Ricardo Alfonsín y Gustavo López presentaron esta tarde la plataforma "Democracia Social" en el Senado de la provincia de Buenos Aires. Ambos líderes se vincularon históricamente con la Unión Cívica Radical -que primero se unió al PRO y ahora cuenta con legisladores "dialoguistas" con el Gobierno de Javier Milei-, pero ahora empezaron a marcar cierta distancia. Se sentaron en las antípodas del proyecto del Ejecutivo y llamaron a la "resistencia" contra el mega DNU 70/2023 desregulador de la economía y, su complemento, la ley Bases.
El acto de presentación se llevó a cabo en el salón Nunca Más del Senado bonaerense, en La Plata; y desde allí plantearon que la idea es recuperar los valores democráticos, las instituciones republicanas, la educación, la ciencia y el trabajo.
En ese sentido, ambos hicieron un diagnóstico de la coyuntura nacional y expresaron que “en momentos de emergencia democrática es necesario encarar nuevas propuestas que convoquen a la esperanza desde los principios y las convicciones. Cuando la democracia está en juego, hay que actuar, no se puede especular”.
“Nosotros somos todo lo contrario a lo que representa Milei, somos lo que Milei odia: somos progresistas porque creemos que la persona es el centro de la política, creemos en la libertad y en la justicia social. Creemos en la educación pública gratuita y de calidad. En la universidad autónoma y en rol del Estado pare regular inequidades. Nos sentimos herederos del juicio a las juntas y el "nunca más". Defendemos los valores republicanos y democráticos del Estado de derecho, por lo que nos oponemos al DNU 70/2023 y a otorgar facultades delegadas inconstitucionales. Creemos en la ética de la solidaridad y que las convicciones no se negocian”, manifestaron.
Además, consideraron que el Gobierno toma medidas “en favor de un grupo de empresas transnacionales, extractivistas, que dejarán a la Argentina sin recursos", y que por ese motivo “es necesario construir una alternativa que combine las libertades individuales con la equidad y el desarrollo personal con la justicia social”.
A su turno, Alfonsín sintetizó: “Desde el 2015, me siento más expresado por las posiciones de forja que por las de un partido que solo nominalmente es radical, Y no es casualidad, forja abreva también en el radicalismo histórico", y agregó que junto con su compañero, comparten "la necesidad" de crear una fuerza progresista, amplia y con fuerte arraigo en valores republicanos y democráticos.
"No descarto la posibilidad de que el partido abandone su alianza con la derecha y se sume al esfuerzo”, se esperanzó el hijo del quien fuera el primer presidente de la última etapa democrática, Raúl Alfonsín.
Por su parte, López -expresidente del Enacom, en la actualidad desguazado; y presidente de FORJA- indicó que su espacio representa la unión de los dos grandes movimientos populares del siglo 20 y que su construcción en la Provincia de Buenos Aires con el apoyo de Ricardo Alfonsín, será una alternativa para aquellos que comparten los valores de la Democracia, la ética, la transparencia y la solidaridad.