Tras la sanción en el Senado del acuerdo con el FMI por la deuda de U$S 44 mil millones que contrajo la gestión de Mauricio Macri, en el Frente de Todos buscarán dar vuelta de página bajo la premisa “unidad hasta que duela”. En ese contexto el gobernador Axel Kicillof es uno de los actores dentro del Frente de Todos que busca fortalecer la alianza política.
Por estas semanas el mandatario de la provincia más poblada de la Argentina transita una excelente relación con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, a quien visita “entre una y dos veces por semanas, además de las conversaciones e intercambios de mensajes por teléfono”, señalaron a El Destape desde Gobernación. Lleva propuestas, proyectos, asesora a la Vicepresidenta y además gobierna.
Otra de las relaciones que sigue funcionando a la perfección es con el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa. Kicillof se recostó en su figura y entre los dos buscan potenciar al Frente de Todos. Calmar las aguas de cara al futuro.
En tanto, con Máximo Kirchner, “el trato es entre pares”; de igual a igual, reconocen desde su entorno. En los últimos días confluyeron en reuniones que acontecieron siempre con la misma anfitriona: Cristina Fernández. El titular de La Cámpora tiene su silla bonaerense a través del PJ provincial, de la presidencia del bloque de Diputados provincial que responde a él, y de su propia articulación con los intendentes. “En el mano a mano con la gente está muy bien”, reconoció un jefe comunal del conurbano.
Otra alianza que también está funcionando es la que Axel Kicillof mantiene con su Jefe de Gabinete, Martín Insaurralde. “Lo que Axel le pide, Martín lo cumple”, explicaron desde Casa de Gobierno, y pareciera ser que, por el momento, el acuerdo es de mutuo beneficio para los dos.
Desde el entorno del Jefe de Gabinete reconocen la buena sintonía. Vale remarcar que el lomense tiene un acuerdo político con Máximo que, hasta el momento, no se romperá ni doblará. “Aún falta para 2023”, evalúan distintos dirigentes provinciales.
Lo cierto es que hay una premisa entre varios intendentes: “Alberto y Axel tienen que llegar competitivos a 2023”. Nadie se salva solo. Además, en medio de la crisis actual, los costos sólo los paga la gente. En el territorio la contención es uno de los trabajos que están realizando los Jefes comunales, que saben que tienen poca influencia en las ligas mayores y en las discusiones entre el Presidente y la Vice.
Gestión, inauguración de obras y más gestión
Si los primeros dos años de gestión sirvieron para realizar un sinfín de licitaciones en toda la provincia de Buenos Aires, levantar programas internacionales que se habían caído y reestablecer distintos vínculos empresariales para fortalecer nuevas inversiones, durante 2022 y 2023 Axel Kicillof quiere capitalizar todas las obras finalizadas. Inaugurar cada escuela nueva, red cloacal o vivienda a estrenar.
Para ello, el Gobernador recorrerá el interior bonaerense con actos semanales que irán in crescendo. Esta semana que entra estará en Pilar, San Fernando, en un acto en La Plata por el 24 de marzo, y demás ciudades.
Además el objetivo es que el gobernador esté en la foto cortando la cinta en 20 nuevas instituciones educativas que finalizó en Carmen de Areco, Carmen de Patagones, Maipú, José C. Paz, Tandil, La Matanza, Mar Chiquita, Tapalqué, Almirante Brown, San Fernando, Quilmes, Ayacucho, el Partido de la Costa, Navarro, Zárate, la Isla Santiago en Ensenada y General Viamonte. Fiel a su estilo, Axel mostrará la obra finalizada y no una mera expresión de deseo.
Mientras los melones se acomodan,y a la espera de un nuevo pacto de gobernabilidad para 2022 y 2023, en la provincia de Buenos Aires, Kicillof buscará mejorar su imagen política, llevarse el mayor rédito político de las obras realizadas y fortalecer su programa provincial 6 x 6 que expresa explícitamente la búsqueda de un nuevo mandato en territorio bonaerense.