Cristina Fernández de Kirchner pidió la nulidad de todo el proceso judicial vinculado a la denuncia del fiscal Alberto Nisman, conocida como causa Memorándum, desde su reapertura por los jueces Mariano Borinsky y Gustavo Hornos hasta todo lo actuado por el fallecido Claudio Bonadio. Solicitó que se deje sin efecto el juicio, que se dicte el sobreseimiento “de todas las personas que han sido injustamente imputadas en este proceso” e hizo especial mención al ex canciller Héctor Timerman. El planteo se basa en buena medida en los documentos revelados por El Destape en la investigación sobre la Operación Olivos, donde quedaron en evidencia las numerosas reuniones del ex presidente Mauricio Macri con los jueces involucrados en esta causa.
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Para CFK es “imprescindible” e “inevitable” que se anule todo lo que hicieron estos jueces y que se los investigue en términos penales y disciplinarios para que tales comportamientos “nunca más puedan ser repetidos”. Un Nunca Más del lawfare.
CFK, a través de sus abogado Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, pidió la invalidez:
- Del fallo de Borinsky y Hornos que reabrió la denuncia de Nisman, firmado poco después de la 6ta reunión con Macri en Olivos
- De todo lo que hizo el juez Claudio Bonadio con la denuncia de Nisman, que la unificó con otra para quedársela
- De las indagatorias y procesamientos que dictó Bonadio y de las confirmaciones de las mismas que hicieron los camaristas Martín Doctrina Irurzun y Eduardo Farah
- Del pedido de elevación a juicio que hizo Bonadio
También pidió que se haga una audiencia de manera pública, transmitida por televisión, para que pueda mostrar todas las pruebas que demuestran el armado de esta causa y que se investigue a los jueces y fiscales involucrados por dos vías, en una causa judicial y por el Consejo de la Magistratura y el Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público Fiscal.
“Solicitamos que se deje sin efecto el auto de citación a juicio y se disponga el sobreseimiento de todas las personas que han sido injustamente imputadas en este proceso, con expresa mención de que la formación de esta causa en nada afecta su buen nombre y honor. También requerimos expresamente que tal mención alcance al Sr. Héctor Timerman, quien fuera sobreseído en este proceso por extinción de la acción penal” dice el escrito que firman los abogados Beraldi y Llernovoy.
El escrito y varios anexos con pruebas documentales fue presentado ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 8, que es el responsables de llevar adelante el juicio oral por la causa Memorándum. Lo preside Nicolás Toselli, que en este caso interviene junto a la jueza María Gabriela Lopez Iñíguez. La tercera integrante, Sabrina Namer, fue apartada por su paso por la UFI AMIA.
El escrito presentado por CFK repasa las innumerables irregularidades de este expediente, que van desde la insostenible denuncia de Nisman, su rechazo por todas las instancias judiciales, el armado de una causa paralela para que la tuviera Bonadio, las presiones de Macri, su reapertura por parte de Borinsky y Hornos, la unificación de la denuncia de Nisman con la causa paralela armada por Bonadio y todo lo que hizo este último para elevar el caso a juicio sin ninguna prueba, es más, eludiendo citar al ex jefe de Interpol Ronald Noble que públicamente desmintió toda la operación.
Y cita las nuevas revelaciones por las que ahora insiste con que todo se declare nulo: por un lado, las visitas 6 visitas del juez Hornos a la Casa Rosada; por el otro, las revelaciones de El Destape sobre los encuentros de Borinsky y Hornos con Macri en la Quinta de Olivos.
El escrito de CFK también señala como hechos novedosos:
- Que el gobierno de Macri adulteró los registros de acceso a Olivos que le entregó a la ONG Poder Ciudadano
- Que en una causa por espionaje ilegal donde se hizo un peritaje del celular de Dario Nieto, secretario de Macri, aparecieron anotaciones sobre Stornelli y la causa de las fotocopias de los Cuadernos
- Que el mismo celular del secretario de Macri tenía anotado “Hablar con Borinsky. Tema denuncia, administrativo y penal”
- Que Borinsky mantuvo contactos con autoridades de la DAIA para asesorarlos sobre como tenían que proceder en este expediente, según publicó Jorge Elbaum en El Cohete a la Luna.
