El ministro Sergio Massa se reunirá este martes con los administradores de todos los ministerios para bajarles la instrucción sobre cuáles rubros deberán priorizar en sus gastos y con qué techos deberán manejarse en lo que queda del año, para el que impuso la regla de "emisión cero". Massa repetirá los lineamientos ante los demás ministros el miércoles, cuando participe de la primera de las habituales reuniones que convoca el jefe de Gabinete, Juan Manzur. La expectativa está puesta en cuáles serán las áreas que más se verán afectadas: claramente los ahorros pasarán por los subsidios a las tarifas, los pagos por obra pública y habrá que ver qué sucede con iniciativas especiales como el Previaje, ahora en duda.
"No habrá emisión para financiamiento hasta fin de año", anunció Massa el día de su asunción y reiteró durante el fin de semana. Incluso, avisó que este lunes comenzaría a devolver al Banco Central unos 10 mil millones de pesos. Como para dar señales hacia adentro y hacia afuera que planea en serio cumplir con el 2,5% de déficit fiscal primario establecido en el Presupuesto y acordado con el FMI. También confirmó el congelamiento de ingresos para todos los sectores de la administración pública nacional, algo que ya había anunciado su antecesora Silvina Batakis. Por entonces -se supone que lo mismo corre ahora-, Batakis acordó con los gremios estatales que seguía en marcha el plan de pase a planta permanente de entre 20 y 30 mil empleados públicos, algunos de ellos con más de diez años de antigüedad. No se trata de nuevos ingresos al sector público sino simplemente de empleados que dejan de ser contratados para pasar a planta.
"Si se apunta a cumplir el acuerdo con el Fondo igual quedaba muy poco margen para emitir en este trimestre: apenas 35 mil millones de pesos. Tendrán que apelar al financiamiento del mercado", explicó el economista del CEPA, Leandro Ziccarelli, a El Destape Radio. Según las consultoras privadas, si Massa seguía gastando como lo venía haciendo Martín Guzmán a fin de año el déficit terminaría en 3,5% del PBI. Es decir, un punto arriba. Para cumplir, el recorte debería rondar los 800 mil millones de pesos.
En los ministerios se mantenían expectantes a la espera de conocer las novedades. Ya de por sí fue un año complicado para la gestión porque durante la primera mitad de año debieron acotarse a la prórroga del Presupuesto 2021, dado que la oposición se negó en el Congreso a aprobar el de este año. Recién a partir de julio pudieron contar con las nuevas partidas, actualizadas a través de un decreto elaborado por Fernández y Guzmán. Ahora, a poco de transitar, recibirán nuevas instrucciones sobre cómo administrar los recursos de ahora en más. Algunos ya firmaron aumentos. Por ejemplo, días atrás, el Presidente pautó con el ministro de Ciencia y Técnica, Daniel Filmus, una jerarquización salarial del 10% para los becarios e investigadores del Conicet -se suma al acuerdo paritario- que comenzará a regir con los sueldos de agosto.
Sin dudas, una de las principales fuentes de ahorro serán los recortes a los subsidios energéticos, un área en la que Massa oficializó los cambios este lunes. La nueva secretaria del área, la salteña Flavia Royón, responderá directamente a sus directivas y ya no habrá más resistencia interna a avanzar con la segmentación de tarifas que tantas discusiones generó. Además habrá un tope al consumo energético. En total, en Economía estimaban por ese concepto un ahorro de unos 500 mil millones de pesos.
Otro rubro bajo la lupa es el de la obra pública. Es uno de los motores económicos que el gobierno de Fernández planteó desde el vamos, así que no están pensando en frenarla. "Reafirmamos que la obra pública es un motor y vamos a seguir con más de 5.000 obras con una inversión que lleva más de 20 meses de recuperación", aseguró el ministro Gabriel Katopodis a El Destape Radio. Lo que sí puede suceder es que se empiecen a retrasar algunos pagos. "Estamos al día, no es común en los tratos con el Estado", deslizaba un funcionario. Los contratistas, entonces, tendrán que armarse de paciencia para cobrar en los próximos meses. Por otro lado, el ministro Katopodis va a maximizar las posibilidades de financiación del exterior. Este lunes mantuvo un encuentro con representantes del Banco Mundial en el que avanzaron en una agenda para obras de infraestructura.
Este martes concurrirán a Economía los encargados del área de gestión de cada ministerio, que son quienes se encargan de administrar el presupuesto. Pero el miércoles, Massa se verá por primera vez como ministro con sus pares del gabinete en la Casa Rosada y conversará con ellos sobre las pautas que debrán cumplir. Seguramente, tendrá que despejar muchas dudas. Por ejemplo, qué sucederá con algunas programas especiales como, por ejemplo, la tercera edición del exitoso plan Previaje, cuya preparación ya inició el ministerio de Turismo, a cargo de Matías Lammens, pero que ahora esperaba confirmación. “La situación económica de Argentina amerita revisiones permanentes. La asunción del nuevo ministro de Economía seguramente hará que revisemos juntos este programa. Tenemos intenciones de que se concrete la salida y sé que Sergio también lo tiene en mente”, comentó Lammens el viernes pasado.