Desde el Gobierno nacional le ratificaron este miércoles a los gremios convocados para celebrar una acuerdo de precios y salarios que se negociarán paritarias "sin techo". En la reunión el Poder Ejecutivo fue tajante sobre ese tema.
El jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, y el ministro de Economía, Martín Guzmán, lo revelaron en la reunión con una veintena de sindicalistas en Casa Rosada donde se decide parte del futuro de la economía del país para este 2021.
El Gobierno espera homologar ambas variables al 29% de inflación plasmada en el Presupuesto. Hoy el Gobierno recibió a los sindicalistas y representantes de los trabajadores y mañana será el turno de los empresarios.
La modalidad elegida por la administración de Alberto Fernández incluye reuniones primero por separado y eventualmente una foto conjunta una vez avanzado el criterio a imponer en las paritarias, y con la participación de nombres propios de ambos sectores por encima de sus sellos de pertenencia.
Además, ante la escalada de precios desenfrenada en el rubro de los alimentos, el presidente Alberto Fernández recibirá hoy a las 15.30 a los principales dirigentes de la Mesa de Enlace. El cónclave coincide con un pedido generalizado por la suba de los derechos de exportación para alinear los precios locales frente a la suba pronunciada en el ámbito internacional.
Los representantes del agro habían pedido una audiencia con el mandatario, luego de que Fernández mencionara la posibilidad de aumentar las retenciones o implementar cupos para exportar. El cometido de estas políticas es contener la suba del precio de los alimentos en el mercado interno.
“El Estado sólo tiene dos canales para resolver el problema”, afirmó el presidente a la señal IP en relación a la eventual aplicación de estas medidas. Respecto al rol de las entidades agropecuarias, reflexionó: “Tienen que entender que son parte de la Argentina. Yo le he dicho al ministro de Agricultura que todo tiene un punto límite. Les estoy diciendo públicamente que no puedo dejar que esto siga pasando, porque el riesgo es que con la pandemia todos estos productos van a seguir creciendo en su precio y no estamos dispuestos a tolerarlo. Los aceiteros lo entendieron y organizaron un fideicomiso, resolvieron un mecanismo de compensación entre ellos. Si no lo entienden, me obligan a resolver el problema y no pueden hacerse los desentendidos”.