“La causa del ‘Memorándum’ es, sin lugar a dudas, uno de los procesos judiciales más escandalosos que registra los anales de nuestra jurisprudencia. En el marco de este proceso, como fue explicado, los jueces Hornos y Borinsky tomaron una participación decisiva, sin la cual la causa jamás habría llegado a la instancia del juicio oral”, plantea CFK.
El escrito señala que mientras se reunían con Macri los jueces Borinsky y Hornos intervenían en esta causa y señala: “más allá de cuál haya sido el verdadero motivo por el que tales encuentros fueron celebrados, lo cierto es que dicha circunstancia determina por sí misma, para cualquier persona con sentido común, un temor real y objetivo de parcialidad insuperable”. Y agrega: “es tan intensa la sospecha de parcialidad que se genera a partir de los ya referidos encuentros entre Macri y los magistrados que cualquiera fueran sus motivos, la validez de su actuación no puede ser mantenida”.
“La decisión que Hornos y Borinsky adoptaron en la causa, revocando la de desestimación de la denuncia del Fiscal Nisman, coincide exactamente con lo que Macri venía propugnando públicamente desde hace tiempo atrás”, señala el escrito, que recuerda que luego de ese fallo el entonces presidente dijo: “Se ha dado un gran paso. Y han tenido mucho coraje, tanto el juez Borinsky como el juez Hornos, porque tuvieron mucha presión”
El escrito también recuerda que “la imparcialidad de Hornos y Borinsky fue expresamente cuestionada por las defensas antes de dictar la resolución antes mencionada” pero que “tales recusaciones, insólitamente, fueron rechazadas in liminepor Hornos y Borinsky, convirtiéndose en jueces de sus propios actos”
Para CFK y sus abogados los jueces Borinsky y Hornos no se ajustaron “a los estándares que gobiernan la garantía del juez natural” ni a la jurisprudencia de la Corte Suprema ni a los Proncipios de Bangalore sobre la Conducta Judicial.
El escrito presentado por CFK repasa las tropelías judiciales de Macri: el nombramiento de dos jueces de la Corte por decreto por recomendación de su operador Fabián “Pepín” Rodríguez Simón; el armado de una Mesa Judicial para organizar la persecución; las presiones contra la ex procuradora Alejandra Gils Carbó a las que define de “carácter cuasi mafioso”; el uso de la Oficina Anticorrupción y de la Unidad de Información Financiera para el lawfare “de una manera arbitraria, anómala y persecutoria”; las tareas persecutorias de la AFIP y del Banco Central; el rol de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) para el espionaje ilegal; la implementación de la Doctrina Irurzun para detener ex funcionarios kirchneristas; y el robo de una banca en el Consejo de la Magistratura y su utilización fraudulenta para desplazar el camarista Eduardo Freiler y otros desmanejos.
También hace un raconto de como, a partir de 2016, comenzó a ser citada periódicamente en causa judiciales, que incluso la hicieron afrontar 8 indagatorias en un día. “En todas las causas en las que nuestra defendida fue procesada, la instrucción quedó a cargo delos jueces Claudio Bonadío y Julián Ercolini. Ambos magistrados, a través de sorteos sospechosos y directas maniobras de fórum shopping pasaron a convertirse en jueces de atracción de cualquier causa que llevara el apellido Kirchner”, dice el escrito que presentaron sus abogados.
Y la clave: “con una única excepción, los jueces Hornos y Borinsky tuvieron intervención como jueces de la Cámara Federal de Casación Penal en todos esos expedientes”. Son los jueces que se reunían con Macri, tal como reveló El Destape, e intervinieron en las causa Dólar Futuro, Vialidad, Hotesur, Los Sauces, Fotocopias de los Cuadernos y Ruta del Dinero K. En algunas de ellas participó el fiscal Raúl Pleé, que se reunió con Macri y Gustavo Arribas en Olivos. En otras el procesado fiscal Carlos Stornelli.