Crece la tensión en las provincias por el conflicto universitario: esta mañana, en Tucumán, la policía local desalojó una clase pública en la calle, mientras las y los estudiantes buscaban visibilizar el repudio al veto presidencial de Javier Milei y los constantes ataques y recortes a la educación. Según puede verse en las imágenes, las fuerzas buscan cumplir el protocolo anti-piquete del Ministerio de Seguridad de la Nación liderado por Patricia Bullrich, que solo puede aplicarse en la Ciudad de Buenos Aires.
El reciente desalojo de la policía tucumana se da en el marco de un conflicto que escala cada vez más y que ya tiene varios antecedentes en diferentes regiones del país. Por ejemplo, en provincias de la Patagonia como Santa Cruz, la presencia de diversos efectivos de policía en los campus que alegaron haber recibido "denuncias por disturbios" o también en la provincia de Buenos Aires, cuando intentaron bloquear el ingreso a la Universidad de La Matanza (UnLaM).
Al momento en que la fuerza de Tucumán interviene, se estaba dando una clase. En las imágenes se observa cómo intentan correr los bancos y dispersar a los estudiantes que se encontraban sentados de oyentes. De esta manera, continúan violando la autonomía universitaria.
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En el marco de las tomas, alumnos de distintas universidades denunciaron presencia policial dentro y en los alrededores de las sedes educativas, una situación expresamente prohibida y que sólo puede ser avalada por una orden firmada por un juez o por pedido de las propias autoridades universitarias, lo cual no sucedió. Incluso el presidente Javier Milei ignoró este apartado de la ley al solicitar que las fuerzas de seguridad desactiven las tomas.
La vida de la comunidad educativa dentro de las universidades nacionales está regida por la Ley de Educación Superior N° 24.521, sancionada en 1995. En su artículo 5° se estipula que "la fuerza pública no puede ingresar en las instituciones universitarias nacionales si no media orden escrita previa y fundada de juez competente o solicitud expresa de la autoridad universitaria legítimamente constituida". Amparados por esta ley, los alumnos advirtieron que efectivos policiales de distintas fuerzas tuvieron comportamientos intimidatorios durante las tomas y clases públicas en el marco del conflicto universitario, que se incrementó desde que Milei vetó la Ley de Financiamiento Universitario y, más aún, desde que el Congreso lo ratificara la semana pasada.
Alerta por la presencia policial en las universidades
Este lunes, la Unidad Académica Caleta Olivia de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA) realizó una nueva asamblea en la que se decidió tomar las instalaciones por 48 horas y sumarse al resto de las casas de estudio con medidas similares. Según imágenes viralizadas en redes, un grupo de efectivos armados de la Policía de Santa Cruz ingresaron en la sede con la intención de identificar a los estudiantes que protestaban.
En tanto, estudiantes de la Facultad de Economía de la Universidad de Buenos Aires (UBA) alertaron que miembros de la Policía de la Ciudad se apostó en cercanías del edificio, en el contexto de las clases públicas en la calle que se dictan en protesta del veto al presupuesto universitario.
En esa línea, mientras los alumnos cortaban esta mañana parcialmente la avenida Independencia para dar clases púbicas frente a la sede de la Facultad de Psicología de la UBA, efectivos de la Policía porteña se acercaron a tomar imágenes y relevar la protesta. En paralelo, se montó un operativo con carros hidrantes y motos policiales en adyacencias al edificio.
Por otro lado, en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) se denunció que durante la toma de las instalaciones un móvil con efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) para exigir datos de los presentes dentro de la sede. "Se bajaron y nos pidieron unos datos. Los nombres de todos los que estábamos adentro, cuantos éramos y los nombres de los responsables políticos", dijo el presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social, Matías Fernández, en diálogo con Radio Universidad.
"Si el Rector de la UBA no llama a la policía para desalojarlos, será el GRAN responsable de arruinarles la vida a los chicos que sí quieren estudiar y de estafar a los contribuyentes que bancan la universidad pública", lanzó el presidente Milei en su cuenta de X.