Como una iniciativa que forma parte de la continuidad del Plan Bandera establecido por el gobierno de Maximiliano Pullaro en conjunto con Nación, el ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe, Pablo Cococcioni, anticipó que la próxima semana se firmará una modificación al protocolo de los presos de alto perfil, que establecerá mayores restricciones.
Durante un acto de entrega de 96 distinciones a personal policial de la Unidad Regional II de Policía de Rosario, Cococcioni anticipó que quien "cae preso por atentar contra un personal policial, penitenciario o de las fuerzas armadas que sea un elemento para categorizar como recluso de alto perfil, se le restringirá el goce de sus derechos al interior del servicio penitenciario, ya sean visitas o esparcimiento".
En ese sentido, remarcó que "el que mata a un policía va a recibir todo el rigor de la ley y del servicio penitenciario”. Y agregó: “Todos los que estamos acá, tenemos una misión que el pueblo nos ha dado: recuperar la calle, recuperar la tranquilidad para los vecinos, para que la gente pueda tener un proyecto de vida y sentirse segura".
Tras este anuncio, los funcionarios parecen recurrir a métodos similares que implementa Nayib Bukele en El Salvador para encarar la lucha contra la inseguridad y el narcotráfico, con el foco puesto en la ciudad de Rosario, donde desde hace muchos años mandan las bandas criminales. A comienzos de septiembre, el Ejecutivo provincial dispuso que unos 60 detenidos considerados de "alto perfil" comiencen a utilizar vestimenta naranja.
A través de la Resolución 008/2024, el Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe dispuso la utilización de estos nuevos trajes con el objetivo de aumentar la seguridad y la visibilidad de los presos clasificados como de “Nivel 1".
Mientras Pullaro destaca el papel "heroico" de la Policía en Rosario, en noviembre ya hubo cinco homicidios
Durante el acto para distinguir a las fuerzas de seguridad de Rosario, Pullaro destacó al personal policial que tuvo “un sobresaliente desempeño en función de su deber” y también reconoció “a aquellos policías que dieron su vida en servicio y en pos del bienestar de los santafesinos”.
“Lo que hizo la Policía el último año es realmente heroico y han demostrado que cuando la Policía de la provincia invencible de Santa Fe quiere, realmente puede”, agregó. Si bien sostuvo que la fuerza policial tiene "la capacidad de tomar el control de la cárcel y de la calle para desplazar a los delincuentes y a los violentos y meterlos en el lugar que tienen que estar, que es tras las rejas”, los crímenes no se detienen en la ciudad del intendente Pablo Javkin.
La Fiscalía Regional de Rosario confirmó esta semana el asesinato de Kevin Pereyra, un joven de 26 años en la zona oeste. Según fuentes policiales, lo habían baleado ocho meses antes del último ataque. La semana anterior le dispararon en la vía pública y pasó varios días internado en estado grave.
El homicidio de Pereyra es el quinto que se registra en los primeros 20 días del mes de noviembre, todos en la ciudad rosarina. En total, ya son 83 los asesinatos ocurridos en lo que va del año en el departamento Rosario. El Observatorio de Seguridad Pública (OSP) reportó 78 muertes entre enero y octubre en la ciudad y demás localidades cercanas.