Durante la tarde, mientras se debatía la Ley de Alquileres en la comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados, se dio un momento de máxima confusión que tuvo como principal protagonista al diputado nacional de Juntos por el Cambio Martín Tetaz. El radical quiso agradecerle la palabra a Cecilia Moreau, discutió que se decía "presidente" y terminó llamándola presidenta.
Moreau, diputada nacional del Frente Renovador, le cedió la palabra durante el debate y allí comenzó la fallida clase de gramática del economista. "Muchas gracias, señora presidente. Presidente, porque preside el ente, sino sería una enta y eso no existe. Así que, gracias señora presidente porque preside un ente señorita", sostuvo. Rápidamente, se iniciaron los murmullos.
Seguido de esto, Tetaz quiso chicanear: "Si usted no domina el idioma castellano... Preside el ente, por eso se llama presidente. No existe la enta". Las discusiones comenzaron a tomar más fuerza y Moreau intervino y lanzó duramente: "Diputadas... Como de quien viene". Y Tetaz, ofendido, expresó fallidamente: "Ese comentario es un poco fuera de su función de presidir la comisión presidenta".
Rápidamente se escucharon voces femeninas celebrando por la utilización de la palabra "presidenta", aplausos y una risa generalizada de las diputadas y los diputados que se encontraban en el recinto. "Evolucionamos, muy bien", lanzó una legisladora sin dejársela pasar. "Si sirve para que dominemos mejor el idioma castellano, bienvenido sea", sentenció el diputado.
Ley de alquileres: diputados irán al Congreso con tres dictámenes distintos
Este miércoles finalizó el plazo que habían acordado el Frente de Todos y Juntos por el Cambio para dictaminar reformas a la Ley de Alquileres. Luego de varias horas de debate, la Comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados realizó su última reunión y finalmente, no hubo consenso. De todas formas cabe resaltar que se llegó a un acuerdo común e irán al recito con tres dictámenes diferentes.
Tras realizar las reuniones informativas -donde participaron inquilinos, corredores inmobiliarios, ONGs y especialistas-, el oficialismo y la oposición difirieron en dos puntos centrales: los plazos de los contratos y la fórmula de actualización. La mayoría del FdT pretende respetar el "espíritu de la ley" para "proteger a los inquilinos" (mantener el plazo de tres años y el índice para la actualización, desde una fórmula que combina IPC y RIPTE). En cambio, JxC quiere volver al plazo de dos años con actualizaciones anuales y semestrales sin índice fijo de actualización.