"Sin prisa pero sin pausa", prometió al asumir el jefe de Gabinete, Juan Manzur, que será el nuevo ritmo de gestión, que incluirá una inusual impronta mañanera. Luego de abrir el primer día en el cargo en conferencia de prensa con la ministra de Salud, Carla Vizzotti, con el adelanto de las aperturas sanitarias, lo cerró 12 horas después junto al ministro de Trabajo, Claudio Moroni, junto a quien comunicó el aumento del salario mínimo, vital y móvil, el primero de los anuncios económicos que se aguardan para los próximos días. Para el miércoles convocó a una reunión de gabinete a, nada menos, que las 7.30 y se esperaba que luego se informen medidas para jubilados y los sectores más postergados. El nuevo estilo ya comenzó a mostrar sus características.
No es que antes se trabajara poco, para nada. Al contrario, si se lo compara con la época de Mauricio Macri, las jornadas laborales de la gestión de Alberto Fernández son largas y sin descanso, ni siquiera durante los fines de semana. Pero tienen un estilo noctámbulo, no son raros los anuncios a última hora. Sin ir más lejos, el nuevo gabinete se conoció el viernes a las 22.15. También es cierto que las conferencias referidas a la pandemia fueron, por lo general, mañaneras, pero sin compañía de funcionarios de otras áreas. "Siempre arranca muy temprano", comentaban cerca del flamante jefe de Gabinete. Si se combina con la ya famosa costumbre madrugadora del flamante ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, seguro que los programas radiales de la primera mañana tendrán material para entretener a sus oyentes.
La conferencia de Vizzotti del martes tenía la suficiente importancia para el acompañamiento de Manzur. El esquema de aperturas presentado buscó mostrar una salida clara e inminente del largo año y medio de pandemia que terminó por agobiar a la economía y a la población. De audaz, terminó poniendo en un laberinto a la oposición, acostumbrada a rechazar cualquier cosa que plantee el Gobierno. El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, dejó trascender que no estaba de acuerdo con el fin de los barbijos al aire libre. En la Casa Rosada estaban convencidos de haberse anotado un poroto.
Una medida por día
Pero el Gobierno tiene claro que la derrota en las PASO tuvo raíz en la situación económica y que la posibilidad de revertir el resultado en noviembre pasará por el bolsillo de la gente. El aumento del 52,8% del salario mínimo, vital y móvil proyectado para el año que va de marzo 2021 a marzo 2022 tiene un color totalmente diferente al 35% en infinitas cuotas, tal como había sido el acuerdo original. Manzur y Moroni destacaron además que un aumento tan importante hubiera salido aprobado unánimemente entre representantes del Ejecutivo, sindicalistas y empresarios.
En la reunión de gabinete tempranera quedará definido el esquema de los próximos anuncios, para los que a cada ministerio se les pidió que aceleren su agenda todo lo posible. Luego la actividad se trasladará a José C. Paz, donde Alberto Fernández encabezará lo que se espera sea el primer acto político masivo de su gestión, al inaugurar la Facultad de Medicina local. Será en los hechos el relanzamiento de la campaña del Frente de Todos -del nacional y del bonaerense- en uno de los municipios que consiguieron mantenerse en pie en la ola de malos resultados.
Es posible que allí mismo, el Presidente anuncie los beneficios acordados con la titular de la Anses, Fernanda Raverta, que tienen que ver con un bono para jubilados y beneficiarios de la AUH. También daba vueltas la versión sobre un nuevo IFE -o algo similar- para quienes no perciben ninguna ayuda social -ni AUH, ni Tarjeta Alimentar, ni Potenciar Trabajo-, calculados en unos tres millones de personas. Se hablaba de 15 mil pesos a cobrar en octubre. Pero no había precisiones, ni tampoco confirmaban si también se anunciaría hoy o quedaría para los próximos días porque la idea es sembrar los días de buenas noticias.
En esa línea, el viernes, confirmarían la suba del mínimo no imponible de Ganancias, que pasará de 150 a 175 mil pesos brutos. El anuncio correrá por cuenta del Presidente y del titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien convirtió este tema en su especialidad, dado su link con la clase media. Además, Massa presentó el martes un proyecto de ley en Diputados para otorgarle un perdón fiscal a pymes y asociaciones sin fines de lucro con deudas con el fisco que no excedan los 100 mil pesos.
A puro vértigo, los primeros pasos del nuevo gabinete buscar dar la idea de una nueva etapa. Pero está claro que nada tendrá el efecto deseado si la gente no lo percibe en sus bolsillos. En eso están.
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