Miles de trabajadores y trabajadoras despedidos por el gobierno de Javier Milei intentaron ingresar este miércoles a la mañana a sus puestos tal como establece la legislación laboral, pero tres fuerzas de seguridad (Prefectura, Gendarmería y la Policía Federal) se lo impidieron. En la secretaría de Trabajo sobre Avenida Leandro N. Alem 650 despidieron a 600 personas quienes intentaron ingresar para reclamar los despedidos. El ministro de Infraestructura bonaerense, Gabriel Katopodis, estuvo en dicha sede acompañando a las y los miles de trabajadores despedidos. “No solucionas nada rompiendo todo, no es dejando a la gente en la calle como las cosas mejoran”, expresó a El Destape Mundo AM 1070.
El ministro del gobierno de Axel Kicillof hizo especial hincapié en el trabajo que realizaban los y las empleadas de la secretaría de Trabajo: “Tienen otras tareas realizar los controles del trabajo en negro que ahora no se va a hacer”, dijo. En tanto, se refirió a la “militarización” de los ministerios: “Es un signo de debilidad del gobierno que esté todo militarizado, eso significa que no puede dialogar ni sentarse en una mesa y explicar por qué tomó estas decisiones”.
“Hay 15 empresarios millonarios de la Argentina que aplauden y cada vez que pasó esto en Argentina a todos nos nosotros nos joden la vida”, dijo sin pelos en la lengua y agregó: “Es una receta repetida la de desguazar el Estado, es un modelo que ya vivimos”. “No es que no hay plata en la Argentina, el gobierno decidió sacar la plata de un lugar y ponerla en otro”, retrucó.
Finalmente, Katopodis hizo referencia a las elecciones pasadas perdidas por el peronismo y remarcó que “tal vez perdimos por no haber estado cerca y la responsabilidad que tenemos todos es estar cerca”. “La oposición se va a reagrupar y va a encontrar su camino en la medida que esté cerca de la gente”, cerró.
Sigue la ola de despidos
Hasta el momento ATE registró más de 11 mil despidos a través de notificaciones oficiales, pero el vocero presidencial Manuel Adorni adelantó que echarán a un número de "alrededor de 15.000 trabajadores". Es decir que una gran parte de los empleados se enterarán que fueron echados cuando llegan a sus puestos.
"Qué peligrosos seremos los trabajadores del Servicio Meteorológico que nos mandaron a 10 gendarmes. Les dieron una sala para que estén cómodos, que no se mojen y estarán esperando para cuidarnos cuando hagamos la asamblea", dijo Ana Saralegui en El Destape Radio.
"Me quiebro porque nunca pensamos que íbamos a estar en esta situación. Es muy feo entrar al ministerio y ver a los compañeros que son despedidos en una lista y con la policía de fondo que no te deja pasar los molinetes", dijo entre lágrimas Gustavo Olmos, delegado de ATE Capital en el Polo Científico.
Uno de los momentos más dramáticos se vivió cuando una mujer de 67 años, con 15 años de antigüedad laboral, se quebró en vivo de la televisión: "Me mandaron una notificación de que se termina el contrato y me quedo sin ningún ingreso hasta que me salga la jubilación".