La ministra de Economía, Silvina Batakis, participó como oradora principal en una sesión donde los ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20 abordaron cómo impulsar la agenda de finanzas sostenibles para fortalecer la recuperación, y fomentar el crecimiento sostenible de la economía global.
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Durante su exposición de anoche, Batakis remarcó que "la pandemia nos ha demostrado que la recuperación y el crecimiento a largo plazo de nuestras economías no pueden darse a cualquier costo", según se informó hoy. En este sentido, la titular del Palacio de Hacienda afirmó que "es esencial considerar los diferentes impactos de las transiciones hacia economías con bajas emisiones de gases de efecto invernadero, y la necesidad de garantizar el acceso al financiamiento a largo plazo y asequible para las economías de mercado emergentes y los países de renta baja".
Ante los representantes del G20, Batakis recordó que el limitado espacio fiscal y la carga de la deuda externa en muchos países de renta media y baja pueden condicionar sus estrategias de desarrollo. Así, subrayó que "las transiciones deben ser justas, pero también inclusivas, asequibles y sostenibles, incorporando una perspectiva social, además de consideraciones macroeconómicas, fiscales, financieras y de balanza de pagos".
Finalmente, la ministra de Economía remarcó la necesidad de "reformar la arquitectura financiera internacional para permitir el desarrollo de mercados de capitales locales sostenibles, y orientar y aprovechar estratégicamente las inversiones públicas y privadas para impulsar las transiciones hacia economías y sociedades más resilientes, sostenibles e inclusivas".
En la reunión anterior que Batakis tuvo con los representantes de las naciones integrantes del G20, la ministra resaltó la problemática respecto de la inflación a escala global que se está dando actualmente.
"El aumento de la inflación mundial y, en particular, de los precios de los alimentos y la energía, está incrementando no sólo la inseguridad alimentaria y energética, sino también la desigualdad mundial", algo que, según afirmó, "ocurre en un contexto de desigualdades ya crecientes heredadas de la crisis de Covid-19 y de las diferencias en la capacidad de respuesta de las distintas economías".
En este sentido, remarcó la necesidad de trabajar en conjunto para reforzar el proceso de recuperación económica, y alentó a sus pares a tomar decisiones audaces para minimizar los efectos de la crisis, teniendo en cuenta que éstas tendrán impacto en los países del sur global.