taLa medida de fuerza de los trabajadores aeronáuticos, por un despido en la empresa Intercargo, derivó en una respuesta furiosa del gobierno de Javier Milei contra el sector. No sólo utilizaron a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) para suplirlos, sino que avanzó en la posibilidad de cerrar –finalmente– Aerolíneas Argentinas.
Esta posibilidad, que se reconoció en la Casa Rosada y que la cúpula de la línea de bandera se la transmitió a los distintos gremios aeronáuticos, fue reconocida también por el jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos.
"Estamos dispuestos a avanzar con las propuestas que presentamos: por un lado, la privatización. Si los empleados quieren, les entregaremos la compañía y que resuelvan la situación. Caso contrario, vamos a ir hacia la privatización. Si esas opciones no son viables vamos hacia el fin de Aerolíneas Argentinas”, señaló el funcionario en diálogo con Radio Mitre.
El ministro coordinador consideró que “no es aceptable que la gran cantidad de argentinos que no la usan, estén subsidiando al 2% que viaja”. "Estamos convencidos que no es razonable subsidiar 700 millones de dólares a una compañía. Cuando analizamos el porcentaje de gente que vuela por sobre el total de la población del país nos damos cuenta de que es injusto. Es una compañía que pierde mucha plata y que los argentinos pagan sin ninguna razón", opinó.
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En cuanto al reclamo de los empleados de Aerolíneas Argentinas por sus sueldos, el funcionario recordó que “se les actualiza lo que se le actualiza al sector público” y mencionó que “se ve perjudicado porque el Estado no tiene recursos para pagarles”.
“Lo que estamos haciendo es reducir en aquellos lugares donde hay sobrante de personal, y en su momento se podrán incrementar los salarios”, manifestó, pero en el caso de la aerolínea de bandera expresó: “¿Cómo puede pretender un empleado de Aerolíneas Argentinas que se le ajuste el sueldo cuando a la compañía se le está subsidiando 700 millones de dólares?”.
Tras la reunión de las autoridades de Aerolíneas con los gremios aeronáuticos, el pasado viernes en la sede de Aeroparque, se acordó una tregua en las medidas de fuerza y continuarán las conversaciones la semana que viene. Los representantes de los sindicatos ratificaron la intención del gobierno de Milei de cerrar la aerolínea de bandera.
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Mateo Ferrería, en representación de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), admitió que "desde la empresa les transmitieron que, si no se llega a un acuerdo, el Gobierno está decidido a poner en funcionamiento el Procedimiento de Crisis, con todo lo que eso implica”.
Por su parte, Andrés Junor, representante de los tripulantes de cabina, admitió que les informaron que el gobierno tiene la decisión de que, si no hay acuerdo, se iniciará el Procedimiento de Crisis para el cierre de la compañía.