Tres fotos de trabajo en cinco días. Ese fue el book que Horacio Rodríguez Larreta y Martin Lousteau realizaron esta semana con visitas a vecinos, charlas vinculadas a la educación e integración mundial de la Ciudad y la situación electoral en Santa Fe, ampliable a la Nación. El acercamiento entre el PRO y la UCR porteños no es nuevo, pero las últimas imágenes se empezaron a tomar menos de una semana después de que Mauricio Macri bendijera a su primo, Jorge, para intentar mantener la supremacía amarilla en la Capital Federal. El mapa para el 2023 está parejo entre ambos dirigentes y apareció con fuerza un tercero, contemplado como posibilidad pero aún indefinido. Se trata del ministro de Salud, Fernán Quirós.
"Lo veo muy bien a Jorge. Estoy cada vez más convencido de que puede ser el que le dé una continuidad con cambio a la gestión de la Ciudad", dijo Mauricio sobre su primo el 18 de septiembre. El 24, seis días después, Larreta se mostró con Lousteau, el contrincante directo del alcalde de Vicente López, dialogando con vecinos en Almagro. Conversaron sobre educación, seguridad, tránsito, espacio público, cultura y economía. El clásico menú electoral.
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Los vínculos siguieron. A la foto de ese sábado se le sumó, el miércoles, una nueva. En este caso, vinculada a la educación, la integración de la Ciudad con el mundo y, también, la economía. Lousteau y Larreta estuvieron con casi 40 rectores de universidades públicas y privadas para buscar, bajo el programa Study BA, la atracción de estudiantes de otros países a la Capital Federal y, también, intercambio federal dentro de las fronteras de la Argentina. El jueves, en tanto, los dos dirigentes volvieron a estar juntos. De la reunión participaron Maximiliano Pullaro, legislador provincial radical en Santa Fe, Pablo Cervi, diputado nacional por Neuquén, Gabriel Chumpitaz, compañero de banca santafesino y Omar de Marchi, el armador nacional de Larreta, un mendocino que apunta a ser el candidato de consenso PRO en su provincia. En esa reunión se charló la necesidad de ampliar Juntos por el Cambio y promover el recambio generacional.
MÁS INFO
Más allá de los formalismos, Santa Fe es un territorio que la oposición cree poder ganar en 2023, si toman las decisiones correctas. Si bien todos tienen sus pretensiones, suena con fuerza la apuesta a algún dirigente radical, además de los vínculos con el socialismo. Después de su proyección nacional, todavía hay quienes ven a Carolina Losada en ese territorio, con altísimas chances de triunfo y ordenamiento de la alianza. Ella empezó a analizarse como una opción potable para "vice de", pero algunos consideran que le falta experiencia de gestión para poder aspirar a un salto de ese nivel. Un crítica que también le cabe a Facundo Manes. La actividad legislativa nada tiene que ver con la Ejecutiva.
De vuelta a la relación Lousteau - Larreta, los vínculos entre ambos se intensificaron en el último tiempo. Ambos venían trabajando en conjunto, de hecho uno de los grandes logros destacados por la Ciudad radica en el famoso gobierno de coalición, con fuerte presencia de los aliados a la hora de hacer consultas internas y tomar decisiones. El radicalismo de Evolución está, obviamente, adentro. Si bien aseguran que no hay ningún pacto electoral entre los dos para definir la continuidad del gobierno en 2023, en medio de las turbulencias dentro del PRO, al jefe de Gobierno le sirve mantener la mejor relación posible con el resto de los socios.
En el último tiempo se empezó a especular con un pacto entre ambas tribus para garantizar la libre competencia en las PASO, sin intromisiones, pero el PRO llevará a su propio candidato y lo apoyará explícitamente para intentar ganar. Si bien los amarillos confían ciegamente en un triunfo, tanto Lousteau como Jorge Macri están inmersos en un escenario parejo, algo que podría torcer una buena campaña. El radical ya dijo que hará lo posible para salir victorioso, no se embarcó en la contienda para perder. Y tiene el antecedente del 2015 bastante cerca en la memoria, momento en el que puso en aprietos a Larreta.
Con buena relación, lo que se garantizó se cumplirá: la PASO. Una forma de contener a los aliados de la coalición para que ninguno se vaya por fuera. Pero en el mapa también aparecen los otros nombres que, en realidad, ponen en aprietos al PRO y no a la UCR, que ya tiene a su designado. Soledad Acuña, ministra de Educación, ganó protagonismo en los últimos meses por su perfil de confrontación con gremios, alumnos, padres, docentes y el kirchnerismo en general. Pero el mejor ubicado es Fernán Quirós, el titular de Salud.
Quirós "tiene todo". Impecable imagen positiva, casi que no tiene negativa, no solo en la Ciudad sino a nivel país. Y en intención de voto también está muy bien ubicado. Tanto, que ya se lo va a empezar a medir en un cabeza a cabeza con la UCR. El funcionario había sido uno de los dirigentes barajados para encabezar la lista de diputados nacionales por la CABA el año pasado, pero declinó la propuesta para enfocarse en la gestión de la pandemia. En su momento, hasta se llegó a pensar que, si hubiera sido candidato, en 2023 ganaba las Ejecutivas con los ojos cerrados. Pero los números le siguen siendo favorables aún sin haber hecho campaña en 2021.
El ministro de Salud es el candidato de Elisa Carrió. En plena interna, desatada por ella cuando apuntó contra dirigentes de JxC por supuestos vínculos con Sergio Massa, se mostraron juntos en una charla sobre pandemia y salud mental. Pero Jorge Macri también está bien posicionado. No solo tiene el apoyo de Mauricio y parte del equipo del ex presidente sino que, hacia adentro, se reconoce su trabajo para contentar a todos los PRO, además de generar la imagen de un gestor todo terreno. A diferencia de otros posibles postulantes, tal vez más encasillados en sus ministerios, el alcalde de Vicente López aparece como un pulpo que puede tocar distintos temas. Pero todos caminarán y ganará el mejor.