Kicillof se centra en la gestión y contrapone su modelo al de Javier Milei

Este jueves el gobernador bonaerense estará en General San Martín. Inaugurará un Centro Juvenil de Encuentro Comunitario y firmará convenios con la UNSAM. Una tregua no buscada, y un discurso enfocado en contrarrestar al Gobierno nacional. 

07 de noviembre, 2024 | 11.55

Tras una intensa semana por la interna en el peronismo que terminó con la proclamación de Cristina Kirchner como presidenta del Partido Justicialista y el apoyo de Axel Kicillof; cerca del gobernador de la provincia de Buenos Aires dieron vuelta de página y no respondieron a ninguna de las confrontaciones. “Gestión y más gestión”, es la palabra que repiten como un mantra en Gobernación.

En ese sentido, este jueves el mandatario estará en General San Martín. Junto al intendente local, Fernando Moreira, el Gobernador inaugurará un Centro Juvenil de Encuentro Comunitario y también un Centro de Cuidado Infantil en el barrio Costa Esperanza. Además firmará convenios con universidades en la UNSAM por obras que el Gobierno nacional paralizó y desfinanció.

Gestión: la herramienta unilateral 

Las diferentes obras fueron realizadas en conjunto por los ministros y ministras de su cartera, en donde confluyen dirigentes de distintos sectores del peronismo. En el caso del área de Salud, Nicolás Kreplak milita en La Cámpora; en ambiente la ministra es la lomense Daniela Vilar, del espacio de Martín Insaurralde; y en Infraestructura, Gabriel Katopodis, formó parte de la lista del PJ de Cristina Fernández y su autonomía peronista le permite participar de diferentes gobiernos. 

Con cada uno de ellos Axel trabaja de manera coordinada y excelente”, dijo a El Destape un dirigente del entorno del mandatario. Es decir, “ninguno de ellos hace actos de gestión ‘por afuera’, consulta y responden al Gobernador”, agregó, dando a entender que - a pesar de la línea política a la que responden - en la gestión de la provincia de Buenos Aires el jefe es el mandatario. “No hay albertismo”, dijo otro dirigente que estuvo presente en el acto del hospital El Dique el martes por la mañana. La analogía responde a lo que fue la gestión de Alberto Fernández con varios espacios formando parte de su gobierno, pero ninguno - que no fuera propio - respondiendo a la autoridad presidencial. 

Curiosamente el quinto Congreso Provincial de Salud Mental que se realizó en Ensenada, tenía como locación original Lanús, tierra gobernada por Julián Álvarez, quien la semana pasada cruzó fuertemente al gobierno provincial. Hubo un cambio de último momento para evitar mayores tensiones. El jefe comunal que responde a Máximo Kirchner, acusó al gobierno bonaerense de “no haberle enviado un peso” para obras en el distrito, luego de haber inaugurado 50 viviendas en el Complejo Habitacional B° ACUBA. Desde Gobernación respondieron mostrando las inversiones realizadas en dicha ciudad en el mismo barrio y en otros lugares. Y sobre la no invitación al acto de entrega de casas, en calle 6 le bajaron el precio: “Tenemos tantas obras para inaugurar…imaginate”, deslizaron.

A ello se suma una síntesis pública de Axel Kicillof que se respeta a rajatabla: “Con el único que me quiero pelear es con el que está quebrando nuestro país y que se llama Javier Milei. Su gobierno, sus políticas, sus socios, la derecha internacional contra ellos me van a encontrar; nunca me van a encontrar contra un compañero o compañera, no podemos distraernos, no podemos dividirnos y tenemos que estar fuertes y unidos. Nuestro gobierno es un gobierno de brazos abiertos y de lucha y militancia. Viva Perón, viva Evita, viva Néstor, viva Cristina”, dijo la semana pasada en otro acto en las tierras de Mario Secco

A ese gesto, se suma la felicitación a su conductora el martes por la noche. “Felicito a Cristina Fernández de Kirchner y a todos los compañeros y compañeras de la lista de Primero la Patria por este nuevo desafío al frente del Partido Justicialista”, escribió en sus redes sociales el mandatario. A lo largo de toda la pelea interna en el PJ, Kicillof nunca se definió públicamente por ninguna de las dos listas, sólo se limitó a pedir “unidad” y pagó el costo político de ello puertas adentro. Desde su entorno justifican su postura remarcando una y otra vez que el gobernador “siempre reconoció a su conductora” y nunca sacó los pies del plato. Y a la vez remarcan: “Conductora es una sola”. La subordinación no es una opción.