"¡Viva la patria!", exclamaron algunos de los ruralista que acompañaron a Luis Miguel Etchevehere, mientras la Justicia dictaba el desalojo inmediato de la estancia Casa Nueva. La escena parecía ajena a los tiempos: el ex funcionario no dudo en abrazar a cuanta persona viera a su alrededor (más de 20), la mayoría sin barbijo.
El fallo fue seguido desde un celular en la puerta del campo por los hermanos Etchevehere, Patricia Bullrich y Leonor Etchevehere, la madre de la familia. Tras la resolución la ex ministra de Seguridad, visiblemente contenta, chocó manos con el ex titular de la cartera de Agroindustria y los presentes cantaron el himno nacional.
La jueza María Carolina Castagno, del tribunal de Apelaciones y juicio de Paraná, ordenó desalojar a Dolores Etchevehere del campo en disputa con los hermanos Etchevehere, luego de encabezar este miércoles una audiencia en la que escuchó a todas las partes. De esta forma falló a favor del ex ministro de Agroindustria y presidente de la Sociedad Rural, Luis Miguel Etchevehere.
"Al haberse demostrado en el grado de provisoriedad que requiere una medida cautelar, que los sindicados han invadido el inmueble en cuestión despojando a quienes detentaban la posesión del predio. A saber: las margaritas S.A. Carece de toda relevancia la discusión del título de propiedad o el estadio procesal del estado de posesión", leyó Castagno.
La decisión concentró la expectativa, luego de que las protestas de productores agropecuarios y el apriete de los medios hegemónicos de comunicación que publicaron perfiles de la jueza. "Espero ahora que mi hija acate el fallo como va a ser y nos demos un abrazo", afirmó Leonor Etchevehere en el ingreso al campo.
En la audiencia que tuvo lugar en Paraná, la Fiscalía y la querella ratificaron el pedido de desalojo, en tanto que la defensa de Dolores Etchevehere se expresó por mantener su permanencia en Casa Nueva, La Paz.
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