El martes pasado el gobernador Axel Kicillof y una pequeña comitiva de su gabinete viajaron a Brasilia para mantener una serie de reuniones siendo la más importante la que mantuvo con el presidente Lula Da Silva. El viaje fue maratónico, ya que lo hicieron con el helicóptero oficial y no por Aerolínea, lo que les demandó unas 7 horas de viaje. El encuentro se gestó meses atrás.
Según pudo averiguar El Destape, en Casa de Gobierno “hacía meses que venían afianzando el vínculo”, y cuando el Vicepresidente y ministro de Economía brasileño, Fernando Haddad, confirmó el encuentro y le puso un día en su ajustada agenda, el Gabinete bonaerense tomó impulso y cerró los otros encuentros.
Incluso, la reunión con Lula Da Silva se “adelantó” a pedido del propio Presidente. “Lula pidió que la reunión con el ministro de Economía sea con él”, detalló Axel Kicillof a Radio 10. “Está muy activo, e incluso cuando estaba reunido con nosotros, interrumpió el encuentro unos minutos para hablar con algunos presidentes de Europa”, amplió.
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La reunión duró casi dos horas. El financiamiento y el ingreso de divisas a la provincia de Buenos Aires fue uno de los ejes centrales. “Vamos a establecer mecanismos de intercambio para el desarrollo de la provincia”, señaló a este medio uno de los presentes en el encuentro.
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El mismo será “vía el Banco de Brasil, a través de Petrobras”. Dicha compañía se dedica a la exploración de petróleo y gas, a la producción, refinamiento y abastecimiento de productos de petróleo y crudo. Incluso este jueves el presidente brasileño anunció inversiones por 4.070 millones de reales (746 millones de dólares) en el aumento de su capacidad de refino y la retomada de la producción de fertilizantes. Se abren puertas de cara a la explotación de petróleo offshore en el mar argentino que tiene a Mar del Plata como la ciudad más cercana.
El gobernador también apuntó a buscar “todas las vías necesarias para sostener la industria” en un contexto de recesión y de números en rojos. En ese sentido, “quedó una linea abierta entre los ministerios de ambos estados”. A modo de ejemplo, el ministro de Hacienda, Pablo López detalló en sus redes sociales que cómo “la construcción y la industria siguen siendo los sectores con mayores mermas en la caída de empleo registrado, explicando el 70% de la pérdida total”. Una consecuencia “autoinfligida” por el Gobierno nacional.
El país carioca le propuso al mandatario enviar mayor “financiamiento para las empresas brasileñas” radicadas en suelo bonaerense. “Los objetivos del viaje se lograron”, sintetizó Kicillof. El mate bonaerense y algunos libros que llevaron como presente, quedaron como nota al pie de página.
Desde el lado brasileño detallaron que otro de los temas que se abordaron temas de la economía argentina y sus desafíos actuales, en particular “la recesión, el aumento del desempleo y de la pobreza y la desindustrialización”. Y además analizaron “el escenario político del país, la actuación del peronismo y sus perspectivas, y las relaciones entre las distintas corrientes ideológicas”.
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“Es torpe pelearse con Brasil, es nuestro principal socio comercial”, afirma el gobernador bonaerense, y la reunión entre los dirigentes lo ratifica una y mil veces más.
El mismo Presidente se refirió “al escenario geopolítico de América del Sur” y “a los desafíos a los que se enfrenta el proceso de integración regional, tras los avances logrados durante sus dos primeros mandatos”. También resaltó la importancia de “dar continuidad a los diversos proyectos de inversión de las empresas brasileñas en el país vecino”.
En ese sentido, el Gobernador le manifestó “su preocupación de la decisión equivocada y errónea por parte de Javier Milei de no haber aceptado el ingreso al BRICS (siglas por los países Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica)”. “Es una miopía para la Argentina”, le dijo.
La comitiva que acompañó al gobernador fueron los ministros de Gobierno, Carlos Bianco; de Hacienda, Pablo López; y la ministra de Comunicación, Jesica Rey. También se reunieron con funcionarios del Banco de Desarrollo de Brasil (BNDES), y con el Canciller, Mauro Vieira.