El Gobierno nacional le pidió la renuncia al gerente general de Nación Seguros, Mauro Tanos. Esto se dio luego de un allanamiento, en el marco de la causa de la investigación por supuestas contrataciones irregularidades de seguros durante la gestión de Alberto Fernández.
Fuentes de la Casa Rosada confirmaron a El Destape que el Gobierno dejó cesante a Tanos, que durante la gestión anterior se había desempeñado como gerente comercial del sector público en Nación Seguros.
Tanos fue militante de La Cámpora y se desempeñó como secretario de Economía en la municipalidad de Moreno, durante la gestión de Walter Festa y también ocupó cargos en organismos estatales. Con la llegada de Javier Milei a la Presidencia, fue ascendido a gerente general de la compañía.
El funcionario está sospechado de ser el nexo con la firma productora de seguros San Ignacio, una de las que intermedió en la millonaria póliza de la ANSES. También quedó imputado el actual gerente de compras de Nación Seguros, Marcos Federico Eufemio.
La documentación que obra en el expediente judicial muestra que Tanos ofició como contacto con la firma San Ignacio, una empresa que cobró millonarias comisiones por la contratación de la póliza de la ANSES.
En la serie de allanamientos ordenados por el juez Julián Ercolini también se incluyeron los domicilios de Brian Kelly y Hernán Marcos Bressi, presidente y director suplente de San Ignacio.
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La causa se inició por una auditoría interna del actual gobierno en ANSES, que detectó la contratación de seguros a través del Banco Nación con la intermediación de “brokers”.
Ercolini apuntó a determinar por qué intervinieron intermediarios privados y también por qué Nación Seguros tercerizaba con otras compañías el servicio que, por decreto del ex presidente, los organismos estatales estaban obligados a contratar con la aseguradora del banco oficial.
En la periferia de Fernández explican que la decisión fue adoptada como una medida política para “cuidar que no se fueran los dólares” a través de aseguradoras multinacionales.
Entre los brokers aparece Héctor Martínez Sosa, marido de la ex secretaria privada de Fernández, María Cantero.
Apenas se conoció su imputación, el ex presidente definió como "una operación" la nota en el diario Clarín, que fue la base de la presentación judicia, que no participó de "ningún negociado" y que "están afectando a mucha gente de bien, simplemente porque álguien dijo que era una caja".
Respecto a la imputación, el ex presidente explicó qque"en términos técnicos es que se investigue, no es acusar a álguien". "Está bien lo que está haciendo el fiscal. Yo quiero que se investigue, porque se van a dar cuenta de la mentira que publicó Clarín".
"No soy un corrupto y he hecho de mi vida un culto a la honestidad", cerró, para luego añadir: "Yo no me llevé ni una goma de borrar del Estado".
Con información de Noticias Argentinas
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