El Partido Justicialista (PJ) nacional apuntó duramente contra el expresidente de la Nación, Mauricio Macri, que reapareció en tono de campaña política en plena crisis generada por la pandemia, fogoneando la grieta y alentando a marchas opositoras. Aseguraron que el hombre del PRO "nunca se hace cargo de nada" y que su discurso está basado en contradicciones entre el decir y el hacer, entre la ficción y la realidad. Recordaron que violó la Constitución en reiteradas ocasiones, que manipuló jueces, persiguió opositores e impulsó una enorme actividad de espionaje ilegal que hoy investiga la Justicia.
"Las expresiones de Macri constituyen la fiel aplicación de un manual de contradicciones entre el decir y el hacer, entre los principios y la acción, entre la ficción y la realidad", manifestó el PJ en un duro comunicado. "Con sus manifestaciones, Macri nunca se hace cargo de nada. Invoca el diálogo en el presente pero cuestiona el diálogo de su propio gobierno, a la luz de los resultados obtenidos", explicaron.
En el texto, destacaron que Macri "invoca la defensa de la Constitución Nacional cuando fue un violador serial de la misma desde el inicio mismo de su gobierno, al designar por decreto dos miembros de la Corte Suprema" y recordaron algunos hitos tristes de su gestión como "la manipulación de los jueces a su antojo, la persecución de opositores, el uso de operaciones de espionaje para perseguir a periodistas y dirigentes" que "fue un modus operandi" de su Gobierno.
Lejos de las acusaciones macristas, desde el PJ aclararon que "los desaguisados judiciales y la manipulación de la justicia fue la impronta del macrismo que destruyó la calidad institucional y pulverizó el estado de derecho" pero remarcaron el desafío de "no entrar en provocaciones estériles" que no ayudan en este delicado contexto.
Analizaron que el oficialismo, en particular el justicialismo, no debe "entrar en la provocación de agentes del odio que persiguen intereses contrarios a nuestra Patria y a nuestro pueblo". Por eso, remarcaron los objetivos fijados por el Gobierno desde el inicio de la gestión como reestructurar la deuda con acreedores privados en forma compatible con la recuperación de la economía después de una recesión profunda que nos dejó más pobreza, indigencia y desempleo, renegociar el acuerdo con el FMI en condiciones satisfactorias para el país y promover una estrategia de crecimiento con producción, empleo y exportaciones que dignifique al pueblo trabajador.
Esos objetivos estarán orientados a "poner a la Argentina de pie" con "más unidad en la diversidad", "más participación de los diferentes actores del Frente de Todos, amplificando nuestras voces desde miradas diferentes y autónomas", "reafirmando el liderazgo del Presidente de la República para transformar la realidad ante una pandemia que puso en crisis al mundo y que nos golpea todos los días".
Ante las críticas y obsesiones opositoras en torno a la figura de Cristina Kirchner, aclararon lo obvio, que "cumple el rol para la cual fue elegida por el pueblo argentino, formando parte de un proyecto político que lidera el Presidente de la República, Alberto Fernández".
El documento lleva las firmas del presidente del PJ, José Luis Gioja, y Lucía Corpacci, Rosana Bertone, Leonardo Nardini, Antonio Caló, los Vicepresidentes Consejo Nacional del Partido Justicialista.
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