El gobernador bonaerense, Axel Kicillof declaró la emergencia ambiental en la zona del Delta del Río Paraná por 180 días debido a los incendios producidos. De esta forma, el decreto 1088/2020 publicado en el Boletín Oficial abarca a los partidos de San Nicolás, Ramallo, San Pedro, Baradero, Zárate, Campana, Escobar, Tigre, San Fernando, San Isidro y Vicente López.
El mandatario prohibió “la quema de pastizales” y suspendió cualquier permiso “de quema de vegetación en la zona declarada en emergencia ambiental”. Además creó el Comité Interministerial de Emergencia del Delta (CIED), que articulará con los organismos provinciales, nacionales y municipales las medidas de prevención, control y mitigación de los efectos producidos por los incendios y de identificación catastral de las zonas afectadas.
El Comité estará coordinado por un representante del Ministerio de Jefatura de Gabinete de Ministros, e integrado por representantes de los Ministerios de Seguridad, de Gobierno y del Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible.
En el artículo 4 del decreto, Kicillof instruyó al Ministerio de Seguridad y al Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible a realizar “un Plan de Manejo del Fuego para la zona del Delta del Paraná”.
Entre los fundamentos se indica que la zona del delta “es un inmenso humedal y, además de albergar una rica diversidad biológica, cumple múltiples y fundamentales funciones como la recarga y descarga de acuíferos, el control de inundaciones, la retención de sedimentos y nutrientes, la estabilización de costas, la protección contra la erosión, la regulación del clima y una extensa lista de bienes y servicios al ser humano”.
En los primeros meses del año “se han detectado numerosos focos de incendio irregulares en la zona del delta correspondiente a las provincias de Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires que generaron un impacto negativo sobre la integridad del ecosistema, poniendo en peligro no solo los principales recursos naturales sino también la calidad de vida y la salud de la población”.
En virtud de ello, y atento a la situación crítica de peligro evidente e inminente que representan los efectos derivados de los incendios identificados, “resulta menester adoptar medidas inmediatas a fin de preservar, recuperar y conservar el medio ambiente”.
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