Patricia Bullrich recibió el espaldarazo de Mauricio Macri. El ex presidente quiere que la titular del PRO llegue al 2023 con posibilidades y puso a su disposición varios referentes macristas de Macri. Con distintos niveles de participación, algunos se incorporaron de lleno a un equipo que, entre otras cosas, hará lo posible para tender puentes que garanticen la gobernabilidad en caso de triunfar en las elecciones, pero otros sólo se limitaron a cumplir con el pedido de su líder, que decidió darle volumen político y organización a la ex ministra de Seguridad pero no de forma exclusiva. Los lazos con el interior, sobre todo, estarán enfocados en garantizar la fiscalización, no sólo para La Piba sino para el partido en general. O sea, una estructura de la que podría gozar incluso otro candidato.
El diputado Federico Angelini y el senador Humberto Schiavoni llegaron al círculo bullrichista a pedido de Mauricio por su conexión y empatía con dirigentes del interior del país. Ambos forman parte del PRO hace tiempo, conocen las buenas y malas del partido y saben quiénes pueden aportar y quiénes no. En especial, para garantizar la fiscalización el año que viene, rol clave que deberá estar asegurado por los gobernadores e intendentes, que también serán centrales en las campañas locales. Pero esa estructura, si bien hoy se trabaja en torno a la figura de Patricia es, en realidad, una tarea más general para el espacio macrista, sea quien sea el que llegue al final de la carrera hacia las urnas. Sobre todo pensando en la gran red territorial bajo dominio de la UCR.
Para Macri es fundamental que Bullrich llegue bien preparada y con posibilidades concretas al 2023. A la ex ministra le está yendo bien en su construcción electoral pero, según se interpretó, está sobrepasada. Algo así como que el éxito la llevó a una confianza mayor y una hiperactividad. Eso derivó en una declaración llamativa, dijo que el líder PRO no será candidato a presidente. No le gustó a Mauricio. Parte del apoyo logístico también se debió a eso, a evitar errores innecesarios y, de paso, a garantizar una organización y estructura para el sector halcón.
Esta semana se reunió el equipo de la presidenta del PRO y tuvo la presencia de muchas de las figuras conocidas de su entorno, algunas nuevas pero, sobre todo, la participación de personas muy cercanas a Mauricio. Macristas de Macri, estuvieron Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos durante la gestión anterior; el ex canciller Jorge Faurie; y Horacio Reyser, ex funcionario de la Secretaría de Relaciones Internacionales de Cancillería, un hombre fundamental para el acuerdo Mercosur – Unión Europea.
En el equipo de Bullrich están también dos figuras referenciadas en Emilio Monzó, que no se sumó pero está cerca de la ex ministra. En tanto, Sebastián García de Luca y Nicolás Massot sí están dentro del círculo de la dirigenta. El ex presidente dela Cámara de Diputados durante el macrismo, en tanto, tomó el rol de articulador entre distintos referentes de Juntos y otros por fuera de la alianza con el objetivo de pensar en gobernar y no sólo en el armado de campaña.
Una figura importante es la de Javier Iguacel, intendente de Capitán Sarmiento y ex ministro de Energía de Macri. Su nombre es, al momento, la apuesta de Bullrich para la provincia de Buenos Aires aunque algunos piensan que lo mejor sería no casarse antes de tiempo con ningún candidato. A diferencia de Horacio Rodríguez Larreta, la titular del PRO considera que no es necesario poner una cara fuerte en el territorio más poblado del país porque el candidato a presidente traccionará votos de arriba hacia abajo. El jefe de Gobierno piensa lo contrario, que la cara en la boleta bonaerense empujará la candidatura Ejecutiva nacional, y por eso apuesta por Diego Santilli.
Santilli está, por ahora, enfocado en la estrategia territorial. Estuvo esta semana en San Isidro con Gustavo Posse y en Tres de Febrero con Diego Valenzuela, tal vez el que más se puso al hombro la campaña. Se mostró por Avellaneda, el lunes lo vio a Macri quien, en privado, le dice que es el mejor candidato. La semana que viene terminará de recorrer la primera sección electoral y está cerca de hacer lo mismo con la tercera para afianzar el resultado en el conurbano. Para el ex porteño, el exceso de competencia no es malo pero es necesario evitar el internismo e identificar al adversario político, el Frente de Todos.
Macri, que ya se mostró junto a Bullrich y Luciano Laspina, estuvo enojado con Larreta por una especie de ninguneo hacia su figura en 2020. Para este círculo, los operadores larretistas recurrían a los medios de comunicación para instalar la idea de que el ex presidente estaba fuera de juego, algo que no le cayó bien a Mauricio porque detesta que le digan qué puede y qué no puede hacer. Para él, el jefe de Gobierno no tiene claro para qué quiere ser jefe de Estado y considera que el camino de la moderación adoptado por Horacio ya fracasó.
De ahí, y de la necesidad de guardar su voto decisorio hasta el final, Macri quiere que Bullrich llegue. Laspina se incorporó formalmente para nuclear un equipo de economistas que trabajen en un plan de gobierno. De buena relación con Patricia y con Horacio, el diputado considera que Juntos por el Cambio no debe tener un equipo sino varios. Por ahora, está ayudando a la líder PRO a ordenar sus ideas económicas con foco en la estabilización y el crecimiento.
En la nómina bullrichista también figuran Gerardo Milman, diputado y mano derecha de la ex ministra, Hernán Lombardi, Fernando Iglesias y Waldo Wolff, también con banca en la Cámara Baja. Como se corroboró esta semana tras una invitación a una cena reducida, el ex senador Federico Pinedo está dentro de sus filas como Eduardo Amadeo.
El actual legislador porteño y ex subsecretario de Participación Ciudadana de Seguridad en CABA, Juan Pablo Arenaza, acompañó a Patricia en su viaje a Estados Unidos y forma parte del círculo íntimo, como Damián Arabia, su secretario, y la coordinación de equipos de comunicación por parte de Silvana Giudici, ex directora del Enacom. En el renglón de nuevas incorporaciones, figura Dante Sica, ex ministro de Producción. Finalmente, el diputado Pablo Torello, el senador Alfredo De Ángeli y Alberto Förhig, quien organizó su travesía por EEUU, están en el listado que hará lo posible para llegar al 2023 con chances.