Pese a las acusaciones, el gobierno de Pullaro sale a despegarse del asesinato de "Pillín" Bracamonte: "No ocurrió así"

El secretario general de la Gobernación de Santa Fe, Juan Cruz Cándido, negó que la zona haya estado liberada, ya que hubo "cámaras que produjeron imágenes que está investigando la Fiscalía y había postas policiales funcionando como debían funcionar". Además, sostuvo que "no hubo ninguna manipulación del sistema de iluminación". 

11 de noviembre, 2024 | 11.12

Si bien el gobernador Maximiliano Pullaro pondera los resultados del Plan Bandera que estableció en coordinación con el Ministerio de Seguridad de la Nación, que encabeza Patricia Bullrich, la violencia en las calles le estalló. El asesinato de Andrés "Pillín" Bracamonte, jefe de la barrabrava de Rosario Central, y su mano derecha, Daniel "Rana" Attardo, tras el partido contra San Lorenzo disputado el pasado sábado, encendió las alarmas de la provincia de Santa Fe.

A pesar de la emboscada que sufrieron cerca del Gigante de Arroyito, el secretario general de la Gobernación de Santa Fe, Juan Cruz Cándido, negó que la zona haya estado liberada, ya que hubo "cámaras que produjeron imágenes que está investigando la Fiscalía y había postas policiales funcionando como debían funcionar".

“Pillín” se encontraba arriba de una camioneta blanca junto a su compañero cuando recibió los disparos en Avellaneda al 700 bis, cerca de la salida de los hinchas "canallas" que abandonaban el estadio. El fiscal de Homicidios, Alejandro Ferlazzo, brindó detalles del hecho que genera conmoción en Rosario, aclaró que hasta el momento no hay detenidos y que las víctimas fueron interceptados por al menos tres personas que efectuaron varios disparos con un arma 9 mm. “Fueron al menos 11 tiros. Tenían cinco impactos cada uno de los cuerpos”, indicó en conferencia de prensa este lunes. 

Bracamonte, quien estuvo más de 20 años al frente de la barra del "Canalla", había sufrido 29 intentos de asesinatos y contaba con amplios antecedentes que lo relacionaban con causas por asociación ilícita, lavado de dinero y la más reciente, por violencia de género. Tal es así que él mismo lo había predicho en diálogo con La Nación, 20 días atrás de su sangriento final. "Si me matan la ciudad se incendia", anticipó. De esta manera, se abrieron un sinfín de especulaciones sobre quién lo mandó a acribillar. Dinero, poder y una zona de disputa para dominar la venta de drogas en el territorio resultan factores que alimentan todavía más las conjeturas. En diálogo con El Destape Radio, el secretario Cándido no descartó "ninguna hipótesis", ya que es "una situación mucho más compleja que algo que se pueda explicar por una sola razón"

Consultado sobre la falta de luz en la zona, el funcionario sostuvo que "no ocurrió así""no hubo ninguna manipulación del sistema de iluminación". Y lanzó una insólita justificación: "Suele ocurrir en esa zona cuando hay eventos masivos y mucha gran cantidad de carritos" que las personas "se enganchan de la red de energía y, muchas veces, terminan tumbando" el sistema. Sin embargo, el fiscal Ferlazzo remarcó que el día anterior había luz en la calle y que se normalizó pasada la medianoche, luego de que se haya perpetrado el doble crimen.

A pesar de los hechos cargados de sangre que ponen en jaque el programa Bandera de Pullaro, Cándido volvió a remarcar el trabajo "de manera coordinada" entre la Fiscalía, el Gobierno nacional, provincial y municipal. En relación con las medidas de seguridad que tomarán las autoridades de cara al próximo partido que dispute Rosario Central en condición de local frente a Racing a comienzos de diciembre, aseguró que estudiarán "cómo ordenar la situación de manera tal de prevenir cualquier otro hecho que pueda ser sucedáneo de lo que ocurrió este fin de semana".

Este nuevo crimen es un fracaso de Pullaro, que anticipa una nueva oleada de violencia que afectará a toda la ciudadanía y sobre todo a la población trabajadora. Por su parte, la ministra Bullrich sigue en silencio, aunque últimamente sale a festejar de manera rápida detenciones por tenencia de cocaína cuando realmente se trata de talco. Un hombre estuvo preso más de 20 días por transportar en Mendoza dos kilos de droga hasta que finalmente se comprobó que hubo un error y fue liberado.

El ministro de Seguridad de Santa Fe confesó que hubo ausencia policial en la zona donde mataron a "Pillín"

Por su parte, el ministro de Seguridad provincial, Pablo Cococcioni, afirmó que el doble crimen de los barras de Central "es un hecho llamativo y preocupante". "Acá lo que hubo también fueron otras situaciones. Había una persona que fue objeto de 29 atentados a su vida, y bueno, estaba con pocas medidas de auto preservación, y hasta diría mostrándose repitiendo sus rutinas pese a que tenía prohibición de ingreso a los estadios, por lo que policialmente no vemos que el hecho podría haberse previsto", lanzó. 

Además, reveló que la secretaria de Seguridad de la Nación, Alejandra Monteoliva, arribó con todo el equipo a la ciudad este domingo y que fuerzas federales y provinciales estaban totalmente abocadas a esclarecer el hecho. En ese sentido, destacó que el Ministerio Público de la Acusación (MPA) conduce la investigación y que se “está formando un grupo para investigar estos fenómenos”.

“No vamos a minimizar el hecho y sus implicancias, por eso se trabaja fuertemente en reajustar el despliegue policial en conjunto”, indicó y manifestó: “Vamos a evitar que este hecho se use para reinstalar una vuelta al pasado en Rosario. Vamos a cuidar al máximo lo logrado en estos 11 meses para que los rosarinos vivan tranquilos”.

Consultado acerca de la ausencia policial en el momento del doble asesinato, Cococcioni explicó que el despliegue de seguridad en este tipo de eventos, se efectúa a partir de un sistema de postas de ingresos y egresos lo que no implica una refuerzo de alguna cuadra en particular. “La prioridad es la desconcentración, no es costumbre aportar un policía en cada metro”, apuntó.