La semana pasada, el senador y precandidato a gobernador de Juntos por el Cambio en Córdoba, Luis Juez, se reunió con Domingo Cavallo, ex ministro de Economía de los gobiernos derechistas de Carlos Menem y Fernando de la Rúa. En Córdoba, esa foto causó un rechazo sobreactuado en algunos sectores y fue un gesto hacia el ex presidente y máximo referente de la coalición opositora, Mauricio Macri, y un sector del PRO cordobés, que impulsa un acercamiento con el gobernador Juan Schiaretti. Pese a esto, no hay nada nuevo ni oculto en la relación entre el senador cordobés y el ex ministro: a principios de los ’90, cuando Juez aún militaba en la Juventud Peronista de Córdoba, se alineó junto a Schiaretti bajo el paraguas de Cavallo y así enfrentar al aparato delasotista.
Ya siendo intendente de Córdoba encolumnado en la transversalidad de Néstor Kirchner, en febrero de 2007, Juez se reunió con Cavallo: “En la Municipalidad pudimos equilibrar las cuentas después del gobierno de Germán Kammerath; pero en la provincia vamos a necesitar de técnicos ortodoxos y heterodoxos para solucionar el rojo que nos va a dejar (José) De la Sota”, dijo esa vez, hace 16 años el líder del Frente Cívico.
Esta vez, en la reunión realizada en La Mundial, un bar y centro cultural que dirige Rafael Pontieri en la vecina ciudad de La Calera -es candidato a intendente de Juntos por el Cambio y puede destronar al peronismo que gobierna desde 2007-, almorzaron el senador y líder del Frente Cívico, el ex ministro y ex hombre fuerte de la Fundación Mediterránea; y los presidentes de los partidos que integran la coalición: el diputado radical Marcos Carasso; Ernesto Martínez (Frente Cívico) y Javier Pretto (PRO).
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“El almuerzo entre Juez y Cavallo lo organicé yo, tenemos una inflación anual de casi 100%, los salarios de los trabajadores registrados le dan pelea a la inflación en contadas actividades; otros sectores no llegan en paritarias a alcanzar los índices de inflación; y ni hablar de los trabajadores no registrados, ni de los monotributistas. Por eso, escuchar lo que nos tiene que decir el doctor Cavallo, que durante una década permitió estabilizar el país, sin inflación, es necesario. Además, es un mensaje al Círculo Rojo, Luis Juez fue previsible entre 2003 y 2007 cuando fue intendente de Córdoba y era un producto social de la crisis del ´que se vayan todos’; y es previsible hoy, 20 años después. Que Córdoba, que produce alimentos para 170 millones de personas tenga 40% de pobres, que haya pibes que se van a dormir sin comer, es una herejía. La sociedad necesita de consensos, de acuerdos, de programas”, confió Pontieri a El Destape.
Mientras que Luis Juez, nuevamente dio la misma explicación que hace 16 años, sobre su reunión con Domingo Cavallo: “Queremos saber en el estado en que va a quedar Córdoba después de 24 años de gobierno de Schiaretti y (José) De la Sota. Cavallo sigue siendo un economista muy relacionado y le fuimos a consultar acerca de la deuda externa en dólares de Córdoba y él nos confirmó lo que dicen los otros economistas a los que fuimos a consultar, como Carlos Melconián de la Fundación Mediterránea o los de la Bolsa de Comercio de Córdoba: el 98% de la deuda de Córdoba es en dólares y es una bomba de tiempo”, le explicó el senador a El Destape.
Según datos oficiales del Gobierno de Córdoba, publicados al 31 de octubre del año pasado, el Estado provincial tiene una deuda de $ 392.457 millones, de los cuales el 96,8% está nominado en moneda extranjera: 92,8% en dólares (US$ 2.247,8 millones); 5,9% en euros (€ 144,8 millones) y 1,3% en dinares kuwaitíes (9,3 millones). El resto de la deuda de Córdoba, $ 12.552 millones, debe abonarse en moneda nacional y otros instrumentos anclados al peso argentino.
