Mediante un sorteo los jueces Julián Ercolini y Sebastián Casanello fueron elegidos para ser subrogantes en los juzgados federales 6 y 12, en Comodoro Py, respectivamente. Ambos juzgados estaban en manos de Rodolfo Canicobal Corral, quien decidió jubilarse a fin de julio.
El 6 es el juzgado histórico que comandó Canicoba Corral. Precisamente es donde se instruye la causa por el atentado a la AMIA, ocurrido el 18 de julio de 1994 y en el que aún se busca a los responsables. En tanto, el juzgado 12 estaba momentáneamente a cargo del juez desde que en 2019 Sergio Torres juró como ministro en la Suprema Corte de Justicia bonaerense. En ese juzgado tramita la causa ESMA, por los crímenes de lesa humanidad ocurridos en la dictadura en ese centro clandestino.
Según reconstruyó Infobae, el sorteo se realizó en el segundo piso del edificio de Comodoro Py. No estuvieron María Servini (porque ya está a cargo del juzgado electoral), Marcelo Martínez De Giorgi (porque tiene dos juzgados a su cargo, el suyo y el que perteneció a Claudio Bonadio), Daniel Rafecas (por acumulación de trabajo y la candidatura para convertirse en Procurador General) y Luis Rodríguez (por motivos personales que le impedirían asumir la responsabilidad de un segundo juzgado).
Tras esas declinaciones, los candidatos para el sorteo fueron Sebastián Ramos, Ariel Lijo, María Capuchetti, Sebastián Casanello y Julián Ercolini. El bolillero giró una sola vez: el presidente de la Cámara Federal, Martín Irurzun, dispuso que se hiciera el sorteo “en forma sucesiva” para evitar que un candidato saliera dos veces y quedara a cargo de tres juzgados.
La subrogancia dura un año o hasta que se defina la elección de un nuevo juez titular.