El secretario General de ATE la Ciudad de Buenos Aires, Daniel Catalano, denunció penalmente este miércoles al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y a su ministra de Educación, Soledad Acuña, por enviar a la Policía de la Ciudad a denunciar a los padres de los jóvenes que encabezaron las tomas de colegios.
Catalano, secretario Adjunto de la CTA Nacional, hizo la presentación judicial a raíz de "la persecución policial e ilegal a estudiantes y sus familias y la criminalización de la protesta pacífica". A través de su Twitter, el gremialista lanzó: "Viandas de miseria, falta de vacantes y ahora Policías en los ingresos y amenazas a las familias. ¿Y si en vez de marketing y represión Larreta prueba con aumentar el presupuesto?"
La denuncia penal fue realizada este miércoles y está aun pendiente el sorteo del Juzgado y Fiscalía interviniente. En su presentación, Catalano reafirmó el carácter pacífico de las protestas de los estudiantes y repudia el accionar del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que "ha promovido denuncias no sólo contra los estudiantes sino también contra sus progenitores o adultos responsables, con el fin de criminalizar hechos legítimos de protesta que el Estado debe resolver por las vías pertinentes y no mediante el uso del aparato punitivo".
"Las acciones de protesta se inscriben en una profusa e histórica forma de lucha y protesta, que debe ser incluida y tolerada por una sociedad democrática y en Estado de Derecho", sostuvo y agregó que "en nuestro país, desde la Reforma Universitaria de 1918 los estudiantes han reclamado activamente por derechos que entendían conculcados y muchas veces gracias a ese empuje y esa actitud de protesta y reclamo se han logrado avances indiscutibles que hoy en día se consideran logros de la sociedad en su conjunto".
Madres y padres de estudiantes que participan de tomas en escuelas secundarias recibieron ayer notificaciones en las que se les informó que esa acción infringe el artículo 60 del Código Contravencional porteño, lo que consideraron un acto de "criminalización de la protestas" que "persigue al que piensa distinto", según dijeron a Télam.
Patrullas de la policía porteña llegaron hasta los domicilios particulares entre de padres del Mariano Acosta y el Lenguas Vivas (el “Lengüitas”), en algunos casos pidiendo información sobre horarios y datos personales; en otros, exigiendo la firma de una notificación extraña. Uno de estos episodios fue grabado y quedó documentado mediante el audio adjunto a esta información, donde el oficial lee una confusa acusación a un padre del Lengüitas.