“No sólo Cavallo, todos los especialistas a quienes les consultamos, a lo que se le llama el Círculo Rojo, la Fundación Mediterránea, la Bolsa de Comercio, la Cámara de la Construcción, la Unión Industrial de Córdoba, coinciden en lo mismo, Schiaretti nos deja una bomba de tiempo con consecuencias no sólo en lo financiero, sino también en lo social. Y ya lo estamos viendo, según el INDEC, no lo digo yo, en el Gran Córdoba, el 40% de las familias están bajo el índice de pobreza. Y con la inflación de casi el 100% anual, esos índices se van a multiplicar. De eso estuvimos hablando con Cavallo”, señaló el precandidato a gobernador de Juntos por el Cambio.
Fuertemente enfrentado a Mauricio Macri y un sector interno del PRO cordobés que quiere romper Juntos para aliarse con Schiaretti y su candidato Martín LLaryora, el líder del Frente Cívico le contó a El Destape que “la alianza de Schiaretti con Macri, no es sólo ideológica de la época en que los dos estuvieron en SOCMA; o de cuando Franco Macri hacía negocios con Menem y Schiaretti era secretario de Industria. La alianza de Schiaretti con Macri es por los negociados en la obra pública, uno de los principales contratistas del Estado en Córdoba es Supercemento de Angelo Calcaterra, primo de Macri. No es casual que Macri se meta en la interna de Córdoba para beneficiar a Schiaretti; en 2015, Macri lo hizo gobernador a Schiaretti, y en 2019, lo hizo emperador de Córdoba. Ahora juega fuerte para romper, pero Rodrigo (De Loredo) es una persona inteligente, y los radicales, como nunca, que son un partido ávido de poder, saben que pueden volver a gobernar Córdoba con Juntos por el Cambio, no se van a dejar engrupir por estos dos tipos que lo único que les interesa es seguir haciendo negocios”.
Fin de ciclo
Para el líder del Frente Cívico “en Córdoba hay un fin de ciclo. Casi 25 años gobernados por dos tipos, hace que pierdas reflejos y te pasen cosas horribles como la Policía de gatillo fácil que no sólo asesinó a Blas Correas, sino que mata a pibes de los barrios de la periferia; o la muerte de los bebés en el Neonatal; o el accidente de Oscar González, tercera autoridad de la Provincia, donde murió una mujer de Traslasierras, que destapó una red de prebendas. Todo eso se va a terminar, pero a partir del 10 de diciembre, cuando gobernemos Córdoba, la vamos a encontrar detonada, y para eso nos reunimos con Cavallo. La reunión no fue secreta, ni a espaldas de nadie. La hicimos a plena luz del día, en un bodegón y centro cultural de La Calera y estuvieron las autoridades de los partidos de Juntos por el Cambio, Marcos Carasso, Javier Pretto y Ernesto Martínez. No le fuimos a ofrecer un cargo a Cavallo, fuimos a consultarlo sobre economía y finanzas. También me reuní con Melconian, Guido Sandleris y Osvaldo Giordano, ministro de Finanzas de Schiaretti. No queremos tener sorpresas”.
Luis Juez le dijo a El Destape que “el Círculo Rojo, el poder real en Córdoba, que cohabitó con (Eduardo) Angeloz en los primeros años de democracia; o con (José) De la Sota y el cordobesismo, que eran dos políticos que hacían política; con Schiaretti encontró un administrador que gracias a Macri y al kirchnerismo que mandó a votarlo en 2019 logró un poder absoluto que nunca tuvieron ni Angeloz ni De la Sota, con mayoría absoluta legislativa, con una Justicia adicta, con la suma del poder público. Ese mismo Círculo Rojo, le desconfía a (Martín) Llaryora, que es un tipo que ha tercerizado absolutamente todo en la Municipalidad (de Córdoba), y así como desconoció al delasotismo y a los delasotistas, va a desconocer a los schiarettistas. No son pocos los peronistas que nos vienen a ver, los delasotistas que se suman a nuestro proyecto para terminar con este robo”.
