El presidente Alberto Fernández relanzó el plan ProCreAr que prevé una inversión de 25 mil millones de pesos, 300 mil créditos para la construcción, ampliación y refacción y la construcción de 44 mil unidades de vivienda. Además, celebró que se lance el mismo día que se anunció el acuerdo con los bonistas.
Desde la Quinta de Olivos junto la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa; y la titular de Anses, Fernanda Raverta; el Presidente relanzó un programa histórico que fue estancado durante los últimos cuatro años, en el mismo día que se logró llegar a un acuerdo con los acreedores por la deuda.
“Es un día especial para todos nosotros, es un día de tranquilidad. Sentimos que avanzamos de muchos modos. Algunos dicen y creen que todo pasado fue mejor y hay los que creemos que el mejor tiempo es el que podemos construir. Hubo un tiempo pasado que fue mejor y puso el programa ProCreAr en marcha, que permitió acceder a la vivienda propia a muchos argentinos y argentinas”, reflexionó el jefe de Estado al tomar la palabra y valoró que “fue un plan con fuerte impulso del Estado nacional”.
En tanto, advirtió que “quedaron alrededor de 10 mil viviendas sin entregar desde 2015 y son esas cosas que a uno lo hace pensar que cómo pudo haber pasado esto sabiendo del déficit habitacional que hay en Argentina”. “Me llena de alegría, pensando en el futuro, que esa herramienta del pasado la podamos traer al presente y puede servir para resolver el problema habitacional que tienen miles de argentinos”, enfatizó.
Indicó, además, que una de las preocupaciones que surgían a la hora de discutir volver a poner en marcha el ProCreAr era “el impedimento de la deuda y de que se pueda contar con los recursos necesarios para poner en marcha un plan tan vigoroso como fue ese plan desde 2012 a 2015”. Reveló, asimismo, que la presentación del relanzamiento “estaba pesada desde antes de que se conociera que se pudo alcanzar un acuerdo con los bonistas y acreedores de Argentina” que fue anunciada el martes a la madrugada. “Fue una deuda cuantiosa que afrontamos y encontramos una respuesta al problema”, valoró.
En ese sentido, destacó el papel del ministro de Economía, Martín Guzmán, que encabezó las negociaciones con los acreedores y quien comprendió que “no podía ser que por esa deuda se postergue una vez más las necesidades de los argentinos que son muchas”. “Veníamos de dos años de caída económica, de 20 mil pymes que cerraron, una pobreza del 40%, empleo decreciente y Martín interpretó mejor que nadie el objetivo que teníamos y nos dimos una estrategia que él ideó y que fue exitosa. El objetivo que fijamos, lo hemos logrado”, celebró.
Apuntó que, a partir del acuerdo, eso significa un ahorro para el país 37 mil millones de dólares y un alivio de 42 mil millones de dólares “teniendo en cuenta que Argentina se había com"prometido en los próximos cinco años”. “Hemos recuperado autonomía para destinar recursos para que muchos pueda tener su vivienda, impulsar la producción y a partir de allí podamos recuperar el empleo. Recuperamos autonomía de decisión y podemos definir qué Argentina queremos”, aseveró.
Además, agradeció “la compresión de los acreedores que comprendieron que Argentina ofertando lo que ofertaba estaba haciendo su mayor esfuerzo”. “Fuimos a resolver un problema y lo estamos resolviendo”, remarcó. También, extendió el agradecimiento al respaldo de los organismos internacionales, a los 150 economistas que se sumaron a la propuesta del país, a la firma de los “mejores abogados del mundo”.
“Soy de los que creen que en política nada es más importante que la palabra empeñada. no mentir en política es central y estamos cumpliendo con nuestra palabra. Dijimos que íbamos a poner poco a poco al país de pie, la deuda no nos iba a impedir lograr un proceso de desarrollo y contar con los recursos necesarios para que ese desarrollo se vuelque a la producción y trabajo y no la especulación. Lo estamos logrando entre todas y todos”, sentenció.
A su turno, la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, manifestó que “las líneas de ProCreAr de alguna forma generan una gran expectativa. Se continuará con el esquema de crédito hipotecario y créditos personales. Créditos de hasta 50 mil pesos y para refacciones entre 100 mil hasta 500 mil pesos”.
“Queremos decir con esto que nos preocupa mucho el problema cuantitativo y cualitativo, no solo está destinado a propietarios, sino a inquilinos”, aseveró e indicó que el programa mantiene una tasa fija del 24%.
El programa tendrá 9 líneas de crédito (entre créditos hipotecarios y créditos personales). Entre los créditos personales se encuentran las líneas de Microcréditos, y Mejoramientos Refacción, Mejoramientos Gas y Mejoramientos Sustentables. Las líneas crédito hipotecario se dividen en Desarrollos urbanísticos, Desarrollos habitacionales, Construcción, Ampliación y Lotes con servicios.
Mediante las 9 líneas se otorgarán 300 mil créditos para mejoramientos, refacción y ampliación, se construirán 44 mil nuevas viviendas y serán adjudicados 10 mil nuevos lotes con servicios en todo el país. Para 2020 se estima una inversión de $25 mil millones.