La llegada al gobierno de Javier Milei no solo trajo la aplicación de medidas como la quita de subsidios al transporte y la energía, la devaluación del dólar y la desregulación del mercado inmobiliario, sino que también implicó el fin de los controles de precios.
El presidente cerró la Secretaría de Comercio Interior y, con su llegada, se dieron por finalizados los programas como Precios Cuidados. Dogmáticamente en contra, para Milei, los controles de precios son una "aberración". Frente a esto, un intendente anunció que buscará aplicar regulaciones en su municipio.
A través de su cuenta de X, el intendente de Castelli e integrante de Unión por la Patria, Francisco Echarren, anunció que en su pago chico ejercerá un control sobre los precios de los alimentos básicos.
"En Castelli vamos a regular precios de alimentos basicos y vamos ayudar desde el municipio a que a ninguna familia le falte un plato de comida. Y se va al carajo la libertad de mercado, acá somos todos vecinos", lanzó.
Definido en su cuenta de X como "peronista y keynesiano", Echarren fue reelecto en estas elecciones por casi el 60% de los votos. Ejerce el cargo desde 2011.
A comienzos de 2023, fue designado Presidente del Directorio de la Agencia Reguatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME). Previamente, en 2021, había ocupado la Dirección Nacional de Obras del Transporte en el ministerio que comandaba Alexis Guerrera.
Primera renuncia en el gobierno de Milei: renunció Eduardo Roust, el subsecretario de Prensa
A seis días de su asunción, el gobierno de Milei tiene su primera renuncia. El subsecretario de prensa Eduardo Roust anunció que abandona el cargo alegando "motivos estrictamente personales".
En una misiva firmada por Roust que circuló entre periodistas, se indicó que "por motivos estrictamente personales, he tomado la decisión de no formar parte del equipo de comunicación del Gobierno del presidente Javier Milei que generosamente me han ofrecido".
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"El vértigo que tiene el territorio digital o el mundo moderno de las comunicaciones, requiere de una velocidad informativa sin precedentes. Estas circunstancias hacen que el trabajo resulte para mí un poco 'inhumano' y me aparte de cuestiones esenciales de mi vida", expresó.
Luego, se encargó de pedir "perdón a todos los periodistas de la Casa Rosada por mi falta de paciencia y los muchos desencuentros, pero quiero que sepan que, aunque el periodismo no haya sido mi destino, ¡para mí su labor es grandiosa!". Finalmente, expresó:"Gracias por dejarme entrar en vuestra casa y espero verlos pronto en otras circunstancias".