El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, criticó al presidente, Javier Milei, por su intención de "fundir a los argentinos" mediante el ajuste a las provincias, y pidió rever la actual Ley de Coparticipación federal, al tiempo que reclamó que el actual Gobierno "corrija urgentemente el rumbo", en medio de las negociaciones por la ley ómnibus.
"Las provincias necesitan de un Estado Nacional que reconozca los acuerdos federales y las normas vigentes. Pero sobre todo que las cumpla. Porque ajustar a las provincias no es atacar a 'la casta', es fundir a los argentinos", señaló Kicillof en sus redes sociales, en referencia a la reducción de las transferencias a las provincias que Milei comenzó a efectuar.
El mandatario provincial compartió una columna que publicó en el portal Infobae junto a su ministro de Hacienda, Pablo López, en la que criticó a la actual Ley de Coparticipación. "La ley actual de coparticipación, cuya discusión y reforma es una de las principales asignaturas pendientes de nuestro federalismo y nuestra democracia, perjudica ostensiblemente a la Provincia de Buenos Aires", afirmó, mientras agregó que "no cumple" con el mandato de la Constitución de 1994.
"La provincia de Buenos Aires no es inviable, como muchas veces han intentado instalar en estos años. Lo que resulta inviable es este sistema arbitrario de coparticipación de impuestos", agregó en ese sentido. Y afirmó, responsabilizando a Milei y a las administraciones nacionales previas, que "por eso, más allá de toda consideración adicional, no es de extrañar que en la provincia falten rutas, falten escuelas, falten hospitales, falte seguridad".
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El gobernador bonaerense reconoció que "en la provincia que más produce, vive la mayor parte de la población vulnerable de Argentina: el 58% de argentinas y argentinos pobres y el 61% de indigentes habita en la Provincia de Buenos Aires", aunque precisó que "la PBA aporta el 40% y recibe el 20%. Esta inequidad convierte a Buenos Aires en la provincia con menores recursos por habitante de todo el país".
Al mismo tiempo, Kicillof criticó la reducción de las llamadas "transferencias discrecionales" a las provincias, que en enero fue del 98%: "El Gobierno Nacional cortó de cuajo prácticamente todas las transferencias obligatorias a todas las provincias, menos la coparticipación automática".
"Se trata de transferencias que, aunque no son automáticas como la coparticipación, son obligatorias, se someten a una forma determinada de reparto entre las provincias, y, por lo general, tienen un destino específico. Para ser claros y responder a tanta nota periodística mentirosa que se publica, nada de discrecional existe en esas transferencias", subrayó.
Por último, se dirigió directamente al gobierno de Milei: "Lo que plantea el actual gobierno es muy grave. Debe corregir urgentemente el rumbo", afirmó, y dijo que "las provincias necesitan de un Estado Nacional que reconozca los acuerdos federales y las normas vigentes. Que las reconozca y, sobre todo, que las cumpla
La discusión de los gobernadores por la ley ómnibus
Así, Kicillof se metió de lleno en la discusión con Milei por los recursos destinados a las provincias, en el marco de las negociaciones por la votación en particular de la ley ómnibus que se realizará el martes en la Cámara de Diputados.
El Presidente determinó la eliminación del capítulo fiscal del proyecto de ley, quitando la posible sanción de instrumentos coparticipables como el blanqueo, la moratoria o la suba de las retencioens a los derivados de la soja. Aun así, mantuvo su objetivo de llegar al déficit cero este año y, como compensación, se propone reducir el gasto ajustando a las provincias.
Los gobernadores intentan revertir esta posibilidad y presionan al Gobierno para establecer la coparticipación del impuesto PAIS en la votación en particular. Si bien las conversaciones pasan principalmente por los mandatarios de Juntos por el Cambio y el cordobés Martín Llaryora, Kicillof se metió ahora en el debate público por el asunto.
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