El ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, se reunió con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, con el objetivo de monitorear los planes sociales y ratificó que no abrirá nuevos cupos de beneficiarios, pese al reclamo de las organizaciones sociales.
"Nosotros tomamos la decisión en febrero de no dar más altas en las inscripciones del Plan Potenciar Trabajo y convertir ese programa en proyectos productivos. Hay decisiones que tomo como ministro, no va a haber más altas del Plan Potenciar Trabajo y decidimos cuidar al beneficiario del plan", enfatizó el funcionario nacional.
En la misma línea, sostuvo que el diálogo con las movilizaciones sociales "nunca se rompió" y cuestionó los cortes de calles como método de protesta. "Siempre reflexiono con ellos de no jorobarle la vida a los argentinos, porque los que van en el Metrobus y los que circulan van a trabajar y a sus casas", remarcó Zabaleta.
Previo a una nueva movilización de organizaciones sociales vinculadas a la izquierda, que se concretará este miércoles en el centro porteño, el ex intendente de Hurlingham destacó que por el momento no está previsto ningún encuentro con los referentes de Unidad Piquetera: "Para mañana no han pedido ninguna reunión. Siempre que lo pidieron, los recibimos. Me he juntado últimamente más con dirigentes piqueteros que con mi propia familia". "No es rebelión: hay manifestaciones, pedidos y reclamos en el marco de la democracia. A todos nos conviene y nos compromete que la Argentina se recupere", añadió.
Por su parte, Manzur afirmó que son "muy respetuosos de todas las expresiones populares" y negó que el Gobierno pudiera llegar a cortar el vínculo con las organizaciones que salen a la calle: "Vamos a seguir abiertos al diálogo, acercando posiciones". "En un momento complejo, sensible, se está llevando adelante una gran tarea. Vamos a seguir redoblando el esfuerzo", afirmó el tucumano.
La discusión por los planes sociales y el Salario Básico Universal
Zabaleta habló en el contexto de la discusión sobre la ampliación de los planes sociales y su tercerización en manos de las organizaciones sociales. En la última semana los movimientos sociales reiteraron su reclamo de un Salario Básico Universal en una marcha de la que participaron sectores de izquierda como el Polo Obrero pero también sectores oficialistas como la UTEP.
Además, sectores del kirchnerismo promovieron la discusión del Salario Básico Universal tanto en la Cámara de Diputados, donde el oficialista Itai Hagman presentó un proyecto, como en el Senado. Sin embargo, el Poder Ejecutivo no avaló hasta ahora esa posibilidad, según aclaró la vocera presidencial, Gabriela Cerruti.
Esta discusión se cruza con la de la tercerización de los planes sociales, luego de que Cristina Kirchner pidiera que estos no sean intermediados por las organizaciones sociales. La creación de un Salario Básico Universal implicaría una partida de planes mucho mayor.
El proyecto de Hagman en Diputados estipula alrededor de 9 millones, contra los 1,2 millones de Potenciar Trabajo existentes en la actualidad. Además, su administración correría por parte de la Anses, sin que los movimientos sociales actúen como distribuidores.