El proyecto de salario básico universal suma apoyo

Distintas organizaciones sociales y políticas manifestaron su fuerte respaldo a la iniciativa presentada por diputados del Frente de Todos de crear un salario básico universal, que busca garantizar un ingreso mínimo para trabajadores informales y monotributistas de la categoría más baja. La contribución sería equivalente a la canasta básica alimentaria de un adulto, hoy en 12.900 pesos. 

"Las organizaciones abajo firmantes venimos a respaldar con toda firmeza el Proyecto de Ley de Creación del Salario Básico Universal, entendiendo que se trata de un instrumento para recuperar el poder adquisitivo de nuestro pueblo. Nuestras organizaciones son representantes de distintos sectores de trabajadores y trabajadoras de la denominada economía social, pero no pretendemos, ni aspiramos a ser la mano de obra precarizada, ni excluida de los esquemas de protección social" reza el comunicado por distintas organizaciones, que salieron a impulsar la iniciativa. 

En el comunicado, firmado por Kolina, Lealtad, la Corriente Peronista 13 de abril, Descamisados, Unidos y Organizados y Peronismo Militante, entre otras, resaltan que "es imperioso elevar el nivel de vida de nuestros trabajadores y trabajadoras y es sustancial para ello generar un piso mínimo de ingresos que garantice el acceso a alimentación, salud, educación, vivienda, vestimenta para nuestras familias". "Compartimos la necesidad que los trabajadores y trabajadoras asalariadas accedan en su negociación paritaria a un salario que permita un empate con los niveles inflacionarios del momento, sin embargo, el acceso a un Salario Básico Universal que establezca piso de derechos, generará de modo inmediato en una mejor condición de negociación salarial", explicaron. 

Las entidades advierten: "Asistimos a contemplar pasivamente los reclamos de corporaciones económicas y financieras, entidades agrarias enriquecidas, los sectores del poder económico real, mientras que los trabajadores y trabajadoras de nuestra patria sufren las consecuencias del exceso de dialogo inconducente. Queremos funcionarios que puedan recibir el aplauso de nuestro pueblo, no por los poderes concentrados o por los organismos de usura internacional".