carta en su sitio en la que se refirió a su vacunación de privilegio. La inesperada confesión de Verbitsky al aire en la radio provocó el sismo en el gobierno que terminó eyectando a Ginés del Ministerio de Salud. "Mi vacunación en el Ministerio de Salud fue un error grave, del que me arrepiento, y por el que pido disculpas. Asumo sin excusas la parte que me toca", escribió el periodista en su sitio El Cohete a la Luna. "Si lo hice y, sobre todo, si luego lo conté sin que nadie me lo preguntara, es porque no advertí que fuera algo incorrecto, el ejercicio de un privilegio", agregó.