-¿Va a haber acuerdo con De Loredo para saldar las internas de Juntos por el Cambio?
-Va a haber acuerdo entre los partidos que integramos Juntos por el Cambio. Reitero, Rodrigo (De Loredo) es una persona inteligente y no va a dilapidar su capital político por un capricho. En 2021, la fórmula Juez senador–De Loredo diputado fue votada por 1.045.000 cordobeses, sacamos casi el 55% de los votos. Todos sabemos que no podemos ser funcionales a la estrategia del peronismo, que es dividirnos; aunque algunos pícaros que siempre hicieron negocios con el peronismo, quieran seguir haciéndolos. No podemos cometer errores que venimos cometiendo desde hace 24 años. Es una irracionalidad, sería de una ingenuidad enorme entrar a un proceso electoral interno, primero porque necesitamos $ 230 millones que no tenemos, ¿quién va a poner ese dinero? Además, es una obscenidad gastar esa cantidad de plata. Y segundo por el desgaste político, si el proceso electoral interno entra en un marco de judicialización, cae en manos de una jueza electoral como Martha Vidal, que ya conocemos, fue la que convalidó el fraude en 2007 y es militante de Hacemos por Córdoba. Como no hay forma de garantizar que eso no vaya a suceder, es más sensato sentarse a discutir y ponernos de acuerdo. A nosotros nos preguntan si va a haber internas, si va a haber acuerdo, si nos vamos a romper. Pero al peronismo de Córdoba, nadie le pregunta por los negociados de Schiaretti, ni por qué Llaryora fue puesto a dedo; ni por la fecha de las elecciones. El 1 de febrero Schiaretti va a hablar en la Legislatura, vamos a esperar que anuncie la fecha de las elecciones y nos vamos a quedar esperando.
-Las fechas tentativas son el 14 de mayo o 25 de junio…
-La fecha la sabe Schiaretti, que se está retirando de la política. No puede reelegir. Guillermo Seita, que es un paseador de perros, lo utiliza, lo pasea, lo muestra a Schiaretti, pero no mueve el amperímetro. Otra vez lo muestra a (Omar) Perotti o a (Facundo) Manes. Schiaretti tiene su interna con Llaryora por la fecha de las elecciones, no se ponen de acuerdo. Si se va muy atrás, las va a pegar con las PASO y no va a poder jugar en las nacionales, como quiere Seita. Si las adelanta, gane o pierda el peronismo, le va a pasar lo del ‘pato rengo’; nadie va a hablar con él, realmente Schiaretti está en una encrucijada. Pero nos piden definiciones a nosotros.
-Hablando de definiciones, el viernes llega a Córdoba, Patricia Bullrich, que fue aliada suya en 2021. Usted fue a Costa Salguero al acto de fin de año con Larreta. ¿A quién prefiere como Presidente?
-Nosotros estamos enfocados en ganar Córdoba. Cuando venga Patricia (Bullrich) me voy a reunir con ella, seguramente también estará Carmen (Alvarez Rivero). Todo aquel dirigente nacional que sume para nuestro triunfo, para que Juntos por el Cambio gobierne Córdoba, es bienvenido. Vino Gerardo Morales y dijo que no había ninguna posibilidad de un acuerdo con Schiaretti, que Juntos por el Cambio debe gobernar Córdoba. Patricia y Horacio (Rodríguez Larreta) también se expresaron en ese sentido. Nosotros lo que les decimos a todos es que necesitamos ganar Córdoba, el triunfo de Juntos por el Cambio en Córdoba es muy simbólico a nivel nacional. Es como Marcos Juárez, no podíamos perder Marcos Juárez; y ahora no podemos perder Córdoba. Si ganamos Córdoba, también van a ganar Patricia y Horacio, no le quepa ninguna duda.
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