Con un escenario dinámico y cambiante, Juntos por el Cambio avanza, de la mano del progresismo y el socialismo santafesinos, en la conformación del frente de frentes para intentar vencer al peronismo en las elecciones ejecutivas del año que viene en esa provincia. Todavía algunas definiciones están en el limbo, desde la fecha de los comicios, que podrían retrasarse, hasta el ingreso de uno de los espacios políticos locales por discrepancias a nivel nacional, pero en los próximos días podría haber definiciones importantes para terminar de configurar el panorama que funcionará como telón de fondo de la campaña 2023.
Este miércoles, el radicalismo provincial tendrá una reunión para analizar cómo encarará la estrategia para intentar convencer al socialismo de sumarse al armado. El encuentro entre ambos espacios políticos será bilateral, probablemente la semana que viene. Hasta ahora, se pusieron plazos constantemente para llegar a alguna definición pero, parte de la negociación, se cedió frente a los tiempos socialistas con la intención de concretar la alianza.
Una de las cuestiones solicitadas es la reivindicación de los gobiernos socialistas en Santa Fe, algo que Juntos por el Cambio anula. Además, y tal vez el condicionamiento más importante, la intención de avalar o vetar candidatos nacionales, puntualmente del macrismo. El espacio no compartirá la propuesta electoral de Cambiemos a nivel país, específicamente hay resquemores con los sectores más duros, por lo que sólo podría llegar a darse un armado local.
Ese sería un punto central a la hora de conocer la fecha de los comicios. Se empezó a especular con la posibilidad de retrasar las elecciones provinciales y hacer las generales entre la PASO nacional y la general nacional. O sea, en plena campaña por la Casa Rosada. Eso le imprimiría a lo local un tinte presidencial, complicando un poco la sumatoria de los socialistas. El grupo mostró un veto claro a Mauricio Macri y a Patricia Bullrich, poniendo límites a la sociedad dado que las urnas provinciales y nacionales estarían intercaladas. Sin embargo, por una cuestión de armados disponibles y posibilidades ofrecidas, un dirigente especulaba con que, tarde o temprano, ingresarían al frente de frentes. Si no llegara a suceder, tampoco verían complicados sus números.
MÁS INFO
Si el socialismo llegara a formalizar su adhesión a este gran grupo anti oficialismo santafesino, probablemente llevaría a sus propios candidatos para disputar una interna dentro de este nuevo espacio. Se especulaba con la posibilidad de que la diputada provincial por el Frente Progresista Cívico y Social, Clara García, pueda dar la batalla por la gobernación.
Antonio Bonfati, titular del Frente Progresista, fue corriendo la vara, el límite de la derecha posible para acordar y ahora podría darse el pacto. Pero ese enorme grupo está compuesto por varios espacios, entre los cuales está el indefinido socialismo. Otro de los partidos integrantes es Creo, de Pablo Javkin, actual intendente de Rosario, que estaría confirmado como parte del nuevo frente de frentes. El progresismo estaría dentro en cualquier escenario, incluso sin el socialismo.
Por otro lado, el macrismo. Federico Angelini, vice del PRO y diputado nacional, quiere proponer una oferta amarilla para las PASO locales el año que viene, con él como candidato a gobernador. Fue la persona que recibió a todas las figuras importantes de su partido en la provincia, desde Mauricio Macri hasta María Eugenia Vidal, pasando por Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. Hombre del ex presidente, empezó a trabajar de forma clara para la campaña de la ex ministra de Seguridad ante la posibilidad de que el señor de la FIFA no se posftule en 2023.
A ese armado exploratorio y a la chance de que el socialismo ingrese con algún candidato propio, se le sumaron dos taquilleros del radicalismo, tal vez la opción más fuerte para el año que viene dados los resultados de los comicios 2021. Por un lado, Carolina Losada, la senadora a quien varios ya comenzaron a sondear como posible candidata a vicepresidenta, pero que la UCR quiere compitiendo en Santa Fe para hacer carrera y generar una opción potable. Si no llegara a ser ella, podría lanzarse Dionisio Scarpín, compañero de bancada con quien ya se mostró en recorridas.
Por otro lado, el otro nombre radical sería el de Maximiliano Pullaro, actual diputado provincial y ex ministro de Seguridad de Miguel Lifschitz. Su nombre iría en tándem con el del PRO Gabriel Chumpitaz para competir en la ciudad de Rosario, actual diputado nacional y ex concejal de ese distrito clave para la provincia.
Este mapa dependerá, en gran medida, de la fecha de las elecciones. Si las gemerañes pasaran de junio a septiembre, los comicios estarían atravesados por lo nacional y el socialismo podría no tener intenciones de sumarse. A Omar Perotti, en tanto, un retraso le permitiría tener tiempo para instalar un nombre fuerte para el peronismo o para, en caso de perder, evitar una transición muy larga. El Frente de Todos encarará una interna local con, por ahora, tres nombres. Por un lado, alguno elegido por el actual gobernador, también estará presente la línea de Agustín Rossi, con Leandro Busatto, y finalmente Marcos Cleri, que se subió a la pista.
En los apoyos nacionales, Pullaro tendría el aval de Martín Lousteau y de Horacio Rodríguez Larreta mientras que Angelini contaría con los apoyos de Bullrich y Macri. En tanto, Losada retendría la banca de la UCR institucional, con Gerardo Morales detrás y figuras importantes como Luis Naidenoff, su pareja y senador por Formosa. En el distrito podría haber PASO todos contra todos lo que, según especificó una fuente, no generaría inconvenientes porque los dirigentes mantienen buena relación entre sí y no generaría cortocircuitos sino un atractivo interesante.
Otro escenario posible, bastante diferente, podría mostrar a Cambiemos con un solo candidato enfrentado al socialismo y/o progresismo. En este caso, la alianza podría aglutinarse tras la figura de un radical, tal vez Pullaro, porque Losada volaría a latitudes nacionales, Scarpín no levantaría en las encuestas y, por diferencias partidarias internas, el PRO no llegaría con su propuesta. Entonces, esa única boleta se enfrentaría, tal vez, a Javkin y, en caso de sumarse el socialismo, algún referente de esa tribu.
Santa Fe es una de las provincias que la alianza apuesta a conquistar el año próximo para extender y consolidar el cordón centro del país. En ese deseo electoral también ingresa Entre Ríos, con Rogelio Frigerio a la cabeza, además de las ya gobernadas, como Corrientes y Mendoza, con fuertes intenciones de competir cabeza a cabeza con Juan Schiaretti en Córdoba, con Rodrigo de Loredo o Luis Juez, y dar una buena batalla en Buenos Aires con Diego Santilli o Cristian Ritondo y la enorme lista de postulantes.