El electo jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, tiene casi todos los casilleros definidos para su Gabinete con el que gobernará desde el 7 de diciembre. La confirmación de Néstor Grindetti como jefe de Gabinete y los primeros nombres que se conocen para ocupar los 10 ministerios que tendrá la gestión porteña exhiben “una fuerte impronta PRO”. Se divide Justicia de Seguridad y se suma la cartera de Infraestructura con el objetivo de avanzar con la autonomía de la Ciudad. Mañana anunciará el nombre de Waldo Wolff para Seguridad y Fernán Quirós se encamina a continuar en Salud.
Con el escenario electoral dilucidado, desde este jueves Macri empezó a comunicar el equipo que lo acompañará y junto a Grindetti, a cargo de la coordinación de los ministros, dio a conocer también el nombre de Gabriel Sánchez Zinny como vice del todavía intendente de Lanús. La idea es comunicar a diario los distintos ministros y mañana será el turno de Waldo Wolff a cargo de Seguridad con Diego Kravetz como su vice.
Así, se separa el área que buscará mejorar la imagen de la gestión que dejó Eugenio Burzaco de la de Justicia, que pasará a estar bajo el mando de Gabino Tapia. Se trata del actual jefe de Gabinete de Macri en el Ministerio de Gobierno y quien tendrá la misión de administrar la relación con el Poder Judicial. Sobre esto, el mismo 7 de diciembre se definirán los tres lugares que corresponden a la Legislatura en el Consejo de la Magistratura.
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En las próximas horas se conocerán los responsables de las carteras de Hacienda y Finanzas, Educación y Salud. La primera permanece bajo siete llaves y se podría definir este viernes. Lo seguro es que no continuará Martín Mura y uno de los nombres que circula es el de José Donati, muy cercano a Néstor Grindetti y actual director de Estadística y Censos de la Ciudad. La segunda será para Mercedes Miguel, mientras que la tercera no tiene el nombre cerrado aunque suena con más fuerza la posibilidad de que siga allí Fernán Quirós, el ministro de Larreta con mejor imagen. Sin embargo, en Ciudad aclaran que resta una conversación entre Quirós y Macri.
En Desarrollo Económico estará Roberto García Moritán, el actual legislador liberal que en la previa al cierre de listas desistió de competir como precandidato a Jefe de Gobierno y brindó su apoyo al postulante del PRO. En Espacio Público e Higiene Urbana habrá otro funcionario del riñón de Macri ya que será para Ignacio Baistrocchi, exjefe de Gabinete del municipio de Vicente López.
Otro nombre importante del esquema Macri es el de César “Tuta” Torres. Actual subsecretario de Gobierno y uno de sus armadores territoriales, trabaja junto al primo del exPresidente desde 2011. Tendrá un importante lugar cerca del electo jefe de Gobierno.
Aunque restan definir nombres, a priori se observa poca presencia de mujeres y sin presencia relevante para los socios de Juntos por el Cambio. Es una de varias diferenciaciones que buscará exhibir respecto de Larreta. Macri decidió disolver el ministerio de Gobierno, el que tiene a su cargo, y sumar el de Infraestructura. Aunque no se sabe aún quién recaerá allí, esa cartera trabajará sobre temas vinculados a la autonomía de la Ciudad. Macri quiere que pase a la administración porteña la estación de Retiro, el puerto y distintos espacios públicos. También Infraestructura tendrá a cargo la construcción del viaducto del tren Sarmiento.
Restará saber de todos estos nombres quiénes serán los voceros de la gestión, algo que se definirá en estos días y que dependerá también de los temas de coyuntura. Sin embargo, el que más resalta por su trayectoria en el PRO y experiencia de gestión es el de Grindetti. Se trata de un “amarillo puro” que entre los años 2007 y 2015 fue titular del Ministerio de Hacienda bajo la gestión de Mauricio Macri. Hombre clave en el proyecto porteño del PRO y Jorge Macri lo reconoce: “Ordenó las cuentas públicas y logró multiplicar el presupuesto para obras”.
Desde su equipo destacan que, además de coordinar el trabajo de los ministros, “hará un seguimiento de los programas de gobierno, estará a cargo de los institutos de formación, la modernización de la gestión y atenderá la relación política con gremios y legisladores”.
La Ciudad es el epicentro de marchas y piquetes por la crisis social y económica que devalúa los ingresos de los trabajadores y, en especial de los más vulnerables. Macri se rodea de dirigentes con experiencia en gestión y músculo político en el marco de un país que será gobernado por Javier Milei, un presidente que no cede en sus propuestas de ajuste de gasto público. De aplicarse, estas medidas anticipan un incremento de la conflictividad social y, como ocurre siempre, la Ciudad será epicentro de marchas y piquetes de organizaciones sociales y gremiales que reclamen ante la devaluación de los ingresos.
La que deberá enfrentar esa conflictividad será la Policía de la Ciudad y lo que allí ocurra repercutirá en la sede de Uspallata. Restará dilucidar, si eso ocurre, cómo será la relación entre Macri y Milei como también la de sus respectivos equipos. En principio esta tarde, fuentes del equipo libertario afirmaron a El Destape que la cartera nacional de Seguridad estará a cargo de Patricia Bullrich, que ya había ocupado ese ministerio durante el gobierno de Mauricio Macri. En otras palabras, el diálogo y la negociación será entre dirigentes del PRO. A priori, una fuerte coincidencia en una frase que repetirán tanto Wolff como Bullrich: “Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”